Amores peligrosos

Capitulo 6

Amores peligrosos

Después de ciertas posiciones candentes en el Sofá, nos vestimos, y llamo para que trajeran la comida. El señor que nos recibió en la entrada acomodó la comida sobre la mesa de centro que extendió para que se hiciera más grande. Un simple fettuccine  Alfredo con tiras de pollo encima, una ensalada con mandarina y nueces, y de postre unos Cannolis  y dos copas de vino, era algo sencillo pero simplemente delicioso, había probado estos platillos en otros establecimientos pero simplemente esto era mejor que todos ellos juntos y aún más, era exquisito, me platicó que tanto él como su hermano estudiaron gastronomía, y que decidieron probar suerte abriendo su propio restaurant, y ya que eran de desendencia  italiana se especializaron en esa gama de extensos platillos deliciosos...
Antes de terminar llegaron Nephrite y Lita que encantados habían planeado una cita doble al cine después de que nosotras saliéramos del trabajo.  Dicho todo eso y habiendo nosotros  aceptado se fueron felices como si de dos niños se trataran.
Entre pláticas me pido que si debes en cuando podía quedarme con migo en mi casa, que él no me pedía que yo me quedara en la de él por que siempre había hombres entrando y saliendo, ya que vivían primos con el, que aún no buscaba algún lugar para él quedarse, en eso recordé que el departamento de alado del mío estaba desocupado le pregunté que porque no rentaba ese, que yo conocía  al dueño, y podía contactarlo con él, el se negó, ya que aunque el mío era muy cómodo, él estaba acostumbrado a espacios abiertos y se sentiría algo claustrofobico en uno así de pequeño, le platiqué que uno de mis sueños era comprarle ese departamento a mi hermano y comprar el de alado y los dos de enfrente, cerrar todo ese piso y que fuera todo mío, un sueño que solo era eso, un sueño que jamás podría cumplir con el sueldo que ganaba. El río, sus aspiraciones eran diferentes a las mías, él tenía ya experiencia en todo, y al parecer también dinero, el era mayor que yo por 8 años,  yo notaba que experiencias ya tenía y me imaginaba que de todo tipo, aún así, casi me juro amor eterno. Yo era una chica 'inocente' si así se le podría llamar, al menos así me decía el:
-mi amor, mi niña inocente...
No quería enamorarme de él, porque al él ser mayor que yo y estar más experimentado, ¿que podía mirar él en mi que no tengan las otras chicas con las que a estado? Esas otras mujeres de seguro  eran eso, mujeres!, echas y derechas y bonitas y .... haaa!!! Y así lo
Comprobé días después,  mientras cenábamos en una de las mesas casi a la hora de cerrar del restaurant llegó un chica muy hermosa, alta, con curvas de infarto y cabello hermoso, de tacones altos y vestido entallado al cuerpo, llegó preguntando por Kunzite y cuando lo miro se le lanzó al cuello, valla que esa chica era espectacular, una morena exuberante llamada Beryl, Kunzite se sintió nervioso, la chica intento besarlo pero Kunzite Lo impido, me miro y su mirada que en un momento era de incredulidad se trasformó en desprecio hacia mi. Yo me quede sentada mirando la escena, Kunzite se la llevo del brazo pero una pared impidió que yo mirara lo que pasaba, no supe qué pensar en ese momento, no sabía si irme o quedarme, pero mi incomodidad se hizo más presente, tome mi bolso y me dirigí a la salida, sin mirar atrás, estaba calmada, sabía que un día así llegaría, pensé en lo bonito y excitante que había sido... sentí que mi corazón se estrujó en mi pecho, camine hasta la calle para tomar un taxi, cuando abrí la puerta para entrar en el taxi, me jalaron el brazo y de repente ya estaba en el hombro de Kunzite, sentí como puso sobre mi trasero su saco para cubrirme, el taxista se quedó mirándonos y con la mano le indiqué que todo estaba bien. llegamos a su coche y cuando me bajo me beso con ansia, me regaño como si fuera su hija, me volvió a besar y yo le dije que no había problema, que entendía si se quería ir, que mi tuno había acabado. El solo respondió con una ternura en su voz:
-mi niña tonta, tu eres la única que mi corazón espero por todo este tiempo. Nadie más a ocupado ese lugar más que tu...
La verdad me derritió con esas palabras, pero... a cuantas mas se lo había dicho... Beryl apareció en su coche, un BMW cabrio rojo convertible, se miraba sin más que la chica nadaba en dinero. Se bajó del coche y se puso alado mío, me miro de ariba a bajo, y se dirigió a mí con ciertas palabras no muy agradables, Kunzite le grito que parara que yo era su chica y que se alejara, sin más, abrió la puerta  me hizo entrar sin darme oportunidad de defenderme, cerró la puerta con seguro y rápido rodeó el frente entre gritos de Beryl entro, lo encendió y comenzó a manejar, salió de la plaza y al percatarse que Beryl lo seguía siguió manejando hasta ir a una calle totalmente iluminada, paro frente a una Casa Blanca y bajo del coche, Beryl se paró detrás nuestro y se bajó del coche entre gritos de que no podía hacerle eso, que lo amaba, y que no podía vivir sin él, y que yo era una chiquilla tonta, estupida y .... yyy fue allí cuando mi enojo surgió y salí del coche, me adelante a Kunzite y me puse En medio de ellos dos, Beryl me ganaba en estatura, y mas por sus enormes tacones, se burló de mi, me señaló con el dedo diciendo que era poca cosa y fue todo lo que le permití, le di una cachetada, la jale del cabello al suelo y me subí sobre ella, le pegué con el puño cerrado, Kunzite me separo de ella, se levantó y se abalanzó sobre nosotros, me golpeó y gracias a sus anillos me abrió el labio, me libre de Kunzite y le propiné otros golpes que la tiraron al suelo, ¡GRACIAS HERMANO POR LAS LECCIONES DE BOX QUE ME DISTE CUANDO ERAMOS NIÑOS! Jajajaja! Aún no se me olvidan. Kunzite me volvió a sujetar. Y Beryl Con uno de sus tacones rotos, su vestido roto, su labio sangrando, su ojo morado, y sus extensiones de cabello en mi mano se levantó se subió a su coche y se fue echa una fiera.
Mi labio sangraba demasiado, mancho mi ropa y mis manos estaban totalmente llenas de sangre por tratar de cubrirme el labio, otros coches llegaron y se estacionaron enfrente  y atrás del de Kunzite se bajaron varios hombres y le preguntaron si estaba bien, se dirigieron a él como SEÑOR, a lo que él mencionó que si, sacando su pañuelo y dándomelo les ordenó que guardaran su coche, tomo mi mano y me jalo hacia la Casa Blanca, unos perros se cruzaron en nuestro camino, y el con una orden se sentaron dejándonos pasar, la puerta de la casa se abrió y un señor algo mayor con suéter gris y una boina lo saludo llamándolo también SEÑOR, Kunzite le pidió un botiquín de primeros auxilios, el rápido lo trajo, me sentó en una silla alta en la cocina y retiro el pañuelo totalmente ensangrentado, mi sangre aún salía, no tan abundante pero no dejaba de salir, tomo unos algodones y les puso alcohol, yo abrí mis ojos al verlo, él me sujeto del Cuello en un movimiento rápido y me coloco el algodón en la herida, yo me sujete de su brazo enterrando mis dedos, y grité, no fue mucho lo que me lo dejo, Mis lágrimas salieron e inundaron mi rostro, hasta la cabeza me dolió por el ardor. Kunzite me coloco una gasa y limpio la sangre de mi barbilla y cuello, el señor de la boina giro el grifo del sink en señal de que me lavara las manos, me coloco jabón líquido y abrió la llave, el agua mojo mis manos tornándose algo roja por mi sangre, me lavé tres veces, y me tendió una toalla,
me seque las manos y me la retiro con una simpática sonrisa, yo sonreí y le agradecí, Kunzite  también le agradeció y me tomo de la mano me llevo ante unas escaleras pero mis pies no respondieron, me cargo y me llevo a una habitación, me llevo  al baño, me dijo que me duchara me quite la ropa y me mire mi cuerpo y a pesar  de traer ropa algo gruesa la sangre traspaso y me mancho mi pecho, abdomen y piernas ¿que tanto había sangrado? Mi herida no era tan grave para tanta sangre, y de repente sentí un ardor en la boca de
mi estomago, y mire que salía sangre de allí, era una herida de unos 2 1/2 de largo, no tan profunda pero que no dejaba de sangrar, asustada, llame a Kunzite que entro con el manos libres en su oreja, me miro y tomo una toalla y la presiono contra la herida, tomo mis manos y me hiso que tomara la toalla, él agarro otra toalla más grande y me envolvió en ella, me cargó y me acostó en la cama, él no dejaba de hablar por teléfono, hablaba en italiano, y en español, mi cabeza empezó a dar vueltas y sentí que me quedaba dormida, el Se acercó ami y solo me llamaba por mi nombre pidiéndome que no me durmiera, intenté hacerlo, cerré los ojos por unos segundos y un hombre de cabello obscuro estaba frente a mi, Kunzite estaba a su lado, comencé a sentir unos piquetes en mi estomago que me incomodaron, recordé mi herida y me asusté un poco, kunzite tomo mi mano, y me dijo algo que no entendí... mis ojos se cerraron...
Cuando desperté estaba en un cuarto de hospital, me sorprendí, en el sofá estaba sentado mi chico, intenté moverme y el se acercó a mi, pidiéndome que no lo hiciera, pregunté lo que había pasado, me explico que Beryl me encajó una navaja en nuestra pelea. ¡así es!  La muy maldita me hirió y yo no sentí nada. Jeje!
Gracias a que la herida no era grave el doctor me dejo ir, Si, pase todo un día dormida gracias a que perdí sangre. El doctor alto guapo, de cabello obscuro era Darién, hermano mayor de Kunzite y Nephrite, estábamos en la misma casa pero en un cuarto equipado con indumentaria de hospital. Tipo casa de vistas. Kunzite me llevo a la casa que estaba separada de la otra era enorme, y blanca, con muchas plantas en su interior y grandes ventanales que dejaban entrar la luz del día, parecía que estaba en un jardín secreto. la decoración era gracias a su madre, le apasionaban las plantas y las incluyó en la decoración de la casa, era hermosa.
Me acosto en su cama y hablando en italiano con el señor de la boina. Me presento con el, aunque nuca supe su verdadero nombre lo llamaban Chaos, el señor simpático y feliz de verme, me saludo, como si de su nieta se tratara, fue tan amable, cariñoso y atento con migo, jamás lo olvidare...
Chaos se presento como el mayordomo, amigo, abuelo, tío y hasta padre de Kunzite y Nephrite.  Decía que eran sus muchachos, y que se sentía orgulloso de ellos... (valla orgullo) por la noche Lita y Nephrite llegaron, Lita preocupada lloró al verme bien, me dijo que le
Informó a Kenji de lo sucedido, y que estaría mínimo tres  semanas ausente del trabajo. Pero que dependiendo mi mejoría le avisaba, ya que fue una herida algo importante, reí por lo que decía, agravó la situación ante Kenji. Pero ella se escudo diciendo que yo era como su hermana y que se preocupaba por mi, cosa que agradecí. Kunzite y Nephrite sonrieron ante la escena de Lita y yo acostadas en la cama abrazadas y Lita llorando por mi infortunio, echando fuego por los ojos cuando le contamos lo sucedido, y como
Una ogra maldijo el no aber estado allí para ponerle una arrastrada a la tal Beryl. Nephrite  se refería a ella como su 'chica dinamita' le brillaban los ojos al verla contar historias...
después de un par de horas se despidieron, yo cansada me quede dormida, pero note cuando Kunzite salió de la habitación, no le di importancia y cerré mis ojos, no se en que momento regreso, cuando desperté él estaba a mi lado, dormido....