Cap 41 "Viejos amigos"

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Maratón (2/3)

El ser humano es un animal de costumbres.
Al despertar, abrí mis ojos y miré extrañada a mi alrededor durante unos cortos segundos, es un sentimiento extraño. No puedo explicarlo, esperaba encontrar a Natalia a mi lado, estar en el cuarto del convento.
Salgo del cuarto en pijamas. Voy a la cocina y me encuentro a una señora de mediana edad con un delantal.

—Usted debe ser la señorita Addison (dice la señora).
—Sí, mucho gusto (estrechan las manos). ¿Cómo se llama usted?
—Mi nombre es Cristina y soy la encargada del aseo y de la cocina. Dígame que le apetece de desayunar y si gusta puede esperar en el comedor.
«I knew it.»
—Mmm vale (hace una pausa) un par de sandwiches con café estaría bien.
—¿Con pollo, carne, jamón o queso?
—Eh, jamón y queso por favor.
—En seguida.

Momento incómodo.
No sé cómo no me lo esperaba. ¿Papá y Sofia haciendo su propia comida y limpiando la casa? Imposible.
La señora parece ser muy callada.
Enciendo el televisor, en Fox están dando Los Simpson.

—Buen provecho señorita Addison (dice la señora poniendo el plato y la taza sobre la mesa).
—Muchas gracias (Addison sonríe, ella le devuelve la sonrisa y vuelve a la cocina).

Los sandwiches están deliciosos. El café un poco amargo, pero después de agregar unas cuantas cucharadas de azúcar eso no es problema.
Al terminar la señora recoge mis platos. Le agradezco una vez más, apago el televisor y vuelvo a mi cuarto.
Llamo a Madi.

—¿Alo? (contesta Madi, Addison sonríe al escuchar su voz).
«Extrañaba oírla.»
—Madi, soy yo, Addison.
—¿Addison? ¿En serio?
—Por supuesto, estoy aquí, en la ciudad.
—(Pequeño grito de felicidad) eso es fantástico, ¿desde hace cuánto?
—Llegué ayer.
—Gran perra, nos avisas ahora (dice Madi en broma).
—(Addison ríe) oh, no sabes cuanto te extrañé.
—Le avisaré a las chicas para que vayamos a almorzar juntas. A la 1, ¿va?
—Listo (risa). Me parece perfecto, por cierto, ve con tu noviecito, debo darte mi aprobación.
—(Risas) vale, le diré lo mismo a las chicas. Por cierto, me encanta tu sexy acento español. Nos vemos en el club.
—Gracias. Está bien, hasta entonces.

***

—Addison, ¿a dónde vas? (pregunta el Sr. López).
—Voy a almorzar con mis amigas en el club.
—Está bien, ¿vendrás para la cena?
—No lo sé...
—Sé que ya eres mayor de edad, pero por favor, llama en cuanto llegues.
—Vale, adiós papá. Adiós señora Cristina.
—Adiós señorita Addison.
—Cuídate (dice el Sr. López).

Tomo un taxi hasta el club.
En 15 minutos llego. Me bajo del taxi después de pagarle al taxista y entro al restaurante del club, fácilmente encuentro a las chicas, ellas se paran de la mesa y corren hacia mí para abrazarme. Las abrazo fuertemente. Las extrañé muchísimo.

—¡Addi! (grita Madi).
—Te extrañamos mucho (dice Avani).
—No te vuelvas a ir así (dice Sandra).
—Yo las extrañé mucho más, pero miraos, estáis muy preciosas.
(Risas).
—Amo tu acento español (dice Avani).
—Es tan sexy (dice Sandra).
—Estoy de acuerdo con eso (dice Madi).

Caminamos hasta la mesa, dónde están sentados dos chicos y una chica. Las parejas de mis amigas.

—Addison, él es mi novio Cristopher (dice Madi).
—Mucho gusto (dice Addison sonriendo y estrechando su mano con la de Cristopher).
«Cristopher es alto y atractivo. Bien hecho Madi.»
—Hola, Madi me ha hablado mucho de ti.
—Espero que bien (risas).
—Ella es Gina, mi novia (dice Avani tranquilamente).
«Gina, mmm... Se ve mayor que Avani, pero es muy guapa.»
—Es un placer conocerte (dice Addison estrechando la mano de Gina y dándole un beso de cachete).
—Igualmente (dice Gina).
—Y él es Andrés (dice Sandra señalando al chico restante).
—Hola Andrés, gusto en conocerte (Addison estrecha la mano con él).
«Andrés parece ser callado y de el tipo de chicos que cede, ¡perfecto para Sandra!»
—Hola, igualmente (dice Andrés tímidamente).

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