III - 🌒 - Mescolanza opiácea

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Se besan apasionadamente, Yoongi quiere llorar, respira arduo y espera a que Hoseok termine de quitarse la ropa. ¿Realmente eso está pasando? ¿Realmente encontró a su otra mitad?

Oh mierda, por favor que sí sea él o me volveré loco.

-Oye, estás muy tenso, tranquilo -le calma Hoseok. Después de manejar hacia la casa del desconocido, Yoongi ha estado más que ansioso, tiene unas grandes ganas de llorar, ¿así se siente encontrar a su persona amada? No siente la calma que en su momento Jin le dijo, ni las ganas vehementes y necesitadas de hincar sus colmillos en Hoseok.

Después de acariciarse durante largos minutos, sus colmillos no protruyen. Se supone que cuando encuentra a su ser destinado tiene que consumir su sangre para unirse.

¿Por qué mierda sus colmillos no salen? ¿Existe la disfunción eréctil colmillal?

Oh, mierda, no, ahora no.

-Hoseok, no sé qué pasa -comunica asustado y siente las manos ávidas de su acompañante acariciar su espalda desnuda.

-¿A qué te refieres? -ríe un poco y besa el cuello de Yoongi.

-Mis colmillos.

-Qué pasa con ellos, no los veo -Hoseok sonríe y observa con mirada curiosa la boca de Yoongi.

Ese es el problema.

-Creo que...

Oh, mierda... No. No. No.

-Hoseok -le llama cuando siente a su compañero desvanecido entre sus brazos.

Sabe que por más que le hable a Hoseok, este no contestará, está completamente inconsciente entre sus brazos, siente su tenue respiración contra el cuello.

¿Por qué el destino tiene que jugar así con él?

Acomoda a su momentáneo acompañante entre las sábanas y lo cubre con pudor. Se viste rápidamente y echa un último vistazo antes de partir. ¿Y si realmente el destino se olvidó de él?

Sube al automóvil y pega su cabeza contra el volante, aguanta las lágrimas y forma un puchero con sus pequeños labios. Está harto. Está cansado. Y ya no quiere aguantar más.

No hay nadie para él.

Está seguro.

Ya no puede soportar estar sin alguien a su lado. Está aturdido y exhausto. Odia a todos y preferiría estar muerto a seguir en esa misma incertidumbre.

Enciende el motor y maneja rápido para salir del vecindario de Hoseok.

Oh, mierda, que su hermano lo perdone por lo que va hacer, pero ya no ve otra salida.

Maneja acelerado, muy por encima del límite de velocidad. La humedad en sus ojos le impide ver correctamente el camino, afianza sus manos al volante de cuero, escucha cláxones ajenos que le indican que cruzó el último semáforo en rojo.

El paisaje se vuelve trémulo, no tiene mucha experiencia manejando por esos lares, desabrocha el cinturón de seguridad, incrementa lo más que puede la velocidad, cierra los ojos y suelta el volante.

Jin acaba de despertar, lo siente asustado, está tratando de comunicarse con él a través de su vínculo de hermanos.

Lo último que siente es como su cabeza choca contra el parabrisas quebrándolo y rasgando su piel. Todo se vuelve negro.

Después de mucho, por fin descansa.

🩸

"La ciudad es moderna, electricidad, luz y demás tecnología, pero hay otra parte de la ciudad que nadie te cuenta, esa parte que es habitada por los ermitaños y criaturas míticas que jamás se adecuaron a la actualidad, esa que se encuentra en el amplio bosque en el cual nadie entra por miedo a quizá nunca poder salir.

🌑 CRAVING 🌑 «Yoonmin» FINALIZADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora