—Estoy muy feliz de que hayas decidido llamarme, Kellin. Ha pasado mucho tiempo —dijo mi madre mientras estaba sentada frente de mí en el Café Rocket. Había estado aquí por unos cinco segundos y ya se sentía incómodo.
—Sí, bueno, supongo que simplemente he estado ocupado y cosas así. ¿Cómo has estado? —pregunté, siendo más amable de lo normal.
—Bien, bien. Todo ha estado igual que siempre, en serio. Rob está bien también y tu hermana está en su último año en la universidad. Te extraña —dijo.
Tal vez ella no tendría que extrañarme si no me hubieras abandonado.
—También la extraño —dije sencillamente. Suspiró, mirándome pensativamente.
—¿Por qué no has llamado? —suspiró—. Digo, sé que estabas enojado conmigo, pero ha pasado tanto tiempo. ¿Qué has estado haciendo?
—Uh... Es sólo que he estado ocupado. Me fui a vivir con Oliver y sólo he estado trabajando, y sí. Estaba un poco frenético —dije.
La conversación se estaba poniendo difícil. Ahora que estábamos hablando del pasado, recordé cómo ella fue la causa de todo lo que arruinó mi vida. Si no hubiera sido por ella, todavía estaría con Vic. No hubiera recurrido a estar en una relación con un malparido abusivo. No estaría sufriendo económicamente. Me abandonó. Entre más la miraba, más me molestaba.
—Claro, Oliver... ¿Y él cómo está? —preguntó, pero no le agradaba Oliver. Su interés no era real.
—Terminamos —le dije.
—Oh, lamento escucharlo —dijo con una amabilidad bien falsa. Todavía manteniendo la calma, así que me mordí la lengua.
—Sí, es mejor así, en serio —dije.
—Cierto, así que si ya no están juntos, ¿dónde te estas quedando? —preguntó con curiosidad.
—Con un amigo, pero ya estoy empezando a abusar mucho de su hospitalidad —dije.
Todo se iría a la mierda si le digo que me estoy quedando con Vic. Aun así, a pesar de no haberle dicho la verdad, su expresión igual cambió a una molesta. Puso los ojos en blanco y suspiró.
—Ya veo, ¿entonces me llamaste porque necesitas dónde quedarte? —acusó.
—No, no. Te llamé para arreglar nuestra relación... pero, pero sí... Sí necesito un lugar para quedarme, supongo —dije.
Se levantó y bufó. No creía lo que yo estaba diciendo. Apenas si yo creía lo que diciendo. Me miró de forma amenazadora.
—¿Crees que puedes pasar todo este tiempo sin hablarme, sólo para entrar otra vez en mi vida y la de Rob porque somos tu último recurso? —me regañó.
—Para ser justo, es tu culpa que estoy en este desastre. Me abandonaste. Me quitaste todo. ¡Me lo debes! —susurré con fuerza. Sólo quería explotarme de la rabia, pero este era mi lugar de trabajo. No podía dejar que mis compañeros me vieran en mi peor faceta, incluso si no trabajaba hoy. Todavía quería actuar un poco profesional.
—No te debo nada. Te mandé a ese lugar para hacerte una mejor persona. Pero, claramente, nada ha cambiado —dijo. No podía creer esto.
—No tienes ni idea de lo que ha cambiado —dije en voz temblorosa. Mi furia estaba incrementando.
—Me voy a ir, Kellin. Vuélveme a llamar cuando quieras trabajar de verdad en nuestra relación y no porque quieres algo de mí —masculló.
Sin más qué agregar, se giró y se fue marchando del café. Sólo quería arrancarme el pelo. Después de que ella se rindiera en ser una buena madre, pensé que tal vez tendría algún tipo de remordimiento o culpa y quisiera arreglar las cosas. Sin embargo, este no era el caso. Supongo que seguiré con Vic y Leo. Suspiré con frustración y recogí mis cosas antes de irme; con dirección a casa.
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Hush, Hush (Kellic) [Español]
FanfictionEsta es la secuela de The Trouble On Your Lips, así que si no lo haz leído y quieres, entonces ignora esta descripción. Kellin y Vic han estado separados por casi dos años. De la nada se reúnen en condiciones menos que convenientes. Con los dos en r...