¿Qué piensas hacer? [II Parte]

II.- Annabeth

Capítulo II 

Annabeth

La bebé era hermosa. 

Will la puso en mis brazos, y su cuerpo era cálido.

Ella se sentía tan frágil. 

Percy la miraba, no paraba de hacerlo. 

Dejó al lado la silla y se sentó en la cama donde me encontraba. 

Tenía muy poco cabello, y era tan fino que no quería tocarlo por miedo a quitarselo. Era oscuro, así que tenía que ser como el de Percy. Sus ojos eran... grises, sí. Pero no podía saberlo con certeza hasta que tuviera uno o dos meses. 

Cinco deditos; en cada mano y pie. 

Era perfecta. 

Will y Juniper salieron para darnos un poco de espacio.

Vi a la ventana, probablemente eran la una de la tarde. 

Vi a Percy sonriendo como nunca antes, y sus ojos brillaban con felicidad en ellos. O tal vez sólo eran lágrimas que amenazaban con salir. 

—¿Quieres sostenerla? —pregunté, conociendo la respuesta. 

—No... no quiero hacerle daño—dijo, con esperanza en su voz. 

Sonreí. 

—Vas a tener que cargarla por los próximos 3 años de vida, Sesos de Alga. Es hora de que aprendas. 

La bebé se retorció un poco.

Percy sonrió. 

Estaba cansada, así que pedí que la recogiera pues no podía sentarme ni mucho menos ponerme de pie.

Percy se agachó y la tomó. 

La bebé empezó a llorar. 

—Sostén su cabeza, Percy —dije, haciendo señas para que pudiera tomar a la bebé correctamente y dejara de llorar.

Era una imagen hermosa. 

—Hola, princesa —susurró Percy— soy papá. 

Ella tenía los ojos cerrados, y Percy jugueteaba con su manita, hasta que ella tomó su dedo índice entre su pequeña mano, con el puño cerrado. 

—Valió la pena, ¿no es así?

—¿Te refieres a los nueve meses de gestación, náuseas, mareos, vómitos, hambre, sueño, incontinencia urinaria y los antojos? —sonreí, viendo a mi bebé en los brazos de Percy— Lo valió totalmente.

Percy alzó la mirada a mi. 

—No... bueno, primero, recuérdame nunca quedar embarazado. Segundo... me refiero a todo lo que hemos luchado para llegar hasta aquí. Todas las heridas, muertes, sacrificios... Para esto —sonrió hacia nuestra bebé— Haría todo de nuevo, Annie. Sin dudarlo. Desde Gabe el Apestoso hasta Gea. Todo una y otra vez, si eso significa tenerla a ella. 

No sé si fueron las hormonas, pero unas cuántas lágrimas bajaron por mis mejillas. 

—Igual yo, Sesos de Alga. Igual yo. 

—Te amo, listilla. Y amo a esta bebé.

—Lo sé, Percy... yo también... Hmmm, ¿crees que tiene cara de Elizabeth?

Percy arrugó la nariz.

—¿Y si la llamamos Waffle? —dijo Percy— es muy original, y hay madres que ponen a sus hijas Apple, así que Waffle no sería tan malo...

Le lanzaría una almohada, pero estoy agotada y él está sosteniendo a la bebé. Entonces, me reí.

—No lo dices en serio, ¿cierto?

Hizo pucheros, y me tentó la idea de ponerle Waffle a nuestra hija. 

Waffle Jackson. 

No, es suficiente que sea nuestra hija como para que también le hagan bullying por su nombre. 

No, ni loca. 

Una flecha en llamas se estancó en la pared de la cabaña, haciendo que un pequeño incendio se formara gracias a las paredes hechas de madera. 

Percy me entregó a la bebé y se asomó a la pequeña ventana de la habitación. 

Sus cejas se juntaron, denotando preocupación. 

—Annie, algo está pasando afuera... —miró a la bebé— vuelvo en un momento. 

Plantó un beso en la frente de la bebé, y uno a mi en los labios y se fue corriendo. 

La bebé empezó a llorar, y me ocupé de ella, esperando que Percy volviera sano y salvo, y queriendo saber qué pasaba afuera.

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Listo, chicas/os, al parecer tengo un montón de hermanas xd

Bueno, para nuestra madre es fácil, sólo tiene que pensarlo y... No quiero entrar en detalle. 

¡Sí tenemos ombligo! ah. 

Al parecer, a Fer le hace falta hermanos :c

Vale, esperamos que hayan disfrutado este cap, sentimos la demora, pero estoy estudiando para los examenes de admisión y he estado ocupada... ¡Deséenme suerte!

Entonces, ¿qué les parece el nombre Waffle? ¿Apoyan a Percy? ¿O qué otro nombre creen que debe llevar la bebé?

¡Gracias por seguir con nosotras!

Que los dioses los bendigan, 

—Nikky y Fer.