𝙲𝚊𝚙í𝚝𝚞𝚕𝚘 𝟺: ¿𝙻𝚎𝚟𝚒𝚊𝚝𝚑𝚊𝚗?

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La noche estaba transcurriendo lo más normal y tranquilo posible. O eso es lo que se aparentaba. Con respecto al profesor Riddle, no lo había visto en toda la noche, supuso que estás cosas lo aburrían bastante, pero eso lo descarto en el momento que vio a su profesor en el bar.
Era una noche hermosa, dónde la luna brillaba tan radiante y llena de vida, que hasta iluminaba los lugares más oscuros de Londres. Todo los que estaba en aquel edificio, ubicado, en uno de los lugares más importantes de Londres, se encontraba bailando, disfrutando de un trago de su bebida favorita y la música que acompañaba aquel hermoso momento, lo hacía perfecto. Mientras sonaba la música de Elvis, indicado que era el momento perfecto para bailar un rock and roll, la joven Stark, diviso a su padre hablando con un hombre que ella no conocía. Frunció el seño, le parecía extraño ese sujeto y la forma en la que la miraba a ella y luego a su padre, la hacía sentir sumamente incómoda.
En ese minuto, todo acabo, las sirenas de la policía se hicieron sonar, mientras los presentes mismos se miraban entre confundidos y asombrados por tal alboroto. Hasta que un disparo se escuchó, alertando a las personas, haciendo que corran, como si su vida dependiera de ello.
Mía dudo, no era la primera vez que eso le pasaba, pero si, la primera vez que ocurría en un lugar así. Empeoro, cuando los policías que se encontraban en el lugar, no eran policías. Tenían una calavera con una serpiente como escudo, en su pecho derecho, ahí lo supo, desde ese momento lo supo, eran los de HYDRA.
La joven se puso rígida, mientras observaba como los hombres que se encontraban en el lugar, sostenían a los rehenes.

- El teseracto- Hablo el primer hombre- El teseracto o prendemos fuego el lugar- Volvió a hablar, mientras que el primer disparo de la noche se hacía escuchar.

A la joven Stark cuando escucho esa palabra, casi se desmayo, no habían oído de ese objeto cuando el Capitán América lo había enterrado junto a el en el hielo. Era un objeto sumamente peligroso ante el ojo de los humanos. Un objeto que nunca debía haber caído en la tierra. 

- Rápido, que Leviathan se acerca- Respondió uno de los hombres. 

- ¿Leviathan?- Pregunto Peggy aún más alterada- ¿Qué es lo que saben de el?- Volvió a preguntar, tratando de zafar del tipo que estaba detrás de ella. 

- Cállate estúpida- Respondió el hombre que se encontraba detrás de ella.

Todo fue muy rápido, la joven Stark no sabía que es lo que estaba pasando, hasta que uno de los hombres la miro a ella.

- ¿La niña?- Pregunto el hombre que la señaló- ¿Qué tiene de importante- Volvió a preguntar.

- Es la niña que quiere Leviathan- Hablo el cuarto hombre- Es una Stark- Contesto, dejando a todos los presentes mirando a la niña con asombro.

Tenía miedo, sin duda, su lado Gryffindor no salía a la luz, no cuando su vida estaba en juego. Lo que más le llamo la atención, era no ver al profesor Riddle entre los rehenes, pensó que capaz había logrado salir, un completo bastardo según ella. 

- Alto ahi- Exclamaron un hombre que caminaba con un bastón y golpeaba a uno de los hombres encapuchados- Soy el agente de Sousa y mi compañero acá presente Thompson, somos de la SSR- Al decir eso, la agente Carter golpeo al hombre que estaba detrás de ella, para luego empujar a su sobrina a una de las esquinas del lugar.

La joven Stark, vio todo desde su lugar, el momento en el que su tía se defendía de aquellos hombres y hasta el momento en el que aparecieron los Comandos Aulladores. Mía se quedó muda. Frunció su ceño, cuando vio también a su padre y a Jarvis en el lugar, sin ninguna duda estaba enojada. Pero no era momento de reprocharles eso, no ahora.

- ¿Estás bien?- Le pregunto el agente Thompson a la joven.

- Si- Respondió lo más cortante que pudo.

Observo el salón todo destruido, algunos hombres encapuchados asesinados y el lugar todo con sangre. Si un policía común y corriente viniera a este lugar, lo único que podría decir era, de seguro, de alguna mafia que anda circulando por estas zonas. Pero no era así.
Su tía la miro, ella misma no sabía cómo establecer una conversación con ella como antes, más aún sabiendo que su propia tía le oculto información, información que ella podría guardar. Porque se trataba de su familia, de su padre. 

- Se que hay muchas cosas que necesitas saber, te lo diré después no ahora- Le aseguro Carter a su sobrina, mientras su padre, hablaba con el agente Thompson- Tu seguridad es nuestra principal responsabilidad, espero que algún día entiendas eso- Trato de decir su tía, a su vez que ella se iba al auto junto a su padre.

Tenía muchas preguntas, preguntas que debían ser resueltas y una de ellas, tenía que ver también no solo la de su padre, sino, la de su profesor. Todavía, ese hombre, por más guapo y encantador que sea, no le aspiraba mucha confianza. 

Destino |Tom Riddle| (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora