5• Como un depurador

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La luz le cegó, de nuevo, por unos instantes. Jaeden pudo aclarar su vista unos segundos después para ver un comedor comunitario con decenas de adolescentes dentro.

— Bienvenido a nuestra base — Dijo ___ orgullosa, haciendo una seña para que la siguiera.

Él la siguió mirando todo a su alrededor, algunos niños pequeños jugaban con otros individuos mayores (Jaeden supuso que eran sus hermanos mayores) Otros adolescentes estaban en una esquina hablando, otros servían alimentos en una bandeja para ingerirlos antes de salir a cazar de nuevo.

Podía resultar fascinante toda la base que tenían montada, e incluso podría felicitarlos por refugiarse, de no ser porque todos ellos eran unos depuradores.

Jaeden noto las tablas clavadas en las ventanas y en la puerta principal para que nadie entrará, aún había gritos y dolor allá afuera. El ojiverde no sabía si en esos casos era más peligroso salir a tratar de huir o venir a la colmena central de los depuradores (como lo estaba haciendo él).

— Te presentaré a todos — Dijo la chica sonriente jalandolo de la muñeca para llevarlo a una especia de mesa en donde jugaban cartas.

— Éllos son Nicholas — Apunto ___ al muchacho que le había salvado — y ellos son Judah y Graham — Ahora señaló a un castaño con mueca despreocupada y a un rubio con cara de matón — Chicos, él es Jaeden Martell — ___ se acerco a sus amigos haciendo una barrera con las manos para evitar que se escuchara su conversación, cosa que fue bastante inútil pues Jaeden oyó cada palabra — Es el actor.

— Hola — Murmuró Jaeden sentándose en la misma mesa que ellos, ___ tomó asiento a un lado del matón llamado Graham.

Los tres individuos no le quitaban los ojos de encima, lo analizaron minuciosamente durante minutos, Jaeden se sentía como en el primer día de instituto.

Y justo cuando creyó que ninguno de los tres diría algo, Graham habló.

— ¿Quien es este idiota?

___ dio un leve codaso a su novio para que se comportará — Lo vas a asustar — Le dijo.

— ¿Esa es mi sudadera? — Preguntó Nicholas ladeando la cabeza levemente.

— La tomé prestada — Se apresuró a decir ___ — No iba a dejar que saliera como un platillo en bandeja de plata a los demás depuradores.

Jaeden sentía sus mejillas rojas de la vergüenza y el miedo, lo que menos quería era hacerlos enojar por tomar sus ropas.

— Veo que tomaste mis pantalones también — Río Judah desviando la mirada hacia su juego de cartas.

— Y mi camisa — Suspiro Graham irritado.

— Lo siento, puedo cambiarme...

— ¡No! — los 4 miraron a la chica, ella se removió nerviosa — Quiero decir... véanlo no sobreviviría con su anterior atuendo, era horrible.

— Como sea — Graham rodó los ojos e ignoro la presencia de Jaeden olímpicamente en cuestión de segundos — Quiero que vengas a un encuentro.

— ¿Un encuentro? — Cuestiono ___, nunca había ido a uno de esos, sus 3 amigos siempre le habían dicho que ese tipo de reuniones eran muy peligrosas — ¿Con quien?

Jaeden no quería meterse mucho, pero era inevitable no escuchar, bajo su mirada a la mesa para tratar de distraerse.

— Una fuerza independiente — Explicó su novio — Al parecer empezaron a reunir un pequeño grupo de personas como nosotros y quieren nuestra ayuda.

The Purge: Murder Purgers |Jaeden Martell y Tú|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora