ーMío por contrato.ㅣ 🐯🐰ㅣ

" Prólogo "

El señor y la señora Jeon eran el matrimonio perfecto, se amaban profundamente, se respetaban mutuamente, nunca discutieron, nunca hubo ningún problema amoroso en lo absoluto.

Pero... Era demasiado perfecto como para ser real.

Su amor podría ser muy profundo entre ambos, pero aún así, no dio frutos por más que quisiesen, la señora Jeon era estéril.

Ella comenzó a orar todas la noches de cada día, hizo esto durante casi dos años y medio.

Hasta que finalmente se cansó, aquél "Dios todo poderoso" no escuchó nunca sus plegarias.

Tanto era su agobio y frustración que comenzó a rogarle y a dejar sus plegarias a otro ser, uno al cual todos temen y nunca tienen en cuenta, "Lucifer".

El deseo de querer criar un niño desde pequeño la cegaba, tomaría cualquier camino con tal de lograr su objetivo.

En cuestión de semanas, sus plegarias fueron escuchadas, su estómago se hinchó de la nada y mágicamente ya llevaba 8 meses de gestación.

El matrimonio decidió celebrarlo esa noche entre ellos, pero minutos antes de que su pequeña celebración comenzase, apareció una sombra frente a la puerta, a la cual le estaba ladrando el pequeño cachorro que tenían en ese momento.

"-¿Están seguros de lo que hacen?... Escuchen"

Dijo aquella sombra con una voz grave y algo tenebrosa.

"-El primer fruto de su matrimonio se le entregará a alguno de los príncipes del inframundo, les guste o no, si tratan de oponerse a toda costa, el bebé o uno de ustedes sufrirá las consecuencias"

"-Pero..."

La voz temblorosa del señor Jeon se hizo presente.

"-¿Se lo llevará a pesar de que el fruto puede que sea niño?"

"-¿En serio acabas de hacer esa pregunta estúpida?... Lo importante es su alma y su energía vital, ahora si llega a suceder un error entre el humano y uno de los demonios pues..."

"-¿Pues qué?..."

"-Olvidenlo, disfruten criar a la ratita, no se encariñen mucho, ya que se la van a quitar algún día"

"-Yo no quiero esto, quiero a mi bebé de por vida"

Habló la mujer sin miedo a nada.

"-No puedes quejarte mucho, debes de pagar, si no hay trato, el bebé desaparece"

La señora Jeon guardó silencio, la sombra rió.

"-Veo que hay trato"

Dijo su última frase y aquella sombra desapareció como si nada.

El último mes pasó y nació un niño hermoso y saludable al cual le llamaron Jeon Jungkook.

Pasaron de ser de matrimonio perfecto, a familia perfecta, claro está que sin que nadie sepa de la existencia del pacto entre el matrimonio y ''el diablo''.

Los años pasaban muy rápido para el gusto del matrimonio Jeon.

Temían que el momento donde Jungkook es arrebatado de sus vidas llegase, por lo cual acudieron a tener otro bebé para no sentir lo fría y despiadada que es la soledad.