O como vivir entre humanos y no morir en el intento
Esto no puede estar pasando... ¿es lo que los humanos llaman incredulidad? Yo, que me he encargado de recolectar las almas destinadas al infierno, que he hecho sufrir a incontables humanos llevando pandemias y epidemias, ahora estoy... ¡Por Lucifer, termine igual que él!
Joder, esto no estaba en mis planes, estúpido Bel.
Estoy en el mundo humano, sin nada que hacer. Puedo sentir que todo se queda en silencio: no hay forma de contactar a otros demonios en el infierno. Quiero volver, quiero regresar a mi lugar, a esperar otro trabajo y seguir con mi existencia como siempre... aunque quiero hacerlo no lo hago, solo porque aún debe haber algunos viendo lo que hago, y sería una humillación mayor intentar ir al infierno y ser regresado aquí. No hay nadie en este lugar, solo un montón de edificios viejos.
¿Y ahora qué?
No puedo perder la calma ahora, tengo que pensar... y moverme de aquí: este lugar me está poniendo enfermo ¡Y eso no puede ser posible! Yo no enfermo, o no lo hacía cuando estaba ligado al infierno, no sé qué pasara ahora ¡Ni siquiera puedo teletrasportarme! Ah, bien, eso es lo primero: Comprobar cuanto poder me dejaron, nadie hablo de quitarme poderes ¡Que injusticia!
No puedo teletrasportarme, apenas puedo leer los pensamientos de los humanos o manejar sus voluntades. Mi fuerza física deja mucho que desear y apenas puedo mover objetos sin dejarlos caer a la mitad. Al menos aun puedo volverme invisible. No voy a olvidar esto, y cuando regrese al infierno verán que nada puede detenerme, regresare y tendré el lugar que he querido, les demostrare que esto no va a quedar así.
No es la primera vez que vago por las ciudades humanas, aunque esta vez sé que no tengo a donde volver, ahora que sé que puedo y que no puedo hacer debería encontrar un lugar para quedarme y poder pensar con calma pero sin olvidarme de mi venganza. Aun puedo aparecer algunas cosas, pequeñas. Es una maldita suerte que no tenga que comer ni sienta el clima como los humanos o estaría en serios problemas. También agradezco a Satán que a Lord Astaroth no se le ocurriera volverme un humano y conservar mis recuerdos de demonio, ese sería el peor castigo que puedo imaginar. Ah, ese lugar parece solo, puedo quedarme aquí y esperar... y blasfemar contra todos ahora que puedo.
.
.
.
¿Cómo llevare las almas de los humanos al infierno ahora? con los poderes que me dejaron es una tarea que me tomara milenios, mejor me hubieran puesto con el papeleo. No puedo quedarme en las casas de los humanos como si fuera un vil ladrón, podría comenzar a hacerles creer que la casa esta maldita y se larguen, pero eso ya no funciona mucho estos días, lo único que harán será poner una cámara de video y llamar a los humanos charlatanes que fingen hablar con fantasmas y hagan un reportaje aquí.
— Maldita sea... ¡Esto es tu culpa, Azrael!— en parte si es culpa suya, debería venir y ayudarme... ayuda... ¡Claro! Nadie me dijo que tenía que pasar esta prueba solo. Sé que ningún demonio va ayudarme, Azrael podría hacerlo pero no estoy seguro de que sea una buena idea y con los poderes que tengo ahora no sé dónde podría encontrarlo o si él puede encontrarme. Entonces solo me queda usar a los humanos. Sí, es sencillo: les ofreceré lo que pidan por su ayuda, aún no he comprobado si puedo hacer pactos, pero con lo que puedo hacer sé que puedo convencer a cualquiera de ayudarme, no por nada he llevado tantas almas al infierno. Ya saben lo que dicen: Si no está prohibido está permitido.
¡Un mes...! llevo un maldito mes en la tierra y esta situación de mierda sigue igual. No he podido encontrar a Azrael, y los humanos resultaron ser más inútiles de lo que esperaba. Si no estuviera metido en esta situación me reiría por que no pueden mantener una promesa, siempre terminan pensando solo en ellos y se pierden en el poder que creen tener, cuando el del poder soy yo. Lo más agradable de todo es dejarles sin nada o ver sus caras cuando les mato. Cada vez es peor, es más difícil usar mis poderes ¿voy a convertirme al final en un humano más? No puedo dejar que eso pase. No puedo moverme tan lejos como quisiera o ya hubiera encontrado algunos humanos más que podrían servirme sin tener que estar lidiando con problemas y no vagando por las noches en busca de alguien suficientemente interesado y egoísta, alguien que no tenga nada que perder y todo por ganar. Rondar los apestosos callejones de basura humana es lo más bajo que caído.
ESTÁS LEYENDO
Como un demonio
FantasyEl joven huérfano que tomo muchas malas decisiones, robo, estafo, quizá fue asesino, se unió a una pandilla y luego a un grupo de mafiosos. Logro algo de fama, pero su codicia le hizo pretender más. Se acostó con la hija del jefe, y con el hijo tamb...