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Tiempo después…

Tras tres meses de estar en el castillo del rey dragón, Zafiro había mejorado mucho, además de que había demostrado el alcance de sus habilidades y aprendió mucho más buscando en la biblioteca real, Derek estaba orgulloso de su joya pues era un joven aventajado y muy inteligente que aprendía con gran rapidez, era como una esponja absorbiendo conocimientos.

Por tal motivo, tras descubrir que Zafiro podía levantar escudos o barreras que no permitirían dejar entrar a enemigos o les darían aviso de si traspasaban territorio Drakens.

Una campaña salió del castillo para dirigirse a las fronteras, Derek dejo encargado a Iank del manejo del reino en su ausencia pues era su consejero real además de uno de sus generales.

El rey marchó con su joya, los guardias de ambos es decir Sinqua, Gagtly, Iasak y Lyan, sus generales Kirk, Jornad, Theodred, Aidekr y Gavre, junto a un considerable número de tropas.

-Manténganse alertas- ordeno el rey con el campamento ya armado mientras caminaba al lado de su joya en tanto Zafiro hacia su trabajo.

Los guardias Sinqua e Iasak cuidaban las espaldas el rey como era su deber y Gagtly junto a Lyan de la joya, cabe resaltar que a ninguno de los más cercanos al rey se les pasaba por alto la manera en que Derek cuidaba de su joya, como un verdadero tesoro, los hacía pensar que su rey encontró el suyo propio.

Zafiro había encontrado unos pergaminos en la biblioteca que estaban en un rincón pues nadie los había podido leer hasta que él llegó al castillo, el joven se dedicó a estudiar ya que no se le permitía haber mucho en el castillo y aprendo que podía hacer  barreras que les avisarían cuando entraran personas con intenciones beligerantes o malintencionadas a los límites del reino.

-El camino está delimitado- dijo Zafiro caminando sobre la hierba húmeda por la lluvia que no les había permitido trabajar en las barreras más temprano, el joven había estudiado los mapas de los límites del reino y por eso sabía como ubicarse física o metafísicamente en ellos -Se establecerá una línea invisible desde la frontera principal hasta el castillo- explico a su rey sosteniendo una esmeralda en su mano  -Está la enterrare aquí- señaló había el suelo y se inclinó poniendo la palma de su mano sobre la tierra -Sí, esté es el lugar-

-¿Y si alguien desentierra la piedra?- pregunta curioso Lyan un poco más atrás de ellos.

Zafiro se gira hacia el rubio -No podrán, sólo el rey o yo podríamos hacerlo- le respondió -Estos tienen un papel de amuletos y están encantados para que respondan sólo a nosotros- de sus túnicas saco otra piedra, está vez un zafiro estrella -La sangre las vincula-

Derek hizo una mueca al recordar cómo su joya le había pedido que le hiciera un corte en su palma con una daga, el rey con mucho cuidado había hecho lo pedido en la mano de Zafiro y con su sangre el joven cubrió la gema azul, tras eso había realizado el mismo procedimiento con el ojiverde bañando a la esmeralda con la del rey.

Cuando Zafiro se puso en pie de nuevo, el rey señaló el lugar y Sinqua abrió un hoyo allí con un movimiento de su mano pues era un afín de la tierra, tras eso se retiró unos pasos -Gracias- murmuró el joven al de piel oscura.

Sinqua asintió en reconocimiento, mientras Gagtly sonreía a Zafiro con cariño.

El castaño se inclinó de nuevo, enterró la esmeralda, la cubrió con la tierra y posicionó sus manos sobre el lugar, cerrando los ojos murmuró una palabras que los demás no entendieron y se pudo ver un brillo verde emerger de la tierra.

Tras esto coloco el zafiro estrella sobre el mismo lugar, ubicó las manos sobre este y recitó otras palabras, cuando terminó se puso en pie y se giró hacia el rey entregándole la gema la cual brillo tenuemente en azul hasta volver a la normalidad -Está la debe llevar siempre consigo mi señor- le instruyo respetuosamente -Se pondrá caliente cuando alguien traspase la frontera y dará una especie de zumbido cuando los que pasen tengan intenciones ocultas-

La Joya del DragónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora