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>JaeBeom.


—Mire, sé que tiene muchos clientes que atender, pero yo tengo a un compañero embarazado que se pone en estado salvaje si me demoro mucho en llevar sus antojos, le dije que volvería en quince minutos a casa y ya llevo fuera casi trece —la chica de la caja registradora en la cafetería favorita de JinYoung me miraba con miedo.

—Lo-lo lamento ¿Me puede decir cuál fue su orden? —suspiré fastidiado.

—Pedí ocho cupcakes de chocolate, una leche rosa tamaño extragrande, una rebanada de pastel de fresa y dos rebanadas de pai de mora azul —repetí a punto de perder la paciencia.

—Oh, de hecho estaba por llamarlo —me dio mi orden y yo pagué casi aventando el dinero, ni siquiera me molesté en pedir el cambio, sabía que entre más tardara, peor sería el berrinche.

JinYoung tenía 5 meses de embarazo, eso significaba que comenzaba a ser muy notorio que estaba en cinta, mucho más visible si tomamos en cuenta de que tuvimos la increíble suerte de engendrar trillizos. Las burlas estuvieron a la orden del día en cuanto lo anunciamos, la gran mayoría acerca de mi «puntería» y la de Jackson.

El humor de mi omega era bastante delicado y tenía mucha hambre la mayor parte del tiempo. Todo eso sería manejable si fuera el mismo Young-ie de siempre, pero no era así.

Si me tardaba más de lo que le había dicho que iba a tardar en volver a casa, entonces se ponía en estado salvaje y hacía un berrinche monumental que era casi imposible de controlar. Decía algo que no debí haber dicho, berrinche. Que si el señor calvo del estado del tiempo de equivocó, berrinche. Que si no sabe si pedir fideos o carne, berrinche.

Jackson también sufría su parte, especialmente porque el lado salvaje de JinYoung estaba empeñado en embarazarlo, a pesar de que ya le hayamos intentado explicar que los hombres beta no se pueden embarazar. Al parecer mi lado salvaje le dijo que debía intentarlo hasta conseguirlo y yo quería traer a ese lado salvaje para que se hiciera cargo de su omega berrinchudo y empecinado en hacer lo imposible.

Finalmente ya estaba en mi último año y debía dividir mi día a día entre cuidar de JinYoung, estudiar y hacer las prácticas laborales.

Mi compañero había decidido tomarse un descanso y no entrar hasta el siguiente año, cuando los bebés hayan nacido y podamos conseguir a una o dos nanas para que cuidaran de ellos mientras estábamos trabajando, en prácticas o en la escuela.

Y nuestro novio seguía sufriendo en el hospital por las guardias y consultas, al menos parecía estarle yendo bien en su residencia, aunque las llamadas para maldecir a Kunpimook eran bastante frecuentes.

También habíamos decidido vivir juntos y todos aportamos para pagar el enganche de la casa en un tranquilo barrio, estaba bastante lejos de la escuela, pero los cachorros necesitaban un lugar propio para crecer y desarrollar el sentido de pertenencia.

Mamá se puso muy contenta al escuchar la noticia de que sería abuela, pero mi papá dijo que habíamos sido irresponsables.

Perdón, papá, por no ser capaz de controlar un lado salvaje que no sabía que existía.

Por su lado, la familia de Jackson se sintió muy confundida, no sólo no habíamos ido a hablar con ellos acerca del enlace triple, sino que les salíamos con la noticia de que Jackson sería padre de unos niños que no engendró. Mi pobre suegra terminó en el hospital luego de que se le subiera la presión.

—Estoy en casa —abrí la puerta con la respiración agitada —. ¿JinYoung? ¿Estás bien?

El omega miraba con atención un pedazo de papel, ni siquiera había notado mi presencia.

Más Que Un Tú y Yo || [Omegaverse/Got7]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora