OO. Paletas De Cereza Y Rutinas Aburridas

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¿Había pasado un mes? Sí, probablemente.
Había pasado un mes o más desde que Tsukishima Kei trabajaba en la lavandería (a causa de las vacaciones de verano, después de salir de la preparatoria)
Al principio creía que sería divertido lavar la ropa de desconocidos con vidas interesantes o que le contaran sus problemas a las 2 de la madrugada.

Estaba muy equivocado.

Realmente no habían muchas personas con historias fascinantes, y ni siquiera había personas que quisieran lavar la ropa a esa hora.

Tsukishima se entretenía pues, con las revistas que tenían para los clientes y coloreaba las revistas interactivas para los más pequeños, cuando se aburría salía a la calle y sacaba del empaque una paleta de cereza; una vez había llevado una de piña. No lo ha hecho más. Tsukishima odia las paletas de piña desde que tiene uso de razón. Así que prefiere mil veces las de cereza.
El local cierra exactamente a las 4 de la madrugada, y abre cinco horas después, para ser atendida el resto del día hasta las cuatro de la madrugada del siguiente día, y al otro, y al otro y al otro...

Sin embargo, había algo que lo mantenía en pie aún a las 2 de la madrugada. Después de haberse graduado de primer año de preparatoria, tuvo que despedirse de Yamaguchi Tadashi, quien hasta el momento era su mejor amigo, y que por cuestiones del trabajo de los padres de este, tuvo que irse a Tokio.
Así que Tsukishima hablaba por las madrugadas con él.
Realmente solo habían hablado 3 o 5 veces desde que Yamaguchi se había ido a Tokio, pero, a pesar de ser pocas, ambos las apreciaban.

- Así que... ¿Cómo son las cosas en Tokio?

- Son un poco diferentes-El pecoso al otro lado de la línea hizo una pausa y luego continuó-¿Recuerdas al chico alto mitad ruso mitad japonés? ¿El que iba en el Nekoma?

- Uh... ¿Lev?

- ¡Exacto! -Yamaguchi ríe y Kei no puede evitar sonreír al escuchar la contagiosa risa del contrario.- Dio la casualidad que me toca compartir clases con él aquí en la universidad.... Es, ¿ruidoso? Pero creo que estoy acostumbrado.

- Pasaste mucho tiempo con Hinata y Nishinoya, ha de ser por eso...-Después de eso un pequeño silencio se instala entre ambos. Hasta que Tadashi agrega una última cosa antes de despedirse.

- Tsukishima...

- ¿Si?

- Voy a regresar a Sendai.

El corazón de Tsukishima dio un pequeño brinco de emoción, tenía casi dos años que no lo había visto.

- ¿De verdad? ¿Cuándo? ¿Te vas a quedar poco tiempo? -Tenía tantas preguntas en ese instante que ni siquiera notó cuando una anciana había entrado al local.

- ¡Hey espera! Pregunta por pregunta, uno, sí, voy a ir a Sendai otra vez después de dos años. Dos, este fin de semana, no tendré clases por 15 días debido a que harán remodelaciones. Y tres, como mencioné antes, estaré ahí 15 días. Voy a joderte la existencia por dos semanas...

Tsukishima se queda perplejo, no había escuchado una mala palabra proveniente de los labios de Yamaguchi. Y aunque no era algo tan fuerte, le sorprendió de igual manera.

- ¿Tsukki? ¿Sigues ahí?

- ¿Qué? Yo... Nunca serás una molestia para mi, Yamaguchi... Estoy muy feliz de poder verte de nuevo.

- Lo sé. Yo también estoy feliz de volverte a ver.

Tsukishima sigue sonriendo como idiota, ahí en la calle con una paleta sabor cereza y una anciana desesperada por lavar sus sábanas.

- Disculpe, joven, pero necesito lavar esto....

Ambos jóvenes, que disfrutaban el silencio se vieron interrumpidos, siendo llevados a la realidad.

- Eh.. Debería irme, Tsukishima, es muy tarde y mamá se enojará si se entera que estoy hablando contigo a las 2 de la madrugada...

- Cierto, buenas noches Yamaguchi, descansa.

- Tu también... ¿Tsukki?

- ¿Pasa algo Yamaguchi? Estoy por atender a un clien-

- Te quiero.

Tsukishima cierra los ojos y sonríe, con esas sonrisas que solo tal vez, Yamaguchi tenía el privilegio de observar.

- Yo también.

Y la llamada finalizó.

- Joven lamento interrumpir la llamada con su novia, pero mis sábanas necesitan quedar limpias.

- Perdón... Enseguida voy.

Kei prepara una de las lavadoras y agrega jabón y todo lo necesario para empezar.

- No es mi novia. -Dice después de un rato a la anciana, mientras vuelve a leer la misma revista de todos los días, definitivamente tenía que comprar las suyas propias o tal vez uno que otro manga.-Es mi mejor amigo, vive en Tokio.

- ¿Ah si? Perdón por malinterpretar las cosas, pero parecían una pareja de adolescentes enamorados...

Kei dejó de leer la revista en sus manos y cuando está a punto de comentar algo más sobre el tema, sus palabras se ven abruptamente cortadas por el sonido de la lavadora, que indicaba que la ropa estaba lista, lo cual significaba que era hora del secado.

- No podríamos ser una pareja.

Afirma, cortante y serio. La mujer ríe.

- ¿Qué te asegura eso? ¿Es porque ambos son chicos?

- No, no me gusta, eso es todo.- Su mirada seguía firme mientras llevaba las sábanas a la secadora-Y, no, por dios, no tengo ningún problema en que ambos seamos chicos, todos son libres de amar a quien sea...

La anciana sonríe.

- Cualquiera que los viera pensaría que te gusta, o tal vez y solo es cosa mía....

Kei se queda quieto por un rato, pensando todo lo que la mujer le dijo y restándole importancia, nunca se había preguntado si él y Yamaguchi serían una buena pareja.
Probablemente no, ambos eran completamente diferentes.

- Sus sábanas están listas...

La amable mujer agradeció y pagó el servicio. Tsukishima se limita a sonreír y despide a la anciana. Se dedica a escuchar música en sus auriculares.
Últimamente escuchaba canciones con letras sobre desamor, o sobre historias amorosas con finales felices que sólo ocurrían en libros de ficción.

Dadas las 4 de la madrugada, Kei Tsukishima cierra la lavandería y camina hacia su hogar.

El cielo aún es oscuro y recuerda como en sus años de preparatoria utilizaba la misma ruta con Yamaguchi para volver a sus hogares.
Está cansado, la misma rutina le aburre, lo único que quiere es llegar a su casa y dormir, aunque ese día no resultó tan horroroso como los demás; había podido hablar con Yamaguchi Tadashi.

Ah, y había podido conseguir un cliente.

𝙎𝙥𝙖𝙘𝙚 𝘽𝙤𝙮 [𝖳𝗌𝗎𝗄𝗄𝗂𝗒𝖺𝗆𝖺 𝖠𝖴]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora