Pequeña excepción - LS #1

Capitulo 2

Harry siempre llega temprano, cuando quiere, ya que le molesta la cierta atención que recibe en venir y el estrés que varias personas le hacían tener con sus comentarios.

Louis llegaba en el autobús o con su madre, aunque con la última siempre recibía el mismo comentario ante de salir del auto.

- Ya deberías conocer a alguien, un amigo pero alguien que no sea malo, no te lo permitirá, debes tener buenos amigos, buenas influencias - Louis sonrió forzadamente asintiendo.

No le molestaba, realmente no lo hacía, solo que su madre siempre a sido extremadamente sobreprotectora y estricta con él y un tanto... dura en el modo de regañar o guiar a su hijo.

A él en cierta parte le dolía, recuerda cómo era su mamá antes y ahora siendo un tanto fuerte desde hace ya un tiempo, aunque no lo negaría ama a su madre.

- Louis, tengo un viaje de trabajo, serán dos semanas me iré pronto, aun no se cuando - él estaba acostumbrado a ir a esos viajes por su madre, no es como si le agradaran.

- Mamá... yo uhmm, preferiría quedarme está vez - su madre no estaba tan convencida con la idea y luego de tanta súplica por parte de su hijo termino dándole ese permiso.

Ya llendo tarde se despidió de su madre y entro al aula.

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Al sonar la campana salió y sintió unos brazos abrazarlo por la espalda.

- Harry - recibió un gruñido como respuesta.

- Perdón - extrañamente habló un poco más alto que de costumbre.

- Creí que no vendrías, no me dijiste nada - El mayor seguía abrazado y haciendo que el castaño se sonrojara al ver la mirada de las demás personas que caminaban en el pasillo.

- ¿Como... querías que te avisara? No tengo tu número y... - Louis saco su teléfono y Harry extendió su mano, este se lo dió y el rizado agendo su número.

- No importa lo que sea, llámame polluelo - se soltó de menor y se fue con una leve sonrisa, aunque no sin antes pasar su mano por el lacio cabello de Louis.

El apodo dejo perdido a Louis quien inconscientemente sonrió y le dejo un tierno color carmesí en sus mejillas.

Louis sabe que puede confiar en Harry y que este estaría dispuesto a ayudarlo ya que en muchos momentos se lo a hecho saber.

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Una semana después

- Louis, saldré el viernes, no serán dos semanas serán 3 - El castaño asintió terminando de ayudarle a su madre a terminar con la maleta.

Es miércoles, aunque ya era de noche, el jueves Louis tenía clases temprano así que pronto se iría a acostar.

- ¿Estás seguro de que quieres quedarte? - Louis volvió a asentir sonriendo - Mamá, ve tranquila - su madre cerró las maletas.

- No se tesoro, me siento nerviosa al dejarte aquí - Louis abrazo a su madre - Estaré bien ma.

- Bien, cualquier cosa que pase llámame ¿Esta bien? - Lou respondió con un simple está bien.

El castaño se fue a acostar al igual que se madre.

Por su parte Harry estaba terminando de cenar, puede que tendría que levantarse a las 7 de la mañana, pero le gustaba disfrutar la noche.