La celeste y blanco se quedó maravillada con las luces y la música que rodeaba a todos los presentes en el lugar. El ambiente era extremadamente acalorado. La fiesta del estadounidense había comenzado hace rato, quizás unos treinta minutos, y gran parte de los países que estaban allí estaban ebrios o bailando. Todos estaban alocados, llegaba a causar emoción y ganas de unirse a la diversión. El ruido te ensordecía, las luces de colores te cegaban, el aroma a cigarro era fuerte. Tina observó a su mejor amiga, Chile, quien sonreía con gran emoción. Por otro lado, México mostraba incomodidad al ver tantos países ebrios y posiblemente drogados. Estaba claro que el mexicano no se alejaría de sus amigos y tendría como prioridad cuidar de las jóvenes latinas, a quienes consideraba como hermanas.
Pero fue entonces que Tina sintió su mano ser tomada por cierta chilena y pronto se encontraba entre toda esa multitud.
— ¡Vamos, Tina! ¡Esto es una locura!
— ¡Chile, aguanta!
— ¡Wey, no nos dejen aquí! —Dijo México a todo pulmón cuando vio a sus amigas irse entre la multitud, quedando él junto con los hermanos de la argento. Solos.
— Y bue, se prendió esta mierda. Veni, bro, acompáñame a fumar. ~ —México no creía lo que acababa de escuchar por parte de Uruguay.
— Paraguay no fuma pero irá contigo.
— ¡¿Qué?! ¡No me dejen so... Ah, ya se fueron. Chale.
México se encontraba en una incógnita. Su grupo se había separado, estaba solo entre tantos países. Conocía a unos cuantos pero su principal objetivo esa noche era cuidar a sus amigas. Suspiró y buscó su teléfono celular para llamar al dueño de aquella fiesta con la intención de hacerle saber que habían llegado. Po mientras, buscaría a la chilena y a la argento.
Por otro lado, la joven argento era tomada de las manos por su mejor amiga mientras bailaban entre países que no conocían y otros que lograban reconocer por poco. Ambas se soltaron y empezaron a elevar sus brazos mientras sonreían y se movían al ritmo de la música. Había pasado tanto tiempo desde que Tina estuvo en una fiesta, empezaba a divertirse y dejarse llevar por la emoción del momento hasta que chocó con alguien que reconoció al instante de escuchar su voz.
— Oh, Tina. ¡Que sorpresa verte por aquí! —Alemania. Aquel país europeo se hacia ver frente al par de jóvenes países latinas. La argento no pudo evitar sonreír y abrazar con fuerza a uno de sus mejores amigos.
— ¡Ale! ¡Chabon, que loco verte acá! — El abrazo fue inmediatamente correspondido. Habían pasado dos meses desde la última vez que se vieron y su encuentro en la reunión de ONU fue un alivio para sus corazones pero volver a verse, estando en una fiesta, era mucho mejor— ¿Cómo estás? ¿Todo bien?
— Estoy bien, meine leibe. ¿Y tú? Veo que te diviert...
— Ejem. ~ — El alemán había sido interrumpido por Chile, quien llamó la atención de aquel par al sentir su presencia ligeramente ignorada. Latina y europeo dejaron de abrazarse para que próximamente Alemania tomara la mano de la chica de parche y la estrechara— Weon, hasta que me viste. ¿La belleza de mi wawa te distrajo?
— Oh, jaja. Lo siento por eso. — Si hay que ser sinceros, Alemania era capaz de responder con un honesto "si" a la pregunta de su contraria.
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H O P E [Usarg]
Fanfiction❝No soy bueno para ti pero soy muy egoísta para dejarte ir❞ La historia de amor entre dos países completamente diferentes pero con algo en común: Un sueño. Capitalista y tercermundista. Una pareja nunca antes pensada. ¿Podrán estar juntos? ¿Serán...