Muchas sueñan con el amor... ese que los curas sentencian con un prometedor "Para Siempre" ¿Que no daría ella por sentir aquello? Ese brillo en los ojos de su madre, cuando esta veía a su padre. ¿realmente podría decir que sentía envidia de eso? La vida de Dulce era como sacada de un cuento de hadas. Tenia gracia, belleza, había crecido en un hogar rodeada del amor de su familia, lujos. Pero para ella esto no era suficiente, el tenerlo todo no llenaba ese espacio en su pecho que pedía a gritos ser llenado de amor, ese sentimiento tan puro y verdadero. Quería sentir esas tan nombradas mariposas en el estomago. Quería sentir escalofríos al escuchar su nombre de los labios de ese hombre. Quería conocer el amor. Nada de lo que pasa en esta vida es casualidad todo tiene una razón de ser todo es producto de nuestro destino que se encarga de marcar nuestro camino, paso a paso. Su mejor amigo, su compañero de juegos, cómplice de sus travesuras, dueño de sus primeros besos. Christopher y Dulce habían crecido juntos, sus familias eran muy unidas y a raíz de eso nació su amistad, que con el tiempo paso a ser mucho mas que eso. Destino. Dueño de nuestras victorias y tropiezos. Testigo de nuestras acciones. Un amor tan puro como el sol en un camino lleno de controversias. Solo el verdadero amor logra combatir la peor de las tormentas.