La hija de Poseidon

Capítulo 19

Al abrir los ojos vi el cielo, un cielo azul lleno de nubes y rebosante de luz, me tape los ojos con ambas manos ya que la luz me molestaba pero segundos después de haber hecho eso todos los acontecimientos de la noche pasada se me vinieron a la mente, me apresure a destaparlos y ver donde me encontraba.

Estaba en una plataforma transparente, lo que se veía abajo de mi era una caída libre a un risco,  a mi lado se encontraba Percy inconsciente pero....¿y los demás?

El pánico me invadió, me apresure a pararme de donde estaba y acercarme al borde de la plataforma. Entonces los vi, estaban en una plataforma unos metros mas abajo, la cosa es que ellos abajo no tenían un risco, en cambio estaban arriba del mar.

Annabeth y Thalía estaban atadas la una a la otra con cadenas pero aun así seguían durmiendo. Nico estaba tumbado en la otra esquina de la plataforma, el muchacho tenía puestas unas esposas pero no estaba durmiendo, parecía que hubiera despertado hacia horas, miraba a todos lados con cara de aburrimiento, estuve a punto de llamarlo pero entonces vi a Lucien. Se encontraba encadenado a un trono, el trono estaba rodeado por una pared hecha de cristal, no tenía huecos ni salidas pero aun así el muchacho seguía durmiendo.

—¡Nico!—grite pero el muchacho no me escucho.

—Por fin despiertas Jessica—a mi lado se materializo Némesis, la diosa de la venganza en persona—ya que despertaste supongo que podemos comenzar, no sigamos haciendo esperar a nuestro amigo del inframundo—señalo hacia Nico haciendo una inclinación de cabeza.

—¿Qué es lo que quieres Némesis?—pero ella en vez de responder chasqueo los dedos provocando que sonara una alarma y todos los demás se despertaran.

Vi como Thalía y Annabeth se levantaron completamente confundidas, trataron de pararse pero en vez de lograrlo chocaron la una contra la otra, vi sus labios moverse de forma desesperada pero no las lograba oír desde donde estaba. Lucien trato de pararse del trono pero fallo estrepitosamente al estar encadenado y Percy al oír la alarma se paro y cogió su bolígrafo para presionarlo y convertirlo en su espada.

—¿No es increíble esa espada Perseus?—río Némesis—ni siquiera yo pude lograr que no volviera a tu bolsillo, de todas formas no es necesario quitártela ya que en unos momentos la usaras.

En ese momento desee tener un arma como la de Percy, 

—¿Qué esta pasando?—Percy mantuvo en alto su espada y se acerco a mi.

Némesis hizo aparecer un micrófono y se lo llevo a los labios.

 —Damas y Caballeros—Némesis hablo con una voz de presentador fingida—hoy estamos aquí para juzgar a Jessica Harris, aquella muchacha que no cumplió su parte del trato con una diosa y por eso será castigada ¿en serio no te basto con matarme a uno de mis hijos ahora además quieres llevarte a mi otro hijo?

—¿De que esta hablando?—pregunte—yo no he matado a ninguno de sus hijos.

—¿No lo recuerdas Jessica?—Némesis me miro con cara de decepción— ¿no recuerdas a James Milgrim?

Abrí los ojos de par en par al oír ese nombre, no tenía idea de que el fuera hijo de Némesis pero en ese momento todo cobro sentido.

—Bueno....si no lo recuerdas ¿Qué te parece si te doy un repaso de la memoria?—la diosa volvió a chasquear los dedos y hizo que una pantalla gigante apareciera en el cielo, supuse que la puso ahí con la intención  de que desde ambas plataformas se viera la pantalla.

—No tenía idea de que el fuera tu hijo—dije de forma apresurada tratando de que ella no revelara ante todos lo que había hecho—como sea que vayas a hacer tu venganza hazla en mi, no es necesario que los metas a ellos en esto.