No pude hacer nada más que...

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Shoto no creía en monstruos fantásticos o fantasmas (sería difícil en el mundo en el que vive), pero aquel chico y su apariencia era algo angustiante. No tenía miedo de ser atacado, si no que, sólo no quería sentirse comprometido en ayudar a un desconocido y peor, cuando este está relacionado con su molesto vecino. Intentó ingresar rápidamente su código y hacer que no había visto o escuchado algo, sin embargo, el desconocido invadió el poco espacio que quedaba entre él y la puerta.

-No me ignores de esa manera- dijo suplicante- ¿puedo quedarme sólo unas horas en tu casa?, sólo quiero descansar lo suficiente. tengo algo importante que hacer mañana y me siento muy cansado.- aferró sus manos a sus hombros, no sabe qué es el espacio personal.

Shoto dirigió su mirada hacia otro lado, la cercanía con ese chico le incomodaba. Es un completo desconocido que ha tenido tanta confianza como para tomarle de los hombros y rogarle- No es mi problema- dijo secamente- además, no te conozco, ni tú a mi. ¿Cómo podría confiar en tí?, en cualquier momento podrís atacarme.

El chico escucho todo, otra vez sus esperanzas parecían derrumbarse-dijo entre susurros- Talvez, sea mi facha...Mmm, debería cortarme el cabello y teñirlo nuevamente...mmm...-y volvió al contexto-¡no! No es así, soy una persona muy confiable. No atacaría a alguien sin razón alguna, te mostraré mi identificación- el desconocido comenzó a buscar su identificación en las bolsas de su pantalón. Shoto miraba algo irritado, estaba cansado. Si ese chico continuaba insistiendo no le quedaría más que dejarlo quedarse. ¿eh?, Aah, jajaja, tal vez la dejé en mi auto-dijo avergonzado- mi nombre es... Mikumo Akatani

-¡mph!-Shoto bufó- entonces ¿por qué no vasa dormir en tu auto?, en vez de pedir a un desconocido que te deje dormir en su casa.

-¿eh?, a caso ¿quieres que muera esta noche?, se siente como si nevara. Mi amigo a penas me ha dado una sudadera.

-Sólo ve a buscar otro lugar donde quedarte.

-¿No es trabajo de los héroes la seguridad de los ciudadanos y brindar apoyo?- estas palabras sobresaltaron a Shoto.

-Mi trabajo ha terminado- a pesar del ataque del otro, intentó mantenerse y no ceder.

-Los héroes nunca dejan de ser héroes...

                   ...

-(¡Mierda! ¡mierda!. Maldito. ¿por qué sólo no te quedaste callado?)- pensó el joven Todoroki ardiendo en llamas.

-¡Wow!, Es agradable ver un departamento muy ordenado después de ser echado por mi amigo- el chico escaneaba cada lugar al que dirigía su mirada- de algún modo, me da la impresión que nadie vive aquí. Los héroes han tener tanto trabajo ¿no es así?.

-Lo es... Bueno actualmente, ha reducido en comparación al pasado... Gracias a otros héroes.-su voz por un momento se volvió melancólica- Sin embargo, no podemos bajar la guardia.

-Oh. ¿Es de esa manera?

-...¿Cómo supiste que soy un héroe?- recordó lo que el otro chico le dijo- Puedo pensar que tu amigo y tú no son de por aquí.

-Mmm... fue el día de hoy, por la mañana. Las personas cuchicheaban y tuve curiosidad, porque la gente parecía conocerte. Le pregunté a la chica que me atendió. Eso es todo.

-¿Eh?

-Estaba sentado frente a ti...-continuo hablando con un tono relajado y alegre -las personas te admiran y respetan, creo que es genial- le mostro una linda sonrisa y nuevamente Shoto se sintió amenazado por su extraño sueño.- Cuando me di cuenta de tu presencia, estabas mirando hacia mi mesa. Me sentí confundido, pero probablemente algo estaba ocupando tu mente para que te concentrarás en eso.

Después de estas palabras Shoto se sintió aliviado, sabía que esa persona le hizo recordar a alguien más y por eso su mirada no se despegó de esa mesa.

-Has de estar demasiado cansado, pareciera que en cualquier momento escurrirá sangre por tus ojos o ¿consumes alguna sustancia ilegal?- cortó un paso de distancia entre ellos y mantuvo una mirada amenazadora, tal vez de esa manera podría deshacerse de él.

-Ah, eso. Son las lentillas. olvidé mi malestar tratando de persuadirte. ¿me permitirías pasar a tu baño?, necesito quitármelas antes de que esto terminé peor.

Shoto señaló hacia su izquierda y entró a su habitación. Quería tomar un baño e ir directamente a dormir, esté día fue completo desastre. Comenzó su día de mala manera y terminó con extraño en su apartamento.

La puerta del baño fue abierta antes de que pudiera tocar la perilla, el chico de cabello negro tallaba un ojo . Sin pensarlo Shoto tiró de su mano sorprendiendo al contario. Inmediatamente la soltó.

- Deberías dejar de tallarte los ojos o se irritará- dijo algo avergonzado por haber hecho aquello. 

Mikumo no dijo nada.

-Puedes dormir en cualquier lado excepto intentar entrar a mi habitación o dormir en baño-

-¡Esta bien!, ¡Gracias!- inclino su cuerpo, podríamos pensar que intentaba que su rostro golpeará el suelo. Se sentía muy feliz de que no lo hayan dejado dormir en la calle.

Durante su ducha vino a su mente el rostro del chico, algo había cambiado después de que saliera del baño. Pero, ¿Qué podría haber sido?. Al salir caminó directamente a la sala- Este chico realmente moría de cansancio- Volvió por una manta para cubrirlo, se detuvo por más tiempo. Observaba e intentaba comprender por qué está persona llamó su atención. Su aspecto es extraño, un tipo descarado y al parecer educado que lo obligó a darle posada. No podría compararlos cuando son tan opuestos.



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¡Hola! y ¡Feliz año nuevo! (jajaja, lo siento, se me hizo un poco tarde)

Muchas gracias, por leer esta pequeña historia y ser pacientes (jejejeje). 

Mi redacción no es buena, espero mejorar con el tiempo. (Cualquier cosa que no entiendan pueden hacérmelo saber y trataré de corregirlo, pero no del manga original,  porque mi mente está algo perdida, jejeje)




¿Puedo quedarme a tu lado?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora