23. La Fiesta

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Olivia

Salimos del coche y las cámaras se fijan en nosotros, junto a nosotros viene Tyler que se posiciona a mi lado derecho mientras que Mark está del otro lado.

- La gente va a hablar mucho de esto - Murmura Mark

Supongo que el echo de que ellos dos, los jóvenes más conocidos de este sitio, hayan aparecido sin acompañante y que estén conmigo hará que se cree mucho murmullo en la prensa.

Subimos los escalones que dan entrada al gran edificio y que están iluminados por luces amarillentas mientras nos fotografían.

- Sabía que no me iba a gustar esto - Murmuré

Mentira, a mi me encanta

No es el momento de opinar amiga

- Cierra el pico y disfruta Preciosa - Volteé los ojos disimuladamente cuando llegamos al final de las escaleras. Un señor en traje y con pinta de estirado se acercó.

- Señorito Rogers, es un honor verle por aquí finalmente - 

- Un gusto verlo de nuevo - Dijo este. Luego el señor miró a mi otro acompañante 

- Buenas noches querido, hacía mucho que no frecuentaban los eventos del señor Joshua - Finalmente fijó sus ojos en mi - Jovencita - Cogió mi mano y la beso educadamente - Es un placer tenerla aquí señorita...-

- Olivia - Completó Tyler, que se había mantenido callado como siempre.

- Señorita Olivia - Repitió el mayordomo - Me tiene a su disposición -

Le sonreí ampliamente.

- Gracias -

Tras eso y saludar a varias personas entramos. El sitio era impresionante. Todo estaba hecho de mármol y tenia estatuas de piedra en los rincones y muchas flores que combinaban los colores, pasamos del recibidor y entramos a una sala llena de gente. Había un grupo de músicos que tocaban obras en vivo. Todo estaba impregnado de un olor dulce. Sobre el resplandeciente suelo había unas mesas altas con aperitivos y copas rellenas de lo que supuse que era champan. En cuento pusimos un pie en esa sala muchos se voltearon a vernos.

Esto me gusta mucho colega

- Vaya vaya mira a quién tenemos aquí - Giré mi cabeza hacia la derecha y vi que la proveniente de esa voz era una chica con el pelo de color azabache y un largo vestido negro que definía cada una de sus curvas - A los famosos futuros emprendedores - Dijo con una sonrisa ladina

- Es un placer volvernos a ver Bianca - Ambos tenían una sonrisa incomoda en la cara y fueron a abrazarla.

- El placer es mío Mark - Después de darle un abrazo se posicionó en frente de Tyler.

- Tyler - Dijo ella

- Bibi - Le respondió - Estás espléndida este noche -

- Hacia mucho que no me decías esas cosas, lo he echado de menos -

Me cae mal

Y a mi.

- Encantada , soy Bianca - extendió los brazos para abrazarme y yo di un paso hacia atrás encogida como reflejo.

- Un gusto Bianca, yo soy Olivia - Dije y tome una de sus manos extendidas para agitarla incómodamente.

- Oh ya veo, bueno guapetones nos vemos luego - Les guiñó un ojo y se fue cantoneando las caderas.

Arpía

- Allí están nuestros padres, vamos - Mark puso su mano en la parte baja de mi espalda y me guió con ellos.

- Aquí está mi hijo favorito - Dijo el que supuse que era el señor Joshua.

- Si y el único - Le respondió Mark sonriente, se dieron un abrazo de esos que se dan los hombres. Que buena relación tenían.

- Buenas noches chicos - Dijo otro que sostenía una copa en la mano - Soy Daniel, el padre de Tyler. Bienvenida -

- Gracias - Les sonreí a ambos encantadoramente. Por mucho que me gusten estos eventos me sentía muy incomoda porque todos parecían conocerse y yo era la única nueva allí.

Estuvieron un rato charlando los cinco con otros señores y sus esposas. En un momento dado, sentí cómo algo pequeño y frio rozaba la parte descubierta de mis piernas. Mire hacia abajo y vi unos pequeños y curiosos ojos azules intenso. Sonreí a la pequeña y me di la vuelta para quedar frente a ella. 

- Hola pequeña ¿Cómo te llamas? - La niña tendría al rededor de cuatro años, se quedó callada unos instantes.

- ¿Eres una princesa? - Me preguntó de pleno. Levanté las cejas y me agaché para estar a su altura y la cogí de las pequeñas manitas.

- No soy una princesa pero ¿Quieres saber un secreto? -

La pequeña sacudió su cabeza de arriba abajo emocionada y con una pequeña sonrisa, me acerqué a su oído y le susurre:

- No soy una princesa, soy una reina - Me aparté un poco y le indiqué con el dedo que no dijera nada.

- ¿Y tu rey? -

- No tengo rey - Respondí sonriente encogiéndome de hombros

- De mayor quiero ser como tú - Se me arrugó el corazón por lo dulce que fueron sus palabras y me limpié un poco el ojo porque de verdad me había emocionado lo que me dijo, no quería que se corriera el poco maquillaje.

Sentí que me observaban y miré a Tyler desde mi posición. Me estaba mirando sonriente y luego golpeó el codo de su amigo. Mark se giró hacia mi y luego miró a la pequeña. En cuanto los hermosos ojos azules vieron a Mark saltó hacia él.

- ¡Tío Mark! Estás muy guapo así - El mencionado la cogió en brazos mientras yo volvía a ponerme de pie.

- No digas tonterías Charlotte, el tío Mark siempre está guapo - La niña rio en sus brazos - Mírate, pareces una princesa con ese vestido - 

Charlotte me miró y extendió sus manos para que la cogiera mientras decía.

- Pero yo no soy una princesa, yo quiero ser una reina como ella - Dijo ya entre mis brazos.

Estuvimos un rato con la pequeña Charlotte hasta que Elena, la hermana de Mark, vino a por ella. No sabía nada de que Mark tuviera una hermana, pero por lo visto era muy amable y tan guapa como su hermano. Después me volví a aburrir de la conversación de los presentes porque no entendía nada.

- Me quiero ir - Le susurré a Mark para que sólo él me oyera.

A este le bastó una sola mirada hacia su amigo para que Tyler me cogiera gentilmente de la mano y me llevara a su coche.

- Menudo día más emocionante - Dije mientras salíamos del establecimiento

- No me mientas, te he notado que no te ha gustado la fiesta -

- Mentira, ha estado genial, me encantan estos eventos - Tyler me miró alzando una ceja mientras conducía - Agh vale, es que no entendía nada de lo decían y m me aburrí mucho. Aun que bueno, al menos pude llevar este vestido - Terminé orgullosa.

- Te queda genial -

- Gracias, lo he hecho yo -

- ¿Es en serio?  -

- Si y además....-

Y así emprendimos nuestro viaje a casa entre anécdotas. No fue incómodo como otras veces. Tyler suele ser muy callado y frio pero a veces dejaba salir ese lado de él que tan agradable me parecía.

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Hola Florecillas

Aquí estoy de nuevo, por favor decidme que os gusta el jazz porque es lo único que sonaba en la fiesta.

He tenido una idea, tengo pocos lectores pero como os conozco a todos (a no ser que haya un lector fantasma) intentaré añadir a la historia algo que me recuerde a cada uno de vosotros para que tengáis algo especial en esta historia.

Adiós preciosuras, besos de parte de Mark que sé que le amáis, es un boss


Cuando llegue la primaveraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora