Cap 24: Ajuste de cuentas.

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Herune estaba desconcertada y completamente triste de como Nikha quiere terminar todo esto, mientras ve las calles solitarias de la región 4, a laves que ve la calle vacía por una razón que justo ahora desconocía ella.

Todo lo que quería haber evitado de una forma tan serena, cercana y sobre todo compasiva, se ha vuelto nada con solo ver la determinación del hongaro por matar a Drane de una vez por todas; su cara estaba llena de tristeza y lastima, rezando a los ancestros para que nadie resultará muerto, con una cabeza baja y pensativa.

De pronto, Herune siente un filo en la parte baja de su espalda y una voz tenebrosa le exclama con suavidad, lo cual eriza la piel de la letánida.

¿?: Bien hecho, vice-encargada. Ahora podré crear la tumba al hongaro por fin. El ya esta muerto, sólo es cuestión de tiempo.

Herune queda paralizada por lo que esta pasando a sus espaldas : No se podía mover, pálida por completo; su "corazón" se detuvo por un instante; comenzó a sudar a la vez que sus ojos expresaban el terror que sentía por dentro, al no poder moverse y estando vulnerable.

La voz vuelve a exclamar con más fuerza.

¿?: Volteate y ve mi cara... ¡Vamos!

Herune baja la cabeza completamente decepcionada y responde.

Herune: Se quien eres. Drane, ayudaste a muchos tripulantes cuando llegaste aquí, incluso al hongaro. ¡¿Por qué ahora?!

Drane: Correcto, soy Drane. En cuanto ayudar a los tripulantes, sólo buscaba ayuda a llegar a donde estoy... Ahora volteate.

Herune se arma de valor y se aparta rápidamente y se impulsa al frente para dar una patada hacia el afilado cuchillo de Drane, pero este lo lanza hacia arriba a tiempo para tomar el pie de la letánida y romperlo, jalándola hacia el y en el punto que el cuchillo esta a punto de caer encima de ella, Drane lo toma con rapidez con dos dedos, teniendola justo en frente de ella.

Herune abre los ojos y ve la cara sádica que tenía en ese momento Drane; incluso parecía que los ojos del trabajador por un momento se tornaron rojos sangre, dándole una cara más diabólica aún, mientras el estaba encima de ella para inmovilizarla.

La letánida queda petrificada y a la vez adolorida por la fractura, mientras que Drane acerca el cuchillo a la cabeza de ella y contesta con un tono más molesto.

Drane: ¡Vamos, inténtalo otra vez! Este cuchillo es uno de los mejores que pude robar. Puede cortar una hoja de papel sin esfuerzo. Te podría matar y sospecharían del verdadero dueño, el esta dormido justo ahora y cualquier movimiento está a favor mío.

La letánida no podía creer lo que pasaba, ella ya no sabía que sentir en realidad, pero estaba totalmente quieta para que Drane no hiciera un movimiento falso y muriera.

Drane aprovecha que es hora del almuerzo para llevar a Herune a su cabina. Este se levanta y toma a Herune de las piernas y la espalda como una bolsa, y con una velocidad impresionante llega a la cabina en dos minutos.

Drane entra al cuarto de la letánida, su sonrisa diabólica desapareció y su cara estaba sería, y hace que Herune exclamé entre sollozos.

Herune: ¡Estas loco!

Drane le contesta riendo de forma aterradora.

Drane: ¡Jajaja! ¡¿Ahora te das cuenta?! Tu estas... justo ahora viendo mi cara de satisfacción y felicidad. ¡Matare al hongaro en la noche cuando esa niña se vaya a su planeta!

Herune queda sorprendida y pregunta.

Herune: ¡¿Como sabes eso?!

Drane le responde acercándose a ella con una expresión orgullosa.

Este peligro parece de otro mundo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora