Pasos de bebé 『ᴮᵃⁿᵍⁱⁿʰᵒ/ᴹⁱⁿᶜʰᵃⁿ』

Sᴛᴇᴘ Fɪғᴛᴇᴇɴ

  Entró a la cafetería con una sonrisa tan radiante que HyunJin le dedicó su mejor cara de asco.

—Has follado —fue como le recibió su mejor amigo.

  MinHo le golpeó en la nuca, regañándole por el vocabulario empleado, aunque no fuese realmente necesario, las personas de ahí no parecían entender el coreano, por suerte.

—¿Por qué tienes que ser tan malhablado? —rodó los ojos mientras tomaba asiento y miraba la carta, acababa de desayunar así que tomaría un café helado nada más. HyunJin ya había pedido un pastel de fresa y un café cargado.

—Porque es la única explicación lógica para que estés tan contento un domingo a las once de la mañana, especialmente si realmente quedaste para emborracharte con Christopher en la noche —su amigo disminuyó la voz, como si notase algo con sus propias palabras —. Me equivoqué antes —rectificó y una sonrisa burlona se formó en sus labios —, te follaron anoche.

—¡HyunJin! —miró a todos lados, rezando porque realmente nadie entendiese a su amigo o le iba a despellejar y darle su carne como almuerzo a su propio perro.

—¿Acaso me equivoco? —enarcó una ceja divertido.

—Sí, te equivocas, porque nosotros no “follamos”, nosotros hicimos el amor —dijo seguro y sonrió ante el recuerdo de lo tierno que había sido con él en todo momento. Christopher Bang era una de las mejores cosas que le habían pasado en la vida.

—MinHo, se te está saliendo lo gay —HyunJin bromeó y soltó un quejido cuando él le pateó por debajo de la mesa —. Mira que eres agresiva —se sobó la pierna —, ¿entonces?

—Entonces, ¿qué?

—¿Ya hablaron al respecto? ¿Ya tendré que pedirle permiso para invitarte a tomar algo?

—Chris no es del tipo controlador —MinHo rodó los ojos divertido y le agradeció a la camarera por traer su bebida —, no hemos hablado de hablar, pero no creo que sea necesario. ¿Te conté que preparó el desayuno hoy? —sonrió —Sigue poniéndose nervioso a mi alrededor, pero es tan tierno que me dan ganas de apretujar sus mejillas y hundir mi dedo en sus hoyuelos. Sus labios son realmente tan suaves como pensaba —se encontró tocando los propios y fantaseando con los de su vecino de nuevo.
 
  Soltó una risita baja al saber que podría besarlo de nuevo la próxima vez que le viese sin que fuese éticamente incorrecto.

—¿Qué? —preguntó cuando notó a su amigo mirándole con los ojos entrecerrados y con el rostro semi contorsionado de asco.

—¿En serio eres tan idiota? —siguió antes de dejarle responder —Que se hayan acostado, hecho el amor, follado, como te de la gana de nombrarlo, no significa que automáticamente sean novios, MinHo. Sé que se gustan mutuamente, hay que ser ciego para no notarlo, pero ¿se lo han dicho el uno al otro? Solo conocí a Chris una vez y por lo que me has contado puedo deducir que no es del tipo que la pilla en el aire —aseguró y se apoyó en la mesa con su codo —¿no crees que la razón por la que actuó nervioso esta mañana es porque literal no sabe cómo actuar en esta nueva situación?

  MinHo iba a responder, pero su amigo tenía razón. ¡Había sido tan estúpido! Pensó que las acciones habían bastado, no creyó necesario tener que decirlo en voz alta, aunque si se detenía un segundo, a él le gustaría escuchar a Chris decirle que le quería. Dejó caer su cabeza con un golpe seco sobre la mesa.

—La alegría te cegó demasiado, amigo mío —HyunJin le acarició el cabello con cariño —, al menos la parte más difícil ya la superaron. La mañana después del sexo puede ser realmente incómoda, suerte para ti que me tienes a mi en tu vida y te ayudo a solucionar todos tus marrones.