La fotografía ♡Vegetto, Gogeta y tú♡ ~En edición~

22: Juntos por siempre

Al escuchar la pregunta de la señora Agatha no sabía si decir que yo había sido un nazi, aun así decidí arriesgarme

-Lo conocí cuando llegó al campo de concentración en el que yo trabajaba- dije y al escucharme la señora Agatha palideció y sus manos temblaron un poco

-¿Eres un nazi?- me preguntó la mujer

-Lo era- respondí -pero yo no fui capaz de hacerle daño a los judíos, aunque algunas veces tenía que hacer cosas horribles para que no me descubrieran... Mi padre y yo fuimos obligados a ser nazis

-Entonces... ¿Hace cuánto que se conocen?- preguntó de nuevo la señora Agatha

-Desde hace unos años- dije tratando de recordar -se podría decir que desde mayo de 1940

La señora Agatha estrujó el pañuelo en sus manos y suspiró pesadamente agachando la mirada

-Casi por ese tiempo... Fue cuando se lo llevaron y lo alejaron de mi lado- dijo la señora Agatha -no estábamos haciendo nada, solo nos hacíamos campaña como siempre y luego escuchamos que habían tocado fuertemente la puerta, al abrir los nazis preguntaron por él y al confirmar que era a él al que estaban buscando empezaron a llevárselo con ellos, traté de detenerlos, pero no lo logré

-¿Y por qué no se la llevaron a usted?- preguntó ___ atenta -era su esposa ¿No?

-Sí, pero aunque yo fuera católica, no me llevaron porque no lo estaba escondiendo- respondió la señora Agatha -no sabíamos qué estaba pasando fuimos muy ingenuos en ese tema... Además, no pensábamos que fuera a pasar, porque Blaz era judío, pero no muy creyente... Incluso había dejado su religión para casarse conmigo

-Y... ¿No ha sabido nada de él?- preguntó Vegetto esta vez

-No- respondió la mujer negando con la cabeza -hace tiempo que se fue, él ya debe estar cuidándome junto con Elies

-No...- respondí sin pensar

-¿Cómo dices?- dijo la señora Agatha mirándome

-El señor Blaz no está muerto- le respondí un poco nervioso

-Pero... Dijiste que se habían conocido en un campo de concentración ¿No?- dijo la señora Agatha, en su rostro se mostraba un poco de esperanza -¿O acaso él... Sobrevivió?

-De vez en cuando mi padre y yo sacábamos judíos de ese lugar- dije serio -y el señor Blaz fue uno de los que escaparon

La señora Agatha no se lo podía creer, y se llevó las manos al pecho con el pañuelo aún estrujado entre sus delgados dedos

-Blaz... Está vivo...- susurró para sí misma mirando hacia la nada

-No solo está vivo...- dije y miré a Vegetto que a la vez me miraba a mí

-Gogeta y yo sabemos dónde está- dijo Vegetto a la señora Agatha

-¿Qué? ¿Dónde está?- preguntó la mujer impaciente

-Está en un lugar un poco lejos de este pueblo- dije, pues no sabía si mencionar lo del campo de concentración y a lo que se dedicaba ahora

-Ah... Quiero ir a verlo, ahora- dijo la señora Agatha

-¿Por qué no mejor espera aquí?- dije tratando de tranquilizarla - y Vegetto y yo iremos por él

-¿Creen que quiera volver a casa conmigo?- preguntó temerosa la mujer

-Sí- aseguré -haremos todo lo posible para que vuelva

La señora Agatha aceptó quedarse a esperarlo