Capítulo 24. De nuevo sobre él.

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Oh si, creo que puedo hablar más sobre mi padre. Creo que con esto acabaré de hablar sobre él... si es que no sale alguna otra memoria de la que me quiera deshacer.

Les había dicho que no recordaba del porqué mis padres peleaban; pero no es cierto, lo recuerdo muy bien por que el tema central de la violencia presente siempre fueron las amantes de mi padre.

¿Que digo? La mayoría de las supuestas amantes no eran mas que prostitutas recogidas de alguna parte de Sullivan o Tlalpan, creo que eso era lo que mas le dolía a mi madre, que unas prostitutas tuvieran el dinero que servía para mantener a mi hermana y a mi.

A los 11 años deje de contar las veces que no había regresado a casa en toda la noche, claro que no regresaba por andarse divirtiendo con mujeres y gastando dinero a lo estúpido. Perdí la cuenta luego de 7 años de contar, luego de llegar al número 52, luego de cansarme de contar inconscientemente como si de un hábito se tratase. Solo me hacia sentir peor.

Y aún así no podía evitar darme cuenta de las veces que no llegaba.

Mi padre es un cabrón que le vale madres todo el mundo y solo le importa él mismo.

Cuando el divorcio de mis padres fue llevado a juicio por el tema de la custodia de mi hermana y mía, él simplemente le dijo al juez que no sabia porque estaba en juicio, que él no quería quedarse con la custodia -de sus propias hijas- y que eso era una perdida de tiempo.

También hubo un tiempo en el que solo utilizaba la casa con hotel de paso, porque en una semana solo llegaba a dormir un día, los otros seis días se la pasaba afuera, supongo que en casa de alguna mujer, y regresaba a las 4 :30 de la mañana para fingir que había llegado y había dormido en casa y llevar a mi hermana y a mi al colegio.
Como si yo no supiera la verdad.

Tal vez por eso soy como soy, ya sabes lo que dicen, de tal palo tal astilla.
La gente especializada dice que uno siempre busca en su pareja un reflejo de su madre (si es hombre) o un reflejo de su padre (si es mujer), yo creo que no buscare nunca una persona que refleje a mi padre o a mi madre, porque tengo el instinto de mi madre, aunque más desarrollado, su manera de hacerse la fuerte y su desconfianza hacia las personas y puedo ser tan cabrona como mi padre, tengo su ingenio y tengo su manera de siempre esconder y obtener cosas con argumentos y mentiras. Imagínense el desastre que soy cuando soy ambos en un solo cuerpo.

Claro que eso solo es una parte de mi, la otra es el yo que formé después de tantas cosas por las que he pasado, la parte positiva de toda la mierda que soy, lo que nació para ser un poco distinta a ellos.

Hay cosas que nunca nadie sabrá de mi, porque ya ni siquiera sé cual es mi verdadero yo; tal vez realmente soy todo, una mezcla desastrosa de todo.

Verdades Ocultas. (Hidden Truths)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora