Mi rayo de sol (Los gemelos Weasley y tú.)

Callejón Diagon

Hoy me levanté por la mañana muy feliz porque por fin es el día en que iré a comprar mis cosas al callejón Diagon para asistir a Hogwarts.
Me levanté de mi cama directo a mi cajón para agarrar mis cosas y meterme a bañar, me bañé lo más rápido posible (pero bien obviamente), cuando termine me sequé bien y me cambié, ya lista bajé corriendo por las escaleras para llegar al comedor y saludar a mi padrino Lupin.

Tú: Hola tío! (Me acostumbre más a decirle tío) buenos días.

Lupin: Buenos días, por lo que veo que ya estás lista para ir a comprar tus cosas.

Tú: Si así es, ¡estoy muy emocionada!

Lupin: Pero claro, Hogwarts es una de las mejores escuelas de magia, a parte estoy seguro de que tus papás deben estar muy orgullosos de ti.

Tú: Espero que si lo estén, la verdad a veces quisiera tenerlos aquí, pero tú has sido como un padre para mi, y estoy feliz de que estés aquí conmigo.

Lupin: Yo también estoy feliz, si eres como una hija para mí, pero basta de charla, a desayunar para ir pronto por tu cosas.

Tú: (sonríes y comienzas a desayunar)

Cuando terminamos de desayunar salimos de casa y nos dirigimos a la parada de autobús, donde nos llevaría a un lugar que era tipo un "bar" de magos, después de unos minutos llegó el autobús y nos dirigimos hacia nuestro destino, una vez que entramos, fuimos a la parte trasera del lugar, Lupin empezó a tocar varios ladrillos de una pared, de repente comenzaron a moverse abriendo un camino que salía al callejón Diagon, (la verdad es que la magia nunca deja de sorprenderme) enseguida nos dirigimos a Gringotts para sacar algunos galeones que me dejaron mis padres antes de morir, obviamente para poder comprar todo, una vez ahí fuimos directo a donde estaba un elfo con aspecto bastante gruñón, su nombre es Griphook, a lo que mi tío comenzó a hablarle.

Lupin: Disculpe, buenos días, necesito retirar una cantidad de la bóveda 573.

Griphook: Esa bóveda es de la familia Avery, (volteó a verme y me dijo) ¿tiene su llave señorita Avery?

Lupin: Aquí está la llave.

Griphook: Bien, síganme.

Nos subimos a un carrito y rápido llegamos a la bóveda, al parecer tenía bastante seguridad, en cuanto la abrieron me sorprendí, ya que había muchísimos galeones, y la verdad no sabía que tenía tanto dinero, una vez que tomamos el dinero necesario fuimos rápido a una tienda llamada "Flourish y Blotts" en donde compraría los libros para mis clases, entramos a la tienda y en lo que mi tío fue a comprarlos yo me quedé viendo unos libros que llamaron mi atención, en lo que los veía escuché una voz detrás de mi, a lo que me volteé y vi a un niño de cabello negro, con ojos azules, lentes y una cicatriz en forma de rayo, al parecer le estaba estorbando ya que estaba tapándole un libro que necesitaba.

Tú: Ay perdóname, creo que te estoy estorbando.

El Niño: Oh no, no te preocupes, (Toma el libro) por cierto hola, me llamo Harry, Harry Potter.

Tú: Hola, mucho gusto Harry, yo me llamo ______ Avery

*Nos damos la mano en forma de saludo*

En eso un hombre muy grande con barba y cabello largo se acerca con Harry.

El señor grandote: ¿Listo Harry?

Harry: Si ya, por cierto ella es _____ Avery, _____ él es Hagrid.

Hagrid: Mucho gusto Señorita Avery.

Tú: Mucho gusto.

Hagrid: Bueno Harry ahora si tenemos que irnos.

Harry: Bueno, adiós _____

Tú: Adiós, ¡un gusto!

En eso Lupin va conmigo y me dice que ahora vayamos a comprar mi varita a lo que yo asentí con entusiasmo.

Cuando llegamos a la tienda llamada "Ollivanders"
Me dijo que fuera entrando en lo que el iba a otro lado, así que eso hice, entré y no se veía nadie, entonces toqué una campanita, a lo cual un señor salió de por ahí.

El señorito: Hola señorita Avery, deseaba su visita con ansias, mi nombre es Ollivander, señor Ollivander

Tú: mucho gusto, espere, ¿cómo sabe mi nombre?

Señor Ollivander: Eso no importa, lo que importa es que usted viene en busca de su varita, lo cual creo que esta es perfecta para usted *toma una varita y me la da* tome, agítela.

En cuanto la agité calló sobre mi mucha agua, creo que esa no es mi varita, Ollivander fue a buscar otra, me la dió y volví a agitar la varita, en un momento ya estaba seca y todo en tu lugar, está si que es mi varita.

Tú: muchas gracias!

Ollivander: Un placer, y una cosa más, tenga mucho cuidado *giña un ojo"

En eso salgo de la tienda y encuentro a Lupin, a lo que me doy cuenta que trae una caja, me la da y me dice que es un regalo por haber entrado a Hogwarts, le agradecí y lo abracé, pero me dijo que lo abriera cuando llegara al colegio. Después de comprar todo, hasta mi mascota la cual es una lechuza, nos dirigimos directo a casa ya que al día siguiente tendré que tomar un tren para ir a Hogwarts.