Tras la muerte de su familia, Antonella debe tomar las riendas del negocio familiar. Ser la jefa de un importante bufete de abogados a su corta edad, no es fácil. Más aún cuando no tiene el apoyo de las personas que la rodean. La presión de dirigir el bufete la ha convertido en una persona algo retraída y sin opinión propia, que busca desviar la atención de ella en ropa holgada. Trabajo, casa, trabajo. Su vida se ha tornado monótona. ¿Pero qué pasa cuando su mejor amiga está harta de ver en lo que se ha convertido? ¿Qué pasará cuando la obligue a salir de su zona de confort? ¿Qué pasa cuando ella decide dejarse llevar? Pues, pasa lo que tiene que pasar. Luego de una noche de fiesta y unas copas de más, pierde el control despertando al día siguiente en los brazos de un hombre. Pero ¡Oh Sorpresa! Dicho hombre aparece como el nuevo abogado en su bufete. Ella lo desea, pero no desea ataduras. ¿Podrán controlar el desenfreno que les provoca cada vez que se ven? ¿Podrán mantener su relación estrictamente laboral? Yo no lo creo ¿Y tú?