Ya habíamos llegado a Londres, por fin. La gira había terminado exitosamente y ya podíamos regresar a descansar, no sin antes pasar por casa de mi madre, para celebrar invitó a los chicos a almorzar.
Toqué la puerta e inmediatamente me abrió mi papá.
—Allyson, vida mía —sonrió y me envolvió en un caluroso abrazo —Hola, chicos, pasen, ya Jessica está sirviendo la comida.
Ingresé a mi casa y me sorprendí al darme cuenta de que estaba tal como la recordaba. Mi mamá era de esas señoras que creen que mover continuamente las cosas atrae buenas energías.
—Es muy bonita —habló Freddie.
Realmente lo era, ingresamos a la sala, la cual era de un color beige y con diversos sofás blancos alrededor de una mesita de vidrio, que tenía un jarrón con hermosas margaritas dentro, además de la chimenea y los diversos cuadros colgados en las paredes, mi mamá era una fanática del arte.
—¡Mi bebé! —exclamó mi madre al verme, y rápidamente me abrazó.
—Ya no soy una bebé —hablé con una mueca.
—Para mi siempre lo serás —Dijo jalando mis mejillas —Hola a ustedes chicos estrellas, son muy talentosos.
—Gracias, señora, yo soy Freddie —saludó con la mano, y mi mamá también le dio un abrazo que lo tomó desprevenido, pero que gustoso aceptó.
—Todos los amigos de Allyson son parte de la familia —sonrió mi mamá —Y tu eres Roger —señaló al rubio —Allyson me ha hablado mucho de ti.
—¿Si? —indagó Roger, mirándome con una sonrisa burlona.
—Así es, nunca se calla.
—Vamos a comer —hablé tratando de cambiar el tema.
Rapidamente los guié al comedor para que tomaran asiento. Mi madre había hecho lasaña, se veía deliciosa.
—Vimos los conciertos por mtv —habló mi padre, luego de dar un sorbo a su soda—Son grandiosos.
—Muchas gracias, señor... —May intentaba adivinar el nombre de mi progenitor.
—Arthur, Arthur Brown.
—Se llama como mi papá —dijo John.
—No me había fijado —hablé extrañada.
—No me sorprende, vives en las nubes, Allyson —rió mi padre.
—Puedo confirmarlo —se le unió Roger.
Resoplé y continué comiendo mi deliciosa lasaña, estaba tan sumida en mi mundo que no me di cuenta de que Dalia y Brian me hablaban.
—Allyson —me llamó Brian.
—¿Que pasó? Estaba pensando.
—Uff, dejenla, piensa muy pocas veces —bromeó mi papá, causando la risa de los presentes.
Mi padre es el típico bromista, es muy amoroso, me quiere mucho, pero no desperdicia la oportunidad de hacerme bromas.
—Me caen muy bien tus padres —dijo Freddie.
—A mi me gusta mucho Queen, mi canción favorita es i'm in love with my car —comentó mi papá.
Roger sonríe orgulloso mientras mi madre y yo rodamos los ojos.
—Es una muy buena canción, la letra es tan poética, the machine of a dream...
—Muchas gracias, señor, usted si tiene buen gusto musical —habló Roger, como si hubiese encontrado por fin a alguien que apreciara su arte.
—¿Quién quiere ver el álbum familiar? —preguntó mi madre, y casi me ahogo con el jugo al oírla.
—¡Yo! —exclamaron todos los chicos.
—¡Nadie quiere verlo! —exclamé, pero fue en vano, ya mi madre lo había sacado.
Tragame tierra
Los chicos obviamente se estaban deleitando viendo las fotos donde peor salgo.
—Aquí sale Allyson durmiendo en su cuna, aquí sale durmiendo en el sofá, aquí sale durmiendo en la alfombra, aquí sale durmiendo en la escalera, y aquí sale durmiendo en el jardín —Dijo mi mamá señalando cada una de las fotos.
—Allyson ha pasado media vida durmiendo —rió John.
—Desde pequeña ha sido muy floja —bromeó mi papá.
—¿Esta foto de cuando fue? —preguntó Brian sujetando una foto, en donde me aprecio en el jardín de mi casa con ropa deportiva y una trenza en mi cabello.
—Cuando tenía 13, antes de que me enviaran a la escuela militar —expliqué.
—¿Escuela militar? ¿Por qué te mandaron? —indagó Dalia.
—Allyson hace tiempo era una rebelde sin causa, hacía exactamente lo contrario a lo que le decíamos solo por gusto —habló mi mamá, y era completamente cierto, los desobedecía solo porque sí —Arthur y yo decidimos mandarla para que fuera mas disciplinada.
—No me sorprende —Dice Ariana con una mueca.
Dios dame paciencia
—Luego cuando cumplió los 16, regresó a casa, mucho mas hermosa, por cierto —dijo mi papá.
Sonreí.
—Bueno ya, guardemos esto —suspiré cerrando el álbum, espero no volver a abrirlo nunca en mi vida.
Después del almuerzo, mis madre puso algo de música, mientras mi padre y Roger hablaban de las partes de un auto.
—¿Cual es la mejor parte del auto? —preguntó Freddie burlón.
—No lo sé... El tubo de escape —me reí.
Mis padres ya estaban acostumbrados a mis ataques de risa, los chicos en cierta parte también lo estaban, pero para ellos siempre es divertido verme atorarme de risa.
—¿Ya les comenté que Allyson está loca? —inquirió mi padre en tono de broma.
—Perdón, no pude evitarlo —suspiré.
—Ni lo evites, es lindo oirte reir escandalosamente —dijo Roger.
Sonreí, y el corazón me latió mas rápido cuando me devolvió la sonrisa.
—Roggie, es hora de irnos —Dice Ariana.
—Hay que pegarle, quiero pegarle —Le dije en un susurro a Brian.
—Bueno, nosotros ya nos vamos, la comida estaba deliciosa, señora Brown —habló el rubio, levantándose del sofá.
—Gracias, Roger —sonrió mi mamá.
—Puedes venir cuando quieras —dijo mi papá —Pero no traigas a Allyson.
—Lo haré—rió —Nos vemos.
—Te acompaño a la puerta —hablé levantándome y acompañándolos —Nos vemos después, Roger —sonreí.
—Lo sé, no puedes vivir sin mi —bromeó y me dio un corto abrazo.
Ni siquiera me molesté en despedirme de Ariana.
...
Chale, quiero caer a putazos a la Ariana.
Me cae del orto

ESTÁS LEYENDO
Estrellas // Roger Taylor
De Todo"La medida del amor es amar sin medidas" -"Estar cerca de ti y saber que me sigues amando, incluso con los problemas que me puedan ocurrir y las veces que me pueda equivocar, es la mejor sensación que he experimentado nunca" 1# en rogermeddowstaylor...