Nuestros Sueños

CAPITULO 13

—Candy, Patty, quiero hablar con ustedes —su voz queda me dio miedo, en la habitación no dejaba de dar vueltas, estrujando sus manos y pasándolas por su cara.

—¿Sucede algo Frida? —preguntó Patty— te ves muy afligida.

Frida detuvo sus pasos, volvió a pasar su mano por su cara y alzó la mirada al techo.

—Sí, Patty. Quiero contarles lo que me pasa, pero por favor, no quiero que me juzguen —se le corrieron las lágrimas al pronunciar esas palabras.

—Frida, qué es lo que te pasa, me estás asustando —me acerqué a ella y la abracé, preguntándole cuál era el motivo de su estado—. ¿Qué tienes? Sea lo que sea, no llores, lo resolveremos entre las tres. Sabes que puedes confiar en nosotras y que no te juzgaremos, somos tus hermanas.

—Es que no sé cómo decirlo —un llanto lastimero brotó de su garganta— Candy, Patty, yo... estoy embarazada —musitó, creía que no había escuchado bien y pregunte.

—¿Qué estás qué?

—Embarazada, estoy embarazada —se sentó en la cama y dejó salir sus lágrimas.

Patty y yo nos miramos perplejas, por lo general nosotras éramos las que siempre hacíamos las cosas sin sentido en la casa, y Frida era la hija perfecta, de la cual mi padre estaba orgulloso. Ella no tenía permitido cometer errores.

—¿Y quién es el padre? —me aventuré a preguntar, temiendo la respuesta, no quería que mis sospechas fueran ciertas.

—Dereck —murmuró, apretando sus párpados con fuerza.

—¡Por Dios, Frida! Papá te va a matar. Cómo... cómo, se te ocurrió involucrarte con Dereck. Esto no puede estar pasando ¿tienes idea del problema en el que estás metida? mi papá se pondrá furioso. Si cuando Terry fue a pedir la mano de Candy mira todo lo que pasó, no quiero ni imaginar su reacción cuando sepa que estás embarazada y de un ¡Grandchester!

Patty puso las manos en jarras, mientras reprendía a Frida, luego colocó su mano derecha en la frente.

—¡Ya lo sé Patty! ¡crees que no sé qué mi papá va a querer matar a Dereck por esto! pero no fue algo que planeáramos, simplemente sucedió. Nos enamoramos, salimos un par de veces como amigos, y después comenzamos a sentirnos atraídos. Decidimos comenzar a salir sin compromisos. No me vean así, somos personas adultas, y estas relaciones son muy comunes ahora, pero cuando nos dimos cuenta ya estábamos enamorados, nos cuidamos para no embarazarme y un día simplemente mi periodo no llegó, algo salió mal con nuestro método para cuidarnos y ahora tengo dos meses de embarazo.

—¡Dos meses! —gritó Patty.

Me quedé escuchando sin atreverme a decir nada, no era la indicada para aconsejar a mi hermana, sí yo fui la primera en vivir la horrenda escena que hizo mi padre y nos orilló a tomar la decisión de huir. Ahora el panorama que le esperaba a Frida es peor, honestamente no sé cómo reaccionara mi papá, pero es algo que no podrán ocultar por mucho tiempo.

—Debes decírselo a mamá, ella sabrá que hacer —sugirió Patty y yo la apoyé.

Mi madre era la indicada para preparar a mi padre con una noticia como esta, ella podría domar la furia de mi padre.

—¡No! me da vergüenza que sepa cómo fue concebido este bebé. No sé cómo lo tomé ¿y qué tal si ella se molesta conmigo? Qué tal si es la primera en reprocharme, no, no podría soportarlo.

—Por favor, Frida, no puedes estar hablando en serio ¿a qué le tienes miedo? Tienes 27 años y un excelente trabajo. Dereck no está en la misma situación de Terry, él ya tiene una carrera hecha y va en ascenso, ambos son independientes, no le veo ningún problema —le dije recordando todas las limitaciones que teníamos nosotros cuando nos fugamos.