Serendipia (Sasuke Uchiha)

Capitulo 23

Una voz y unos gruñidos se escuchaban en la lejanía, desde mis sueños, con pesadez abrí los ojos y pude escuchar perfectamente los quejidos que provenían de Sasuke, que poco a poco tomaban intensidad.

—____...— Sentí ternura al escuchar mi nombre de sus labios, pero desapareció en el instante en que él comenzó a llorar, algo definitivamente no andaba bien.

—No... No, no, no, ¡NO!— Aún seguía dormido, pero su voz se hacia cada vez mas dura y rasposa.

—Sasuke...—Trataba de despertarlo, pero parecía imposible y sentí miedo en el momento en que él comenzó a gritar con desesperación

—¡No ¿Por que?!— Me destrozo verlo llorar de forma tan desesperada y dolorosa, mientras aún dormía, aunque seguía llamándole parecía no escucharme en lo absoluto

—¡Por favor, no!— Y entonces se sentó con brusquedad sobre la cama, parecía por fin haber despertado, pero aún lloraba y se lamentaba en voz alta si parar.

Me lastimaba verlo tan perdido entre dolor y desesperación

—¡Esta bien!— Dije en el momento en que lo envolvía entre mis brazos con fuerza

—Esta bien, todo esta bien— Sentía chocar su pecho contra el mío con una respiración agitada y aun le escuchaba llorar —Yo estoy aquí, contigo— Acaricie sus cabellos negros con suavidad.

Estuvimos así por unos minutos hasta que él mismo se separo de mí, esos hermosos ojos suyos aún estaban hinchados y llorosos.

—Solo fue una pesadilla— Acaricie su mejilla

—Si...— Contesto aun con una voz pesada

—¿Quieres contarme sobre ella?— Pregunté, intentando no incomodarle

—No, tal vez por la mañana— No termino de hablar mientras me veía fijamente, lo que hizo que me preocupara.

—¿Qué sucede?— Pregunté

—¿Por qué estas llorando...?— Con su mano limpio la lagrima que había humedecido mi mejilla.

—No lo sé...— Contesté y en al instante él me abrazo por la cintura y pego su rostro sobre mi pecho —Solo quedate conmigo, por lo menos solo hasta que dure esta reencarnación—

—Yo siempre estaré contigo— Fue lo que yo prometí, sin embargo él no parecía pensar igual que yo.

Pero parece ser que su pesadilla se convirtió en una realidad.

Fui a la revisión médica que Sakura me recomendó, pero nada salió como deseábamos.

Recostada en una cama de hospital, solo observando el cielo que se dejaba mirar por la larga ventana. Conectada a un suero para mantener mis energías arriba, todos decían que estaba enferma, pero yo no me sentía así.

La puerta de la habitación fue abierta, reconocí los pasos de la persona que se acerco a mi camilla, no quite la mirada del ventanal, sabia muy bien lo que vendría con él, una discusión.

—Ya lo sabes ¿No es así?— Pregunte, pero él no dijo nada —Piensa bien lo que va decirme... porque no habrá marcha atras— Hable tranquila, cuando un par de aves cruzo el cielo.

—No hay nada que pensar, ya habíamos hablado sobre esto y no voy a cambiar de opinion— Aunque esperaba ese tipo de respuesta, no pude evitar apretar las sabanas con mis manos, por miedo y decepción.