❝19 / 10❞ ; ❲𝐒𝐥𝐚𝐱𝐥❳ ִֶָ

• Capítulo doce •

Duff prácticamente cargó a Axel e Izzy, alejándose del nuevo derrumbe lo más rápido posible para que ninguno de los bloques que caían los lastimara; los resguardó detrás del camión de bomberos para que resultaran lo menos posible lastimados.

Después de eso, los oídos del pelirrojo se aturdieron, no podía percibir nada más que los latidos de su agitado corazón.

El mismo sentía cómo la sangre de su cuerpo descendía hasta volverlo absolutamente pálido, cómo si estuviera muerto, y cómo a su vez, se llenaba de un gélido sudor.

Había una incomodidad en su estómago, sentía un absoluto vacío que lo ahogaba intensamente.

Pero nada le cayó tan de peso más que la realidad.

- A-axel. -Llamó Izzy mientras comenzaba a toser por la tierra y polvo que ahora llenaba el ambiente.

- Slash...-Susurró anonadado y con la mirada perdida en un punto del pavimento.

- Axel, escúchame...-Intentó intervenir, pero para eso fué demasiado tarde.

El omega se levantó dolorosamente ya que las piernas le temblaban, estaban casi adormecidas por completo, luego corrió hacia el derrumbe.

- ¡Slash! -Comenzó a gritar mientras sentía una línea tibia en sus mejillas; eran las lágrimas que descendían rápidamente.

- ¡Axel, no! -Lo detuvo Izzy al correr tras de él, tomando su brazo y jalando brusco de el.

- ¡Por favor, Izzy. Suéltame! -Pidió, casi golpeando al pelinegro.

- No...Ax...-Sus ojos también comenzaron a brotar gotas de agua salada.

Estuvieron unos segundos forsejeando hasta que el débil cuerpo de Axel cedió. Ambos se dejaron caer de rodillas mientras el beta lo abrazaba.

Los sollozos del pelirrojo se hicieron tan fuertes que desgarraban su garganta. Estaba casi gritando por lo triste que estaba.
Un amargo olor comenzó a brotar de sus poros, un olor que indicaba lo mal que estaba, lo profundamente destrozado.

Su aroma podía llegar a quizás más de 5 metros de distancia, por lo tanto no pasó desapercibido para los demás.

Ahora todos sabían que Axel era pareja de Slash, y sus corazones se rompieron y comparecieron tanto por el menor.

Tímidamente se intentaron acercar a él, demostrarle que lamentaban totalmente lo ocurrido.

- Saúl nos hizo prometer que si encontraba a la persona indicada y él llegaba a faltar algún día, debíamos cuidarla. S-se lo juramos, y te debemos cuidar Axel. No puedo dejarte ir allá... -Contó Izzy con las palabras enredadas en su lengua por lo mucho que lloraba.

- Slash...Slash, le pedí que no entrara...-Su voz se hacía hueca sólo porque tenía el rostro hundido en el hombro de Izzy.

∆×∆×∆×∆

Paralelo a eso, los demás que estaban cerca a la entrada de los escombros aún seguían aturdidos por el estruendo.

Pero en cuánto volvieron en sí, el terror no se hizo esperar.

- ¡No, Saúl! -Gritó Michel al darse cuenta de lo que pasó. Roger y Olivia estaban fuera, pero su amigo no. Él faltaba.

- ¡Michel! -Sollozó Duff al llegar con ellos.

- ¡No, mierda! -Ahora el castaño también se había entregado al llanto. Pero esque no lo pudo evitar en lo absoluto. - ¡Roger, llévenla hasta la ambulancia!

El omega asintió con sus ojos cristalinos.
Paramédicos no vacilaron en acercarse con la camilla.

De inmediato le colocaron a Olvia un respirador, ya que se había desmayado por lo sucedido.
Además del cambio brusco de temperatura; dentro de los escombros era un clima helado, y el exterior era considerablemente caluroso.
Más aparte el echo de ver sus piernas destrozadas.