Reborn y Mónica se miran unos segundos, a decir verdad se temían dicha reacción por lo escrito en la carta. Ambos salieron para buscar con la mirada al chico de suéter negro pero no lo encontraron.
—¿Qué tan malo es lo que dice la carta?— cuestiona el mayor con enfado.
—Tranquilo, seguro no terminó de leerla, vamos a su casa, seguro está allá—.
—Déjame ir a mí—.
Monica pareció pensársela un momento pero al final accedió así que le entregó la carta y obligó que le prometiera que se aseguraría de que Luzu estuviera bien.
Reborn se despidió y fue directo a la casa del susodicho, al entrar por las escaleras traseras se dio cuenta que las torretas estabas apagadas y que la puerta estaba abierta. Prefirió golpearla para indicar que estaba allí pero después de esperar unos minutos sin que nadie le abriera se decidió por pasar.
La casa se encontraba en silencio, diría que total pero alcanzó a escuchar unos sollozos que provenían de la habitación principal. Con tranquilidad avanzó hasta ese lugar encontrándose al chico castaño sentado en el piso mientras abrazaba sus piernas contra su pecho en un intento para dejar de llorar.
—Luzu— susurró.
El nombrado respingó por el susto pero al darse cuenta de quién estaba en su casa se relajó un poco. Reborn se sentó a su lado y permaneció allí buscando qué decir o hacer, sin embargo no hizo falta hacer mucho pues enseguida Luzu lo abrazó llorando más en su hombro. Había dos emociones reinantes en ese cuarto, por un lado había inseguridad, inseguridad de que lo apartara y despreciara por ser terrible persona, y por otro lado había apoyo, Reborn quería brindarle todo este sentimiento para que el menor supiera que no estaba solo y que el de chaqueta azul se quedaría al lado de él el tiempo que necesitara.
Después de varios minutos en los que se mantuvieron en esa posición, Luzu arriba de las piernas del más alto mientras lo abraza con fuerza y sollozaba en su hombro, y Reborn devolviendo dicho abrazo y acariciando su cabello para calmarlo. El de chaqueta negra se separó limpiando sus mejillas tratando de borrar cualquier rastro de lágrimas.
—Luzu, nuestra intención no era lastimarte ni hacerte recordar algo desfavorable, por eso mismo quiero que termines de leer la carta— el menor lo mira con duda —Necesito que leas el final— repite.
Luzu lo piensa unos segundos, no quiere seguir leyendo algo que le recuerde la decepción que fue, pero también quiere confiar en que si Reborn es quien se lo pide es porque algo importante le faltó de leer. Toma el papel con inseguridad pero empieza la lectura de nuevo.
But... ¿Si lo hiciera? Seguro me dolería pero si él quisiera arreglar las cosas, if he was sorry, lo perdonaría. Ambos pensaríamos bien las cosas para encontrar una solución a esto, talves fue culpa de ambos, talves no estamos haciendo crecer nuestro afecto y debamos mejorar, there are no perfect couples. Pero si al final lo mejor es separarse lo entendería, quiero a Luzu y por eso quiero lo mejor para ambos, si él será más feliz con alguien más yo lo aceptaría porque mi felicidad es su felicidad.
Anyway, luego seguiremos en contacto, talvez la próxima vez nos veamos, cuídate sweety, i send kissed to Nieves. Googbye.
—Ella... ¿Ella de verdad me perdonaría?— cuestiona viendo la carta.
—Así es Luzu—.
De nuevo lágrimas vuelven a salir de los ojos azul marino del menor, pero esta vez están de un tono más claro, ambos saben que ese lloriqueo ya no es de culpa... Sino de alivio.
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El mayor lucha con sus deseos de no separarse, desde ya hace unos minutos que Luzu se quedó dormido mientras lloraba y aunque era cansado tener el peso del chico encima suyo, de alguna forma transmitía tranquilidad su presencia.
Reborn no sabría describir lo que siente en ese momento, el chico de ojos honestos contagia paz y cariño a su vida, parecido como al que transmite la personalidad de Perxas pero de una manera diferente.
Acaricia una vez más el suave cabello castaño del otro y con mucha fuerza de voluntad logra ponerse de pie y dejarlo en la cama para que descanse. Es medio día así que no espera que duerma demasiado por lo cual decide esperar en la sala. Lo que Reborn no sabía es que Luzu había pasado la noche de ayer en vela pensando que Horacio se iría y lo dejaría solo, por eso mismo se encontraba profundamente dormido en su habitación.
La horas pasaron y aunque cada vez se hacía más tarde le preocupaba dejar solo al chico de ojos cambiantes, no sabía si era lo más recomendable dejarle sin supervisión por lo cual prefirió quedarse mientras viendo televisión mientras Manolo le hacía compañía.
Cuando Luzu abrió los ojos no pudo distinguir mucho pues las única luz que había era la de la luna que se colaba por las ventanas. Se levantó después de bostezar y se dirigió hacia la sala que era de dónde provenía el único ruido en la casa. Al llegar allí se encontró con la tierna escena de Reborn acariciando al cerdo en sus piernas mientras este gordito animalito soltaba algunos "oigns" en señal de que le gustaba esa atención.
—Veo que se están divirtiendo— menciona sentándose a un lado.
Manolo de un salto se baja de las piernas del mayor para subirse en el regazo de Luzu, el menor le da unas caricias mientras que lo mira con ojos azul cielo.
—Serás cerdo— murmura indignado por ser cambiado —¿Ya estás mejor?— pregunta dirigiéndose a Luzu.
—Supongo que sí, hace tiempo no me pegaba una siesta así— sonríe levemente.
Reborn se siente contagiado por la sonrisa así que el corresponde el gesto. Después de dialogar sobre la serie que estaba pasando en televisión terminan riendo de lo bobo que es discutir por quién tiene mejores gustos cuando estos son muy diferentes.
—Bien, debería irme ya—.
—Pero es muy noche, ¿No prefieres quedarte a dormir? Mi cama es muy cómoda—.
—Oh, no sabía que esas intenciones tenía conmigo señor Luzu, pero me gustaría que primero me invitara un café antes de proponerme algo tan indecoroso— menciona riendo.
El menor se sonroja y sus ojos cambian a un tono rosado por la vergüenza, no pretendía que su ofrecimiento sonará de esa forma. Reborn al verlo a los ojos descubre que va a hacer lo que sea con tal de volver a ver ese color en ellos.
—Hablo de que tú duermas en mi cama y yo en el sofá, mamón— murmura el último insulto avergonzado.
—Tranquilo ojos bonitos, te diría que no puedo quedarme pero como Karmaland es muy peligrosa de noche acepto tu invitación... Pero yo duermo en el sillón— aclara con un tono demandante.
Le sonríe y Luzu lo único que puede hacer es dedicarle una sonrisa nerviosa, no sabe si escuchó bien, ¿Reborn le había llamado "ojos bonitos"? No estaba seguro pero igual lo hacia sonrojar.
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Espero les haya gustado el capítulo uwu
Vienen cosas interesante :)
Atte.
LaDelCabelloAzul23♪
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"Your eyes don't lie" (Luzuborn)
FanfictionBueno ¿Qué puedo decir? Me gusta el Luzuborn uwu y lastimosamente no hay muchos libros sobre este ship en Wattpad y mucho menos que estén terminados u.u Au escrito principalmente en Twitter pero también lo escribiré aquí. Será interactivo así que a...