Dime "Te amo" - [Namjin]

Capítulo 7 - Cita de Alfas

—¡Buenas tardes!— Namjoon entró imponente y listo para dar órdenes en aquella farmacia cercana al parque.

—Buenas tardes.— Saludo una enfermera con bonitas orejas de mapache. Unos anteojos de pasta gruesa y negra rodeaban sus ojos negros y brillantes, que ahora parecían observar con nerviosismo a Namjoon. —¿En qué le puedo ayudar?

—¿Podrían revisarlo?— Señaló a Seokjin a sus espaldas, quién mantenía sus regordetes labios en una fina línea, evidentemente molesto por toda la situación, pues a su parecer era una exageración.

—¡Un tigre!— La señorita apretó con fuerza el borde de la vitrina, sus largas uñas negras y decoradas tintineando en el vidrio.—¿Usted le hizo eso?

—¡No!—Exclamaron ambos, sus gruñidos bajos haciendo temblar los vidrios del lugar.

—P-Por supuesto.— La mapache se giró. —¡Hey! ¡Misuk! ¡Te llegó un paciente!—Gritó alterada, como si no creyera en sus palabras y pensará que ambos, al ser enemigos, se habrían lastimado.

Una enfermera se acercó desde el pasillo, un gorrito en su cabello rubio atado en una alta cola.
—¿Qué sucede? ¿Porqué gritas tanto?— Entonces se detuvo, sus ojos brillando al mirar a los presentes.

—¿Qué te sucedió?— La enfermera empujó la vitrina de la farmacia para poder acercarse rápidamente.

Namjoon se alegró al principio de que revisaran a su tigresito, por lo que se acercó preocupado.
—Se cayó de un...—Detuvo abruptamente sus palabras al ver con atención, la larga cola esponjosa de la enfermera. Todo fué como si él tiempo se hubiera detenido mientras su león y él mismo, reconocían la situación frente a ellos.

Una cola de rayas negras y naranjas. La señorita retiró "casualmente" su gorro y entre sus rubios cabellos, fueron evidentes dos orejas en punta de color naranja y negro.

Una Omega tigre

Namjoon se había encontrado en muchas situaciones en las que había tenido que pelear por un Omega. En su manada y en su raza, el león alfa más fuerte se quedaba con él o la omega. Por supuesto, Namjoon era un león fuerte, imponente e inteligente que al final, siempre salía victorioso durante sus celos.

Pero ahora, con una Omega justo frente a sus ojos, sonriéndole sonrojada a Seokjin quién la observaba con curiosidad, se sintió por primera vez como él más débil. ¿Cómo podía un alfa competir con una Omega por la atención de un alfa?

—No se preocupe, yo misma puedo curar sus heridas.
— Sonrió y señaló el pasillo.
—Acompañeme.

—No.— Namjoon se acercó, su pecho moviéndose ansioso por su respiración acelerada. Su león gruñó molesto, caminando de lado a lado, analizando a su oponente, confundido por como debía actuar ante el apretón en su estómago.

No era una sensación agradable ver a su tigresito cerca de alguien que, parecía tenerlo todo para complacerlo.

—¡Seguramente usted le causó estás heridas!— La tigresa le gruñó, sus ojos brillando de molestia. —Vayase.

Namjoon no sabía cómo actuar, si fuera un alfa le habría gruñido y a esta Omega podía fácilmente reducirla, pero no sé sentía correcto al tener a Seokjin presente. Él obviamente la defendería al ser de su misma raza, más si Namjoon era un alfa.

Entonces, odiando un poco lo que estaba por hacer, decidió que no le importaba perderse a si mismo con tal de mantener a Seokjin enamorado de él.

—¡Jinnie!— Namjoon lo abrazó con fuerza, inflando sus mejillas al formar un puchero. —¡Dile que deje de coquetearte!

Seokjin parpadeó unos segundos, rodeando confundido la cintura de Namjoon. —¿Qué?