19. Ballet

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Que fantasía. Entré en la urbanización y fui a donde estaban los buzones para ver si las llaves del Range Rover estaban allí. Efectivamente. Las cogí y volví al aparcamiento. Lo único que quería ahora era dar una vuelta con mi pequeño tesoro. Subí al asiento del conductor y suspiré, esto se siente como volver a casa. El olor familiar, el ambiente, todo.

Aún me moría de hambre así que conduje hasta el McDonald's más lejano que había en la ciudad para poder disfrutar del vehículo. No me imputaba ir sola, estaba acostumbrada a eso. Después de comerme un Mac Menú de esos volví a casa tranquilamente. Ya se estaba haciendo de noche pero aún se podía ver el final de la apuesta de sol. El cielo se teñía de todos los colores desde el amarillo hasta el azul oscuro, pasando por el rosa y el naranja. Milwaukee es un sitio muy bonito, tenía un gran rio y justo estaba pasando por un largo puente que lo cruzaba, también tenía preciosas playas muy tropicales y preciosas. No me llevó mucho llegar a casa ya que las calles estaban casi desiertas.

El coche de nuestro querido Mark no estaba estacionado y eso me preocupó porque aun que era tan pesado, insoportable y querida tirarle una silla a la cabeza, me había encariñado un poco con él. Subí por el ascensor y entré al piso. Estaba my tranquila ahora mismo. Fui a la terraza de donde podía ver el gran parque que había en frente de la urbanización. Observé un rato a las personas que disfrutaban de los ultimos rayos de luz de aquel día. Me empecé a aburrir así que cojí un libro y comencé a leer mientras el tiempo pasaba lentamente.

¿Dónde estás Mark Rogers?

Abandoné mi lectura y me dispuse a llamar a mi estúpido compañero de piso. Lo cogió al primer toque.

- Dime Preciosa -

- Vaya, el parasito sigue vivo - Dije sonriendo , aunque él no puediera verme

- Ya, no es tan facil deshacerse de mi bonita - Se rió del otro lado de la línea.

- Eso ya lo veremos -

- ¿Qué? -

- Nada - Me apresuré a decir, ensanchando la sonrisa de mi cara.

Si, seguro

- Solo quería saber si seguías con vida o no, ya sabes, por si tengo que hacer el trabajo sucio - Proseguí

Los dos nos reímos despreocupadamente.

- No te preocupes hay Mark para rato -

- Bueno si, adiós - Le colgué sin dejar que dijera nada.

Seguido a eso, puse un poco de música clásica y bajé las persianas del salón para que nadie viera nada desde el exterior. Sonaba "Moonlight Sonta" de Beethoven. Levante las manos hacia arriba y uní la punta de mis dedos. Me puse de puntillas y elevé mi pie izquierdo a la altura de mi rodilla. Hice algo parecido a una reveerencia y me dejé llevar por la música. El salón era espacioso y pude moverme comodamente. Había bailado ballet desde que era pequeña y aveces aprovechaba momentos como estos para practicar mi aprendizaje. Cerré los ojos y me imagine en un gran escenario en el que solo estaba yo. Tambien me imaginé con un preciosos tutú hecho de plumas blancas y lleno de detalles dorados y plateados. Hice movimientos , arabesque , pas couru segido de un salto y luego a lo que llaman grand bettement.

En este ultimo paso perdí el equilibrió y me cai hacia delante. Abrí mis ojos volviendo a la realidad y desconectandome de ese sueño del que acababa de salir, ese sueño que nunca pude hacer realidad.

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A la mañana siguiente Mark aun no había llegado y me envió un mensaje diciendo que no podría llevarme hoy aun que eso no importaba , tenía mi propio coche. Lo que quedaba de semana pasó bastante rapido y tranquilo. El viernes llegó y después de clase ibamos a ir a la playa tal y como dijeron el otro día. Me había puesto un bañador azul pastel y por encima un vestido semi ajustado de terciopelo color negro. Me miré en el espejo de mi habitación, se me notaba cada una de mis curvas en ese vestido.

- Oye preciosa ¿Estás lista o vas tardar una hora más? - Dijo Mark desde el pasillo.

- Callate parasito - Miré mi brazo que quedaba al descubierto y vi las marcas allí, al menos no se notaban mucho.

Iba a ir con Mark ya que no sabía dónde ir exactamnete y era mejor que llevaramos solo un coche. Me esperaba una pequeña fiesta con los del grupo, pero me equivoqué. Había una bonita mansión allí donde acababa la arena y estaba a rebosar, había gente dentro, otros estaban en el agua y algunos simplemente estaban hablando animadamente, y bueno, luego estaban los que ya estaban borrachos a las 18:00 pm. Bajamos del coche y la mayoría de las miradas se posaron en nosotros.

- No te separes mucho de mi - Me dijo Rogers con la mano en la parte baja de mi espalda

- ¿ Y si quiero hacerlo qué ? -

Mark entornó los ojos cansado de mis respuestas y quitó su mano de donde la tenía para seguir su camino. Vaya vaya, alguien de repente no está de humor. Me acerqué y le cogí del brazo porque llevaba unos tacones de infarto y no quería hacer el ridículo cayéndome. Él no se inmuto ante mi tacto. Pronto nos encontramos con todos, las primeras palabras de Mark hacia ellos fueron una orden clara:

- Tyler cuida de ella - Este asintió a modo de respuesta

- No tengo cinco años puedo cuidarme sola, además es solo una fiesta no hay peligro alguno.

- Si que lo hay  y para de rechistar a todo lo que  digo - Se soltó de mi agarré en su brazo y miró a su cómplice para que se colocara al lado de mi y luego se fue. Yo le seguí con Tyler detrás de mi para bombardearlo a preguntas.

- ¿Y qué tipo de peligro hay?¿Por qué tengo que tenerlo pegado a mi?¿Qué pasa con Sheila, Alexandra y Victoria? Ellas no tiene a nadie pegadas al culo - Le miré entre enfada y con suplica.

- Hay muchas cosas que no sabes Olivia así que cierra el pico y no rechistes -

Odio cuando me llama así.


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Bueno florecillas hasta aquí vuestro regalo, toda la semana he estado actualizando y es raro que siga viva :D

Espero que os haya gustado, intentaré actualizar una o dos veces la semana que viene. Cuando lleguemos a las mil visitas haré lo mismo, os amooo

Besitos húmedos de parte de Mark Rogers💖❤️

Cuando llegue la primaveraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora