Su muerte

Capitulo 2

La mañana comenzaba, después de quedarse acostados un rato más, era hora de empezar su día.

- Vamos teme, ya es hora.

- No quiero, quiero quedarme aquí contigo- dijo con un puchero, mientras se tallaba sus ojos, parecía un niño.

- Vamos, que tienes que trabajar- dijo intentándo levantarlo, pero el Uchiha se paró antes, ya volviendo a la realidad, con su orgullo y frialdad clásico de él.

- Vamos....

- A bañarnos juntos- interrumpió el rubio.

Sasuke no puso resistencia después de todo son esposos, además que le encantaba.

......

Empezaron a desayunar, mientras hablaban de cosas triviales, hasta que el rubio empezó a hablar serio.

- Teme, últimamente te he visto, muy desganado, no me digas que....

- Un poco, solo un poco.

- Entonces, tenemos que ir, a la cita hoy mismo.- dictaminó el rubio.

- Pero es la semana que viene, dobe- dijo jugando con la comida.

- Sin peros, yo te llevo.

- Bien- dijo el azabache, pues en realidad lo necesitaba.

Siguieron comiendo en silencio, ese tema era serio, y entre más vaya a sus citas mejor.

......

Ambos se dirigían a su cita, llegaron a un hospital gigante, llamado "Senju", era uno muy prestigioso, pero Naruto conocía a la dueña y doctora principal, Senju Tsunade.

Al entrar un escalofrío recorrió al azabache,el cuál no paso desapercibido por Naruto, el sabía que no le gustaban los hospitales, pues le traía malos recuerdos.

Agarro fuertemente su mano, para decirle que estaba con el, y nada le pasaría, el azabache entendió y camino abrazándolo un poco, hasta que llegaron al consultorio asignado.

- Buenos días, Sasuke- dijo una rubia, muy bonita.

- Buenos días- respondió triste.

Naruto soltó su mano, pues las sesiones del azabache eran a solas, por lo que se disponía a salir.
Se dió la vuelta e hizo una seña al azabache, para que entendiera que estaría esperando afuera, Sasuke solo asintio.

- Yo te llamo, cuando hayamos terminado- dijo sonriente.

- Gracias, Shion- el rubio salió y cerró, dejando a ambos solos, se sentaron y prosiguieron a hablar.

- ¿Cómo has estado?- pregunto la rubia, observándolo.

- Pues, bien- dijo no muy seguro.

- Ya veo, pero se por Naruto y la urgencia de venir, que algo anda mal, y viendo tu estado, es un poco de depresión, ¿Cierto?.

- Solo un poco.

- Está bien Sasuke, la depresión no desaparece de la noche a la mañana, pero solo te da de vez en cuando, podemos con eso, ¿No?.

- Supongo.

- Recuerda que tienes a un hermoso rubio, como pareja, el no dejará que nada malo te pase, estás conciente, ¿Verdad?.

- Si, creo que sí.

- Te voy a recetar algo, pero quiero que te distraigas con algo, no pienses en eso ¿de acuerdo?.

- Si, gracias.

- Bien, toma y ya puedes retirarte, te veo en la próxima sesión.

- Gracias, hasta pronto.

- Saludame a Narut....- El azabache cerró la puerta, esa doctora quería algo con su esposo y no sé lo iba a permitir, sonrió ligeramente, el rubio era suyo.

Cuando llegó a la sala de espera, encontró a otro de sus molestias.

- Deberías, de estresarte menos- decía un pelirrojo.

- No se de qué hablas, doctor Gaara- decía confundido.

- Dice que lo beses - soltó el azabache, como si nada.

- Teme - dijo el rubio, pero le agradaba que Sasuke estuviera bien. Gaara solo se sonrojo por lo que el había dicho.

- Yo me voy- dijo el pelirrojo.

- Mejor- respondió, mientras el pelirrojo se retiraba.

- ¿Cómo estás?- dijo acercándose rápidamente a su esposo.

- Bien, vámonos, quiero descansar- le dijo mientras le daba la receta y caminaba hacia la salida.

Naruto bajo la mirada y lo siguió irían a la farmacia y luego a su casa.

......

Llegaron a su casa, Sasuke inmediatamente se metió a l cuarto, y se metió entre las sábanas, solo quería dormir, aunque a Naruto no le pareciera.

- Teme, ¿Te vas a dormir?- dijo sentándose en la orilla de la cama.

- Tu que crees.- respondió con indiferencia.

- Tengo que ir a trabajar, y....

- Pues ve.

- No te quiero dejar solo, teme.-

Al rubio le preocupaba Sasuke, pues el era capaz de cometer ciertas cosas.

- Estaré bien, lo prometí.

- De acuerdo- le dió un beso en la frente, dónde Sasuke odiaba que lo hiciera, pues era un lugar un tanto sensible, el azabache se sonrojo.
- Llegaré en la noche, te amo.

- Yo también- sonrió y se acurrucó en su cama, el rubio solo se marchó, tenía que ir a trabajar o lo despedían.

Cuando sonó la puerta, Sasuke se destapó y se sentó en la cama.

- Maldición- dijo para luego caminar hacia la sala, y sentarse ahí.

Le dolía saber, que su esposo, tuviera miedo de dejarlo solo, pero no lo culpa después de todo, solo se preocupaba, porque no fuera hacer nada malo.

Pero el lo prometió, no lo volvería hacer, iba a sus sesiones con la psicóloga cada semana, y todo iba bien, si bien era cierto, que aún tenía depresión, solo lo atacaba por ratos y podía vivir con eso, gracias a su amado rubio, que haría el sin él, la simple idea le asustaba y odiaba eso.

El era Sasuke Uchiha, un joven, empresario, frío y orgulloso, esa era la personalidad que el tenía, mientras no le diera depresión, odiaba sentir eso, porque todo lo que el es, se venía abajo, se vivía desendiente de otros, se volvía muy inseguro, a tal grado de ya no querer seguir con su vida, y atentar contra ella, tenía suerte de siempre tener a su rubio cerca, gracias a él seguía vivo, pero, ¿y si este se va?, No, ¿A dónde?, No, simplemente no , se estaba llenando la cabeza de ideas locas, y era lo menos que quería.

- ¿Por qué?, Maldita inseguridad.- grito, vivía solo, en una pequeña casa que compro con su esposo, así que nadie lo escucharía.

Se maldijo internamente, caminando en círculos, finalmente decidió acostarse, pensar esas cosas, no le serviría de nada, camino hacia su cama, se acostó, dejo un vaso de agua, en la mesita de noche, justo al lado de una foto que tenía con Naruto, en un viaje a la playa, ¿Talvez debería de viajar?, Después de todo tenía que distraerse.

Con ese pensamiento, cerró los ojos y se durmió, mañana, le diría al rubio su plan.

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Espero que les este gustando, si es así, no olviden votar y seguirme.
Los veo el lunes, para un capítulo nuevo. Bye 💕