No Mires Atrás [Finalizada]

Capítulo 4

Jeff narra:

- Rayos, creo que se desmayo- dije resaltando lo obvio en un tono preocupado.

Salí con mucho trabajo de la cama, la tome entre mis brazos y la acosté, se vei tan hermosa como el otro día. Lentamente se empezaba a levantar.

- Ahhhh- grito al verme.

Rápidamente con mi mano le tape la boca para que dejara de hacerlo -Shhh, tranquila no te voy a hacer daño- le dije tratando de calmarla.

Cuando menos sentí ella me mordió y salio corriendo hacia uno de las esquinas de su cuarto.

-¿Quien eres?- dijo espantada.

- Creo que tu sabes la respuesta- le dije mientres me acercaba lentamente.

- Este, eres Jeff, ¿No?- dijo mientras se me acercaba.

- Si, y tu ¿Quién Eres?- le pregunte arqueando mi ceja.

- Mi nombre es Tn, encantada- decía con miedo mientras acercaba su mano temblorosa para estrecharla con la mía.

- Un gusto, Tn- dije mientras estrechaba su mano con fuerza y de pronto le di un jalón para así quedar frente a frente, pude ver como se ponía roja su cara.

- Pareces una cereza- dije romanticamete sarcástico.

- Pues tu pareces una paloma- dijo algo seria pero notaba que empezaba a estar cómoda como con mi precencia.

En eso se escucho un sonido en la cocina.

- Ah si, deje la comida calentandoce, ya se me habia olvidado- decía mientras se daba un pequeño tope con la mano en la cabeza y sonreía - Este, amm, ¿Quieres comer?, mi mamá hizo sopa y pescado-.

Simplemente la mire extraño un segundo, accedí y me puse alado de la puerta.

- Las damas primero- dije mientras abría la puerta y le sedia el paso.

Pero que chica tan curiosa, me está invitado a comer, ¿Que acaso no está aterrada? ¿Quién en su sano juicio lo haría?

Tn narra:

¡¿Pero que rayos hice?!, ¿Acaso lo invite a comer? Debe ser por que cuando estoy aterrada no piensa y simplemente hablo.

Los dos bajamos a la cocina, aunque no le quite el ojo encima, que tal si era una trampa, pero algo en mi interior me dice que es un gran chico.

- Disculpa, ¿Puedes sacar dos platos hondos?- le dije mientras señalaba un cajón.

El asintió, los saco mientras y yo les puse la comida.

¡¿Qué rayos estoy haciendo?!