Wonder Woman & Mera II

Capítulo 7

El dios no tenía planeado seguir la pelea por más tiempo, pues ya había logrado su objetivo, pero al tener frente a frente ese rostro que tantas veces había salido victorioso frente a él no pudo evitar a sacar toda su ira, la principal culpable de su destierro del Olimpo, a quién había soñado con destruir desde el día en que la vio salir del cráneo de su padre, en toda su máxima gloria se encontraba Atenea, la diosa de la sabiduría y diosa de la guerra estratégica

Por un momento se olvidó de cual era su misión ahí y se centró en querer destruirla, para su sorpresa, Atenea respondió de la misma manera y lo que empezó con ataques físicos se convirtió en una pelea sangrienta

Diana observaba a quien había considerado su mejor amiga y mentora desaparecer dejando a la diosa, no se lo podía creer, la reconoció en el instante en el que la vio ¿de qué trataba todo esto?

Themyscira se sacudía cada vez que uno de sus ataques impactaba en el suelo, observó como las demás evacuaban el lugar poniéndose a salvo en el refugio como ordenes de su reina, Artemis ayudaba a levantar a las que se habían visto afectadas por la pelea al igual que Hipólita, Diana observó el brillo dorado que desprendía su madre, era igual al que desprendían Ares y Atenea

Mientras tanto en Xebel, el agua se sacudía violentamente en cada golpe que se daban Ares y Atenea, no sabían a que se debía pero su rastreador les indicó que algo estaba sucediendo en Themyscira — Mi rey, me temo que la Reina Hipólita necesita de nuestra ayuda, los demás reinos también han reportado estas fuertes agitaciones, es como si estuviéramos viviendo un terremoto constante — le informó un general a Nereus, quien ya había intentado contactarse con su amiga pero no había obtenido respuesta

— La ultima vez que tembló parecido, Themyscira estaba bajo ataque de gorgonas, esta vez me temo que es algo mucho peor — habló Mera metiéndose en la conversación

Nereus inmediatamente le pidió a su ejercito que se preparara, pues irían a ayudar a las Amazonas, Mera asintió y se fue a preparar, aunque su padre se lo negó y le ordenó que se quedara, ella lo ignoró, no sabia que era lo que estaba sucediendo, pero algo era claro, su amada estaba en peligro no podía dejarla sola, no podría soportar si algo le llegara a suceder

La pelea en Themyscira cada vez se volvía mas intensa, Ares observó a Diana y supo que ya tenia indicios de que era lo que estaba sucediendo, y justo cuando Atenea le iba a dar un golpe, este se convirtió en neblinas y desapareció frente a ella para luego aparecer frente a Diana

—¿Ahora lo ves? — bufo Ares — Todos en esta isla te han estado mintiendo Diana

—Hija, no lo escuches — gritó Hipólita a lo lejos

— ¿Qué pretendes? — le preguntó Diana

— Tan solo quiero revelarte la verdad, no soy tan malo como piensas Diana —  la peligra lo observó como si estuviera loco, pues su herida aún no sanaba y tampoco había dejado de sangrar, Ares se dio cuenta de ello y casi se golpeó mentalmente — Hay una razón por la cual tu herida aún no sana, la herida que un dios le provoca a otro tarda más en sanar 

— ¿Un dios, de que hablas? yo no soy-

— Eres Diana de Themyscira hija de Hipólita, pero no fuiste traída al mundo como piensas Diana, no fuiste creada de barro ni tampoco tuviste vida gracias a los dioses, tuviste vida gracias a dos dioses para ser más específicos — Ares hizo una pausa y ante sus declaraciones el corazón de Diana latía como loco en su pecho — Tu madre también es una diosa Diana, se creó a base de las plegarias de todas las mujeres que sufrían a causa de los hombres, ella nació de la nada para protegerlas y convertirse en su guardiana, luego se enfrentó contra los mismos liberando a las mujeres de la esclavitud, eso le llamó la atención a Zeus, mi padre, y como muestra de su valentía les dio esta isla y de aquí surgieron las amazonas