• Capítulo cuatro •

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- Oh, es verdad, pues...

Axel mordió su labio inferior y juntó sus manos, comenzando a pellizcarse a sí mismo.
De sus poros brotaba el suave aroma amargo que le inidicaba a Saúl lo preocupado y asustado que estaba.

- Llamaré a Michel para saber que ha sucedido, está bien? -Sugiró tranquilizador e inconscientemente tomando las finas manitas de Axel para que no se siguiera haciendo daño.

Pasado ese momento, sacó su teléfono celular e intentó llamar a su amigo, en busca de alguna respuesta que aliviara el estrés del bermejo.

Logró que la llamada fuera conectada y después de un largo rato, Michel contestó.

- ¿Que pasa, Slash?

- Emm... Hola... pues, te llamo para saber que ha sucedido con lo que te conté, ¿Los encontraste, Mich?

Comenzó a caminar de un lado al otro y por toda la habitación, mientas que Axel rezaba para sí mismo.

- Eh, no. Aún no encontramos a absolutamente nadie. Intentamos buscar con el medidor de temperatura. Si encontramos resultados y hay gente viva bajo esos jodidos escombros, pero será difícil llegar hasta ellos. Hermano, no te preocupes, sacaremos de ahí a tu familia así mi vida se vaya en eso...

- ¿Izzy sabe que le hablas así de romántico a todos? -Se burló en un tono coqueto y ambos rieron.

- Cállate. Por cierto, ¿Has hablado con el?

- Mm, sí. Hoy vino a mi casa para atender a...a mi primo.

- ¿Y que te dijo?, ¿Preguntó por mí? -En su voz era clara la ilusión y un poco de desesperación por tener alguna respuesta de su novio.

- No hermano, ni siquiera tocó el tema. ¿Pues que hiciste para que esté tan enojado? -Fingió no saber absolutamente nada.

- Ay, no te hagas pendejo. Estoy seguro que los chismosos de Steven y Duff ya te fueron a contar, no es así?

- Mmm, sip. Pero quería escucharlo de tí... -Rió a la vez que pasaba una mano por sus rizos.

En ese momento a Axel se le olvidó el tema principal; sus papás.
Ahora no dejaba de pensar en la envidia que tenía al escuchar a Saúl hablarle tan tierno a aquel chico, incluso parecía que estaba enamorado de el.
No entendía porqué de sus celos con esa conversación, pero se empezaba molestar un poco más cuando a Saúl se le escapaban unas sonrisas lindas e incluso podía jurar que notó un sonrrojo en sus mejillas.

Y sabía que Slash y Michel lo estaban ayudando como nadie más lo había echo en años, quizá en toda su vida.
Pero se sintió triste al escuchar como el moreno le hablaba a alguien más con el mismo tono que usaba con el.

Y por alguna razón sintió muchísimas ganas de llorar. Las lágrimas ya estaban colándose por sus ojos y el incómodo nudo en su garganta se estaba haciendo presente.

Y lo natural fué que su fuerte emoción llegara hasta Saúl aunque este no lo estuviera viendo.

El alfa notó que algo no estaba bien con Axel y volteó un poco para descubrir que era. El pelirrojo intentó actuar indiferente y giró su cabeza mientras que de manera discreta secaba sus lágrimas.

- Eh, vale. Entonces dices que no han sacado a nadie, verdad? -Cuestionó por última vez e interrumpiendo el tema de conversación que tenían, sin quitarle la mirada a Axel.

- Si, y ya sabes que cualquier cosa que suceda te voy a avisar rápido, si?

- Está bien. Muchas gracias, Mich. Nos vemos luego. -Contestó apresurado y finalmente colgó la llamada.

 ❝19 / 10❞ ; ❲𝐒𝐥𝐚𝐱𝐥❳ ִֶָDonde viven las historias. Descúbrelo ahora