— ¡¿Un kermes?!
—Yukhei, baja la voz. —Taeil le codeó, recibiendo una queja por parte del nombrado. —Y, además, colaboraremos junto a la universidad Kyunghee por un convenio entre los representantes legales de cada institución.
—Ni se molesten en mandarme un mensaje porque no responderé. Paso.
—Pequeño bribón. —ante la negativa del Alfa, no tuvo de otra que tironearle de la oreja. — ¡A Jungwoo le gusta los kermes!
— ¡No uses a mi esposo en mi contra, viejo decrepito!
— ¿La universidad Kyunghee? —inquirió Jaehyun.
—Sí. No entendí muy bien el asunto, pero trabajaremos con ellos y se eligió el kermes para estrenar la inesperada fusión de ambas universidades.
Jaehyun asintió con otro de los tantos míticos sándwiches de pavo a medio comer. La idea de un kermes le pareció bastante innovadora ya que con anterioridad habían hecho ventas de pasteles, obras de teatro y ferias de ciencias. Con entusiasmo, pensó en la oportunidad de invitar a Doyoung y poder disfrutar de una velada invernal con él.
—Miles de won desperdiciándose por semejante porquería.
—Porquería es lo que tienes en tu minúsculo cerebro.
—Minúsculo tendrás el pene.
—Oh, ¿Ansías verlo que te adelantas en hablar?
—No entiendo qué tienen de malo los kermes, Yukhei hyung. —comentó el menor con un inocente retintín. —A mí me parecen entretenidos, aunque he ido solo una vez.
— ¡Porque es un baboso!
— ¡No, animal! —se apresuró en contestar. —No es por eso.
— ¿Y entonces, hyung?
Yukhei sin decir palabra alguna, se encaminó hacia el interruptor de la luz de la sala y lo apagó. Entre las penumbras, se escabulló cual víbora hasta regresar a su asiento y ya en este, procedió a encender la linterna de su teléfono con la que se iluminó el rostro.
—Oh ¡Qué genial! Solo que te olvidaste de apagar los otros tres interruptores, cabeza de mosquito.
—Te meteré esos tres interruptores por el culo si no te callas.
—Sangwoo, cariño. —Taeil se dirigió a uno de los profesores que recién había ingresado. — ¿Puedes encender la luz? ¡Gracias!
Con la sala nuevamente iluminada y los planes de Yukhei arruinados, no tuvo de otra más que de centrarse a contarles el tan traumático relato que explicaba su desprecio hacia tan coloridos y divertidos eventos llenos de juegos, comida por doquier y niños vomitando en la salida de la montaña rusa tras un frenesí de frituras. Tanto Taeil como Jaehyun se inclinaron, invadiendo el espacio personal del más alto que con semblante dramático, husmeaba entre sus más oscuros pensamientos.
—Detesto los kermes por la culpa de unos terroríficos payasos; seres ruines que destrozaron mi infancia e hicieron de mi vida un calvario del que día a día trato de superar, pero es en vano.
—Hyung, lo lamento muchísimo... ¿Hay algo que pueda hacer por ti? ¡Cuenta conmigo en lo que sea!
—Debes estar jodiendo. —murmuró Taeil, incrédulo.
—Jaehyun, eres un encanto y deseo que encuentres la felicidad con ese tal Dohyeon. —le acarició la mejilla con ternura, luego se volteó al mayor. —Taeil, por tu parte, espero que te reencuentres con tu exesposo en el infierno.
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Yo amo a ese Beta | JaeDo (PAUSADO TEMPORALMENTE)
FanficLas leyes de la naturaleza y las normas sociales dictan que una pareja destinada debe estar conformada única y exclusivamente por un Alfa y un Omega. Pero, ¿Qué pasaría si estas leyes y normas se vieran quebrantadas por un Alfa y... un Beta? Y que...