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A veces me pregunto por qué no me doy la oportunidad de ser impuntual. Llegué antes que mis amigos al salón de clases, y poco a poco las sillas se fueron llenando. Además, también el ambiente se hizo más cálido, lo cual fue excelente ya que ha hecho mucho frío por el invierno.

— ¡Buenos días, TN! — Eren sacude su mano animadamente.

— Buenos días. ¿Te sientas aquí?

Mina, quien está a mi lado se ríe brevemente, pegándome con su codo.
Asiente, y ocupa el lugar a mi derecha, saca sus cuadernos y lápices; Mikasa y Armin están al frente.

Ha pasado en las últimas semanas que se sienta conmigo, no me molesta, es lo contrario, me agrada pasar tiempo con él. Además de vez en cuando nos pasamos notas y las clases se vuelven amenas.

Explicaban algo de la muralla interina cuando un papelito cae sobre mi cuaderno. Lo desenvuelvo, seguramente es más interesante que la clase.

Hola :)

Esa letra es de Eren. Está viendo de reojo con una sonrisita.

Hola, Eren. ¿Ya te aburriste?

, que tanto puede haber en esa ciudad tan pequeña?

A veces también me lo pregunto...

Qué dibujas?

Me pasa un papel con cuidado, deslizandolo hasta que toca mi mano. La respuesta que recibí fue un dibujo de un caballo con el corte de Jean.


¡ES ARRTE! 

Tratamos de mantener nuestra risa en silencio, y Mikasa voltea de pronto, haciendo que callemos... Su mirada me da miedo. Me limito a saludar con la mano, algo temblorosa porque siento que con sus ojos me enviará al más allá.

— ¿Dibujas?

Cubro las hojas con mis brazos — Ah... solo un poco — desvío mi mirada, un poco apenada — No es nada importante.

— No distraigas a Eren.

Pero si él empezó...

— Sí, señora. Perdón.

El mencionado suspira, echando su cabeza para atrás.

Dos horas después, ya somos libres. Comenzamos a recoger nuestras cosas y tendríamos veinte minutos en lo que la comida está lista.

Mis ojos hacen contacto con los de Berthold, él sonríe, pero hasta acá puedo oler sus nervios.

Mm... ¿espiando a la competencia?

No es secreto que los diez mejores ya están siendo seleccionados. Por como van las cosas, tengo asegurado un lugar ahí, aunque claro, no me puedo confiar, en especial con él. Normalmente quedamos con el mismo puntaje en el entrenamiento, y nuestras calificaciones son similares, apenas décimas de diferencia entre materias.

¿Qué planeas, Berthold? ¿Quieres mis apuntes? ¿Quieres sabotearme?

No sé a que acondicionamiento se haya sometido antes de venir aquí, pero no me va a ganar.

— ¡Ey, TN! — Eren se pone en medio — ¿Estás bien? Ya tenemos que irnos.

Exhalo, tragándome las dudas que comenzaban a comerme viva. Ya me estoy poniendo paranoica.

No te enamores (EDICIÓN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora