Capitulo 12

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La nieve cubría todo el suelo,  pero como son precavidos, limpiaron los caminos y las áreas donde practicaban con los caballos.
Kunzite me llevo a montar, al parecer se había convertido en  una costumbre en los pocos días que estábamos allí, me abrigo bien y salimos a los establos, me monto en su caballo y él lo fue guiando, me sentí una princesa en el corcel de mi príncipe...
platicábamos y reíamos, aunque en estos días lo hacía más el...
Casi al finalizar el paseo Taiki se apareció con nosotros montado en otro caballo y le informó algo en el oído, Kunzite se sorprendió tanto, sonrió, monto detrás de mi, y apresuró la marcha del caballo y seguimos a Taiki. cuando llegamos a la entrada de la casa estaban unos hombres rodeando a Lita y apuntando sus armas, Lita también les apuntaba con su arma, las bolsas de las compras que realizó estaban en el suelo a sus pies. Y Amy detrás de ella asustada. Kunzite, bajándose apresurado del caballo llegó y les pidió bajar sus armas, Taiki se bajo y sostuvo las riendas del caballo que yo montaba, les indicó que ella era la esposa de Nephrite y aprovechó para decir  lo mismo de mi, nos presento. Los hombres lo saludaron con un: es un gusto joven, tanto tiempo, que alegria de verlo con bien, es muy hermosa su esposa, ¡pero que lindas chicas! Taiki al ver que Lita no bajaba su guardia y en especial no dejaba de ver a un tipo en específico, se acercó a ella y le dijo que eran amigos, que todo estaba bien. Presento a Amy y la tomo de la mano para que no se asustara, Lita guardó el arma y dijo algo en voz muy baja, después con una sonrisa  saludo a todos y les ofreció una disculpa. Yo seguía montada en el caballo algo nerviosa por tal escena, Kunzite me bajo y Un moso se acercó y se llevó los dos caballos, Lita se acercó a nosotros sonriendo y respirando hondo. Kunzite nos dijo que había llegado visita, pero que no nos diría quien hasta que nos presentaran, pero que era alguien importante. Kunzite camino con migo en brazos y Lita y Taiki junto a nosotros entramos a la casa y nos dirigimos al cuarto de Nephrite. Amy se fue a la cocina a dejar las demás bolsas.
Lita sin advertir que había alguien más en la habitación se fue derecho con Nephrite que en ese momento Darién le estaba cambiando las vendas. Lita se ofreció a hacerlo y el la dejó hacerlo. Kunzite me sentó en el sofá y fue cuando mire a una mujer vestida de un blanco pálido de pie junto a la ventana, recuerdo bien que llevaba un saco largo y su cabello recogido totalmente en un peinado sencillo... miraba atentamente la escena de Lita y Nephrite que estaba sentado en la orilla de la cama acariciando la cara de Lita, Kunzite se acercó a la mujer llamándola: MAMMA! (Mamá en italiano) yo me quede helada al escucharlo. (¡Esa mujer era mi SUEGRA!!!) la señora extendió sus brazos para recibirlo y lo lleno de besos, Lita sin percatarse terminó y se sentó junto a él, Nephrite le dijo que tenía que presentarle a alguien, y lita emocionada le pregunto que de quién se trataba... Kunzite se sentó a mi lado... Nephrite se levantó y se acercó a la señora y le dijo: te presento a mi madre!.  Con una gran sonrisa, Lita se quedó perpleja y su cara se sonrojó, Kunzite comenzó a reír al igual que Taiki, pues esa escena fue muy graciosa. Lita no supo que decir... mi cuñado la presento como su Novia, prometida y futura esposa. Lita estaba que no podía hablar, hasta yo sonreí por su no reacción. Hasta que al final articulo palabra, nerviosamente se presento y se disculpó por su reacción.
La señora miro en mi dirección, Kunzite se puso de pie y me presento ante su madre, aunque también estaba nerviosa pude presentarme. Pero la señora al no parecerle que no me pusiera de pie me miro fijo y me pregunto si no me merecía su respeto, no entendí a lo que se refería, pero Kunzite se adelantó y le dijo que no podía caminar, que después le platicaría.
La madre se llamaba Neherenia, se sorprendió por la  respuesta de su hijo, yo me sonrojé, baje la mirada y me disculpe. Ella se alejó para vernos mejor a Lita y a mi: así que ellas son las famosas Lita y Mina. (Famosas? Wow señora favor que me hace) nos dijo con una enorme y simpática sonrisa, mis nervios se relajaron un poco al verla sonreír. Conversamos un Poco, más bien... nos interrogó, después se despidió y se retiró a descansar, pues  el viaje había sido largo y cansado. Pero sin antes advertirnos que nos miraríamos  en la comida.
Lita se derrumbó en la cama y comenzó a reír, todos lo hicimos, Nephrite, Kunzite, Taiki, Darién y yo...
Kunzite me tomo
En brazos y nos fuimos a nuestra habitación, de verdad que eso me estaba cansando un poco, me comencé a sentir una carga para el... me sentó en la cama y se dejó caer en ella de espaldas, le pregunté que porque no me había dicho de quien se trataba la visita, a lo que él me contesto que no era necesario, ella ya sabía quienes éramos y que estaba encantada con nosotras, aún así no fue justo para nosotras...
llamaron a la puerta y era Amy quien llevaba unas tasas de Chocolate caliente que Kunzite le recibió junto a unas galletas, los puso en la mesita y me sentó en el sofá junto a esta, Amy se acercó a mi y me pidió disculpas por lo de las bufandas, y que no tenía que preocuparme, que ella sabía su lugar y el mío, y que esperaba ser mi amiga (esa chica de verdad me agrado desde el principio) salió del cuarto dejándonos solos, Kunzite tomo unos libros y se sentó a mi lado, tomo uno y comenzó a leerme. Sin duda ese era uno de nuestros pasatiempos. Leer juntos...
A la hora de la comida, bajamos al comedor y allí estábamos todos: Kunzite, Nephrite, Darién, Taiki, el Sr. Chaos, Lita, Serena y yo. El lugar de la cabecera estaba desocupado, allí se sentó la Sra. Neherenia cuando llegó, todos se pusieron de pie al recibirla, claro menos yo, me sentí incómoda, yo estaba sentada en medio de Serena Y Lita, ya que nuestros chicos estaban en lugares designados a lado de su madre, a lado de Serena estaba Kunzite que a su ves estaba junto a Darien, Nephrite estaba frente a él y a su lado Taiki y frente a nosotras el Sr. Chaos , Amy y Reí acompañadas de otros hombres sirvieron la cena, Nos deseo feliz navidad, y nos entregó un presente a todos.
a Lita, Serena y a mi nos regaló un brazalete de oro blanco con 4 flores compuestas por pequeños diamantes, el
Color de estos cambiaba para cada una de nosotras, las flores de él de Lita eran verdes, las de Serena rosas y las mías naranjas, el centro de cada una de ellas tenía un color diferente pero higual al de las otras chicas, eran hermosas, le agradecimos y nos pidió que fuéramos a su lugar porque ella nos las quería poner. Primero fue Serena, después Lita y como no podía levantarme la Sra. Se acercó a mi y me lo coloco en el brazo izquierdo y bromeando con las demás le dijo que no éran menos importantes solo que por mi condición lo tenia  que hacer, todos reímos, era muy simpática, nos explico que cada una de esas flores representaban a cada una de nosotras, Lita sorprendida pregunto si la 4ta flor era ella, pero dijo que no, la 4ta flor era otra mujer que aún no llegaba, pero esperaba llegara pronto, mirando fijo a Taiki, este se sonrojo y miro a Amy que estaba detrás de la Sra. Neherenia, (intuí que le gustaba) y Serena bromeó: aver si te apresuras, ya quiero a mi otra cuñada... volvimos a reír... pero Lita y yo nos miramos incrédulas. ¿Porque dijo eso Serena? Lita quería preguntar pero yo le dije que no lo hiciera que después le preguntara a  Nephrite. Yo aria lo mismo con Kunzite. Serena se había convertido en una excelente amiga desde antes que llegáramos a la finca. Desde que nos conocimos por primera vez por la pelea de Beryl y Durante mi hospitalización debido a lo de Molly ella era una de las que estaba al pendiente de mí junto con Lita y Darién, ya que estábamos en su clínica... Serena era enfermera...
Aunque era un poco mayor que    Lita y yo, nos la pasábamos bien juntas... yo tenía 19, Lita 20 y Serena tenía 21, si, éramos muy jóvenes...

Después de la comida intercambiamos lugares para estar juntos, ya que durante la cena y en ciertas ocaciones había protocolos que seguir ya que no estábamos casados aún no podíamos estar juntos en la mesa, órdenes de la Sra.
Y tradiciones familiares... Había ciertas reglas que teníamos que seguir sin discusión, y esta era una de ellas, como si fueran protocolos de la realeza.

Después de horas sentados nos sirvieron chocolate y una rebanada de pastel, nos la estábamos pasando muy bien. Entre bromas, risas y anécdotas...

Amores peligrososDonde viven las historias. Descúbrelo ahora