Cap 42 "Casualidad o... ¿Casualidad?"

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Maratón (3/3)

Chris es el mejor amigo de Bryce desde la infancia, como Madi y yo. Nunca lo conocí personalmente sólo por fotos ya que él viajó a otra ciudad para estudiar ingeniería química a los 19 años, ahora debe tener aproximadamente 26 años.
Bryce parece muy entusiasmado y lo comprendo, durar tanto tiempo alejado de tu mejor amigo duele.

—Papá, iré a una cena con Bryce (dice Addison).
—¿Con Bryce?
—Sí, pasará por mí en media hora.
—¿Y... dormirás aquí?
—¿Qué? ¡Por supuesto!
—(Risas) sólo preguntaba.

¿Qué demonios? ¿Por qué papá es tan abierto con ciertos temas pero con otros es más cerrado que un candado? Bueno, al menos los candados se abren con una llave, él no.
Me pongo un vestido de cóctel negro, unos tacones y una cadenita de plata. Me maquillo suave y me cepillo el cabello, he decidido llevarlo suelto. Sofia entra a mi cuarto.

—Vaya, luces muy hermosa (Sofia mira a Addison de arriba hacia abajo).
—Gracias (Addison sonríe).
—¿Planes para hoy?
—Iré a una cena con Bryce.

Sofia hace una cara de asombro.

—(Addison continua) sí, con Bryce, pero en plan de amigos.
—Oh bueno (risas). Salúdalo de mi parte, llevo bastante tiempo sin verlo.
—Vale, ¿y tú que harás hoy?
—Saldré por ahí.
—(Addison imita a Sofia) por ahí.
—Sí.
—Ayer también saliste, algo me dice que tienes novia.
—¿Qué? No...
—Aww, la bebé de la casa está saliendo con alguien (dice Addison en tono de burla).
—¡Addison!
—(Risas) vale ya. Pero se te nota que estás enamorado, no te presionaré, pero quiero conocerla.
—Algún día... quizá.
«¿Por qué tanto misterio?»
—Bien.

Sofia se va.
Me aplico un poco de perfume. Bryce me llama al celular para avisarme que ya está afuera. Me despido de todos y salgo a la puerta.
Bryce está esperándome de pie apoyado en su carro, mira sus zapatos. Tiene una camisa negra con un saco gris y pantalones negros. Luce muy guapo y parece como si hubiésemos quedado de acuerdo en la ropa, siempre nos pasa eso.
Me acerco hacia él.

—Hola Bryce (dice Addison, Bryce alza la cabeza y la mira).
—Wow, Addison, estás preciosa.
—Gracias.
—Realmente luces hermosa, sube por favor (dice Bryce abriéndole la puerta del carro a Addison).
—Gracias de nuevo (Addison sonríe).

Cristian se da la vuelta y sube al carro.

—¿Qué tal todo? ¿Cómo está tu familia?
—Bien, papá trabaja y Sofia saldrá esta noche también, por cierto te manda saludos. ¿Y qué hay de tu familia?
—Todos estamos bien (Bryce sonríe y arranca).

Esto de ser amigo de mi ex podría funcionar.
Bryce maneja, busco entre sus CDs y encuentro uno de los Beatles. Él, casi como leyendo mi mente, toma el CD y lo pone.
Sonrío. Creo que siento más confianza en él como amigo que como novio.

***

—Es aquí (dice Bryce).

Cristian parquea el carro y me queda mirando fijamente por varios segundos.

—¿Sucede algo? (pregunta Addison).
—Nada. Es sólo que verte me trae muchos recuerdos, tú dejaste huella en mi corazón y los momentos que viví contigo difícilmente se me olvidarán (Bryce mira fijamente a Addison).
«Oh...»
—Creo que debemos bajarnos ya.
—Sí, tienes razón. Casi lo olvido, ¿podrías tenerme esto?

Bryce me pasa una botella de vino con un lazo rojo, se baja del carro y me abre la puerta. Ambos caminamos tomados del brazo hasta la entrada de la casa.
La casa luce pequeña pero lo suficientemente grande para alguien soltero. Está pintada de blanco y unas palmeras adornan la entrada. La puerta es de madera color oscuro.
Bryce toca la puerta, segundos después Chris la abre. Ambos se saludan con un fuerte abrazo, parecido al de las chicas y yo.
Chris es blanco, tiene los ojos color miel y el cabello castaño. Es unos centímetros más bajo que Bryce pero unos cuantos más alto que yo.

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