Capítulo 4: El reto

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-¡ Ay!__ exclama la rubia al ser arrastrada de una forma bastante brusca. Voltea airada dispuesta a golpear al imbécil que la jalo. Más se detiene mirando la figura femenina__Candice, ¿Qué pasa? Pensé que eras otra persona__ saluda amablemente a su única compañera de cuarto. Realmente agradece eso ya que no le gusta compartir espacios con otras personas, pero está chica también es reservada evitando así choques entre las dos.

-Hola, perdona por asustarte__ Responde con una leve sonrisa.

-No hay problema, pensé que eras un idiota

-Si, aqui hay muchos de esos__ recuerda a los imbéciles que se creen lo mejor del mundo solo por estudiar aquí. El San Angelo es muy prestigiosa, ubicada en París Francia, no cualquiera logra asistir. Haciendo que a algunos se le suba los sumos a la cabeza.

- Si, pero hay uno en particular. Más no me sé su nombre

- ¿te está molestando algún idiota?__Se preocupa.

-No, es un pequeño choque de llegada y ya.

- Eso espero__ suspira Candice__ Cuéntame, ¿ Como te va en este Castillo?__ bromea.

-Bien creo,¿ y tú?__ caminan hacia la cafetería.

- Algo aburrida. Por eso me alegro de tener una compañera como tú__ la codea.

Siguen andando hasta que llegan a la puerta de la cafetería

-A mi igual, Candice__ sonríe alegre por haber hecho una amiga -Entremos juntas.

- Claro__ entrelaza su brazo con el de ella guiandola__ Si quieres podemos planear algo, salir este fin de semana a conocer la ciudad.

-Pues si, sería mejor que quedarme haciendo nada__ acepta gustosa.

-Ok, entonces te aviso. Ahora ven, te presentaré a mis amigas__ pasan entre el montón de personas.

Se acerca a una mesa con dos chicas
Se aproxima dando a detallar a las ocupantes de los puestos. Son dos rubias altas y bastantes hermosas, una de ellas con reflejos castaños.

- Hola__ saluda un poco tímida.

- Hola__Responden al mismo tiempo las dos rubias.

-Chicas, ella es Mía mi compañera de cuarto. Mía, ellas son Charlotte y Darlyn mis amigas__ las presenta Candice.

-Mucho gusto chicas.

Se sientan y rápidamente incluyen a Mía en el grupo. Son amables y a pesar de ser curiosas, no pasan los límites que tiene Mía. No sé entrometen ni preguntan de más, justamente lo que ella necesita.

Se concentran en su charla, sin notar la penetrante mirada azul marino de Alessandro, el cual está sentado junto a Mario a unas mesas de ellas. Mía por otro lado, se siente a gusto hablando con estas chicas. Algo que pocas veces pasa.

-Mía__La llama Darlyn__Ese chico de allá no deja de mírarte__Señala atrás

Todas voltean curiosas, encontrándose con un chico alto, cabello rubio platinado y ojos azules penetrantes. Su porte y altura solo influye miedo. Más su expresión estoica e inexpresiva.

-¡Lo conozco!_exclama Charlotte__Es mi compañero de cuarto, uno bien guapo, pero bastante aburrido

-¿ Es tu novio, Mía?__curiosea Candice.

Mientras, lentamente Mía gira observando a la persona que menos quería ver. Hace una mueca recordando que perdió contra ese imbécil.

- Mucho había tardado__ murmura por lo bajo __No, para nada. Solo perdí una apuesta contra él y quiere cobrarla__ observa a Charlotte con curiosidad__¿Por casualidad, sabes su nombre?

Principessa MíaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora