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Olivia

Media hora después, Mark se dispuso a llamar a nuestros amigos para pasar la tarde allí mientras que yo pedía pizzas para comer algo porque me moría del hambre. Tuve que jurarle a Rogers que no pediría pizza con piña ni queso de cabra como la ultima vez.

El primero en llegar obviamente fue Tyler. Él se quedó conmigo en el salón mientras el Parásito hablaba con alguien por teléfono en su habitación.

- Em...Bonito día - Le miré esperando una respuesta

- Si, claro - Despreocupadamente y desinteresado. Me miró un segundo y luego desvió su mirada

Nos volvimos a quedar en silencio y lo observe, analizando lo poco que sé de él. Una idea cruzó mi mente y me arriesgué a preguntar, era eso o quedarnos callados. Solo sé que es bastante reservado y siempre está pensando en otras cosas, distante. Eso me llevaba a pensar que algo le daba ese aura de paz, a mi me la daban los libros. Tal vez a él también.

- A ti te gusta leer ¿verdad? - Sonreí para parecer más maja, pero la sonrisa no duró mucho.

Levantó su mirada del suelo y me miró con el ceño fruncido.

- A ti te gusta meter las narices ¿Verdad? - Fue muy rudo y seco ¿estaba enfadado o qué le pasaba? Auch eso me dolió.

Abrí los ojos al oír eso, no tenía por qué hablarme así, ya he tenido suficiente drama por hoy.

- Eso ha sido un ataque innecesario - Justo tocaron al timbre y me levanté para abrir. La verdad es que me molestaba que me hablara así, no le hice nunca nada pero decidí dejarlo pasar.

- Era necesario - Respondió a mis espaldas con asco en cada palabra.

Mira puede que este chico despierte curiosidad en mi pero eso no lo tolero, me estaba sacando de mis casillas, me di la vuelta y me acerqué a él lentamente señalándole con el dedo

- Mira no sé qué coño te pasa pero desde que te conocí has sido un grandísimo capullo conmigo y no te he hecho nada así que relájate porque a mi nadie me trata ni me habla así. Imbécil - Me volví a ir hacia la puerta para abrirles la puerta a los chicos y avancé unos metros aun que no llegué a tocar el pomo porque a mitad del pasillo oí cómo Tyler se levantaba del sofá y en un abrir y cerrar de ojos se encontraba detrás de mi, me cogió del brazo y me giró bruscamente hacia él. Su mano me apretaba con fuerza allí donde me agarró pero no flaqueé.

Su tono de voz me dio escalofríos, me hablaba en un tono bajo, un susurro y el desprecio se notaba.

- ¿Como un capullo? ¿Quién fue el que te trajo hasta aquí como a una princesita? -

El agarre en mi brazo empezó a dolerme pero no dije nada, solo nos sostuvimos la mirada mientras mis ojos se humedecían por la impotencia y el dolor que me estaba haciendo. Nos quedamos unos segundos así, me iba a dejar una marca de sus dedos allí donde me sujetaba. Volvieron a llamar a la puerta.

- Tyler suéltala joder le estás haciendo daño -

Mark apareció y se apresuró a llegar hasta nosotros para separarnos haciendo que el contacto visual se rompa. En un segundo se colocó en frente de Tyler y me posicionó detrás de si mismo

- Olivia vete a tu cuarto - Me dijo, aún mirando a Tyler

Volvieron a llamar a la puerta y dieron golpecitos. Yo le hice caso a Rogers ya que unas inmensas ganas de llorar llegaron a mi y no tenía fuerzas como para llevarle la contraria, simplemente obedecí. Había una tensión increíble.

- ¡Ya voy joder! - Exclamó Mark para que parasen de tocar al timbre.

Los oí a llegar todos mientras caminaba por el pasillo: Aaron, Victoria, Ashley, Izan y Dexter.

Alexandra y Adam estaban haciendo no se qué por no se dónde, no me enteré de lo que dijeron porque ya estaba cerrando la puerta de mi cuarto.

Mi instinto fue cerrar la puerta con cerrojo pero luego recordé que no tiene. Maldita sea. Menudo día de mierda, me acosté en la cama y me acurruqué intentando relajar esas emociones que tanto odio. No lloré. Claro que no lloré eso es para débiles y yo no soy débil , yo no sé llorar.

Oí cuando llegaron las pizzas y todos se pusieron a comer, también oía sus voces y sus risas pero no me atreví a salir de allí. Todo lo que había pasado hoy me había dejado exhausta mentalmente. En un momento dado me pareció oír pasos hacia mi habitación , creo que fue Tyler porque luego oí a Mark llamándole. Al cabo de un rato decidí coger un libro que me encantaba y me puse a leer. El libro se llama "Donde los arboles cantan" y me flipa desde cuando era una niña de 13 años. Desde que aprendí a leer encontré mi amor por los libros. Me pasaba tardes, días y noches enteras enfrascada en historias; de amor, comedia, terror, fantasía , misterio y un poco de todo. Eso es algo que me ayudó a madurar aparte de mi difícil adolescencia, siempre encontraba paz en los libros, son lo mejor de mi.

Me releí casi el libro entero en tres horas ya que mi ritmo de lectura era bastante rápido y si, pasé tres horas encerrada en mi cuarto mientras los demás disfrutaban de una tarde tranquila. Había guardado todas las emociones dentro de mi para conseguir paz mental pero sé que en cualquier momento todos esos sentimientos y emociones saldrán a la luz haciéndome vulnerable.

Eran casi las 8pm y no había comido nada a parte de un café esta mañana antes de salir de casa y otro en la Uni porque al final en la cafetería de la universidad se me fue el apetito. Me empecé a marear y no me llames dramática pero si no comía algo podía desmayarme, es algo que me pasa desde pequeña y ten en cuenta que mi cuerpo ha ingerido sólo liquido hoy. Me tragué mi orgullo y cogí el móvil para llamar a Mark. No quería más problemas hoy, además un fuerte dolor de cabeza se apoderó de mi. Desde mi cuarto oí su móvil sonar en el salón, después de unos segundos respondió.

- Mark ¿Queda pizza? - Le hablé antes de que dijera nada, al grano. Empecé a ver borroso pero se me pasaría en un segundo

- Si, ¿por qué? - Un silencio se formó ya que mi mente estaba teniendo un viaje astral - Oh , claro. No has comido nada - Llegó a esa conclusión el solo.

Cinco minutos después, mi puerta se abrió de improviso , como siempre hace Mark. Pero no me encontré a Mark, si no a Tyler. Me incorporé en la cama y desvié la mirada. Él entró cerrando la puerta detrás de él.

- ¿Qué haces? - Él no respondió, se acercó al borde de la cama y me miró.

- ¿Puedo sentarme? - Yo solo sacudí mi cabeza de arriba a bajo como respuesta. Lo que había pasado antes me hizo desconfiar de Tyler, pero una parte de mi se sentía segura con él.

Este se sentó y me tendió un plato con dos trozos de pizza. Volvió a darme un mareo y oí un leve pitido, volví a ver borroso y esperé a que se me pasara. Cuando mi vista y mis oídos volvieron a estar estables me di cuenta de que Tyler me llamaba con pánico. Seguro que porque no estaba acostumbrado a lo que me acababa de pasar.

Le arrebaté el bendito plato y empecé a comer como loca sin importarme que Tyler parecía haber visto un fantasma. Extrañamente, él se quedó conmigo hasta que me lo terminé todo. Luego habló.

- Lo siento -

- Fuera Tyler -

Me impresionó cuando una sonrisa dulce se dibujó en sus labios...Hmm. Se levantó y se fue hacia la puerta murmurando algo.

- Sois idénticas. -

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Hola Florecillas bellas
Aquí hay otro cap y no hay preguntas ni nada porque estoy hasta el cuello de cosas
Un BESACO muy dulce de parte del mujeriego de Mark💖

Cuando llegue la primaveraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora