8.

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Roseanne

Desperté en una cama ajena, miré el techo de color azul cielo ¿Dónde se supone que estoy? Luego llegaron a mi mente recuerdos de la noche anterior como un tren golpeándose justo en mi mente. Me levanté de la cama y me dirigí al baño a tomar una ducha. Me miré en el espejo y observé una fotografía de una espalda femenina con un tatuaje en ella. Qué lindo tatuaje... Espera...No puede ser posible. Me di media vuelta tratando de mirar mi espalda y revisar que ese tatuaje no estuviera en mi espalda. 

-Oh por Dios Roseanne ¿qué demonios? Mi madre va a matarme.- Me dirigí por mi ropa a la habitación.

Jennie

Me levanté del sofá, demonios mi espalda estaba hecha trizas. Me estiré y me dirigí hacia el baño dispuesta a tomar una ducha. Justo cuando entré al baño divisé a Rosé en sujetador y bragas.

-Buenos días.- Dije aún medio dormida.

-¡Buenos díaaahhhhhh!- Su grito terminó por despertarme. Noté que se cubría el cuerpo con una toalla.

-¿Qué pasa Rosé?- Ella me miró con los ojos muy abiertos como platos. Recordé que estoy completamente desnuda.

-No tocaste.- Me miró furiosa, oh no.

-Lo lamento, es sólo que....Es una costumbre, lo siento .- Ella abrió aún más la boca. -Vamos cariño, ya me has visto así antes.- Ella apartó la vista de mí y se sonrojó yo sonreí de vuelta y  comenzó a reírse. -Esto... no... es gracioso, debes golpear la puerta.- Dijo entre risas.

La miré con una sonrisa enorme.-Lo siento, tocaré la próxima vez.- Dije saliendo del cuarto de baño, dejando que ella tome su baño.

Minutos más tarde ella cruzó la cocina con una pequeña sonrisa tímida. Yo bajé el periódico y me retiré las pequeñas gafas , ella me miró y ambas comenzamos a reír bobamente. La miré y me fijé en sus ropas, llevaba puesta mi sudadera favorita, esto me sorprendió y la miré directamente a los ojos.-Luces bien.- Ella sonrió aún más.-¿De verdad? Es la única prenda con la que me siento cómoda.-

La miré con una sonrisa divertida.-Es mía en realidad.- Ella se sorprendió y sonrió nerviosamente.-Uh...Yo....- La interrumpí con una sonrisa boba.-No, está bien. Dejatela.- Ella se estiró para tomar una taza dejando una vista clara y completa de su hermoso trasero.

Ella notó mi mirada y se volvió hacia mí.-¿Qué?.- Diablos, excelente movida Jennie ahora la acosas.-¿Qué?- Traté de hacerme la desentendida.

-Me miras como si fuese un animal en un zoológico.-Uff, si tan sólo supieras Rosie.-Sí, yo... lo siento mucho, sigo tratando de entender todo supongo.- Ella asintió lentamente. -Entiendo.-

Se giró hacia el pequeño desayunador y levantó sus cejas.-Wow ¿siempre haces eso?.- Dijo señalando el desayuno completo que yo había servido. La miré y bajé la mirada.-Es mi disculpa por lo de anoche, hice algo realmente estúpido Rosie. Te juro que no estaba pensando con claridad.-Ella levantó sus hombros y negó rápidamente.-No por favor, no quiero que te preocupes por mí. Tú sigue con tu vida.- Yo la miré ¿Planeaba decirme eso sin saber que ella es mi vida entera? Asentí bruscamente.

-¿Trabajas?¿Tienes empleo?- Me reí ante su curiosidad.-Sí, bueno... si es que aún no me despiden.- Ella preguntó aún más con la mirada.-Yo, tengo un estudio de grabación.- Ella abrió sus ojos y casi escupe el jugo de naranja.-Oh, eso es genial.- Rápidamente quiso cambiar de tema.-Dime qué es mi rutina, qué es lo que hago diariamente.-

-Bueno, te levantas y haces café.- Ella se levantó de la mesa con intención de prepararlo.-Oh no Rosé, ya lo hice.- Ella simplemente asintió y tomó un trozo de bacon de mi plato sin darse cuenta.-Rosie, tú no comes carne.- Ella miró sin entender el trozo de bacon que comía.

-Luego, tú revisas el correo y pagas las cuentas. Pero supongo que no recuerdas ningún número de seguridad ni contraseña.- Ella sonrió tímidamente y negó.-Así que lo haré yo, no te preocupes.- Ella rió un poco y asintió.

-Y luego vas al estudio ¿Quieres que te muestre en lo que está trabajando? Si quieres puedo llevarte para que tú misma lo veas- Ella se levantó de la mesa y negó.-No tenemos que hacer esto, quiero decir, tú ve a trabajar y después hablamos sobre mi vida ¿sí?- Yo asentí-¿Estás completamente segura Rosé?-

Ella asintió enérgicamente.-Sí, estoy bien. No te preocupes, gracias.- Tomé mis cosas de la mesa y la miré de nuevo.-Está bien, te dejo sobre el mueble tus llaves, el teléfono y por si me necesitas, mis números están allí.- Ella asintió.

Me acerqué nerviosamente esperando mi beso de despedida diario, pero sabía que no habría ninguno el día de hoy, así que me giré y antes de que ella pudiese ver las lágrimas que nuevamente amenazaban con salir de mis ojos, me dirigí a salir por la puerta principal, cuando Rosé exclamó.-Ten un buen día Jennie.- La miré de nuevo y asentí lentamente 

The Vow (Chaennie)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora