Buenas, interrupción antes de empezar el capítulo, y es sobre que estoy emocionada por este proyecto! No tenga expectativas de nadie, pues aquí no hay terapia, si no quieren leer algo "complejo" recomiendo "Sienteme" lo pueden encontrar en mi perfil. (Ah si) Esto es un borrador, por lo que necesita edición y varias cosas.
¡Espero lo disfruten!
Evan.
Odiaba el olor a tabaco en el salón de clases, no entendía la razón, los profesores y los mismos estudiantes tenían prohibido fumar en las instalaciones, pero no me parecía raro, allí siempre ha existido ese peculiar olor.
Era la hora de el almuerzo, todos salían mientras yo me quedaba en el salón con mal olor, a pesar de aquel defecto que tenía la habitación, era muy tranquilo y pocos estudiantes pasaban allí, era perfecto para leer y comer.
Tomé la bolsa que me dio mi mamá en la mañana con un emparedado de jamón, y para tomar algo de agua, lo acabé más rápido de lo que yo pensaba pero no me quejé.
Busque un libro para leer y como soy un adicto a siempre leer lo mismo, lo hice: leí por vigésima vez Harry Potter y El Prisionero de Azkaban, tal vez este un poco obsesionado pero vale la pena.
Abro el libro y empiezo a leer, en mi cabeza se reproducen las imágenes muy claras de lo que estaba sucediendo: Harry vio por primera vez a Cho en el partido entre Ravenclaw y Gryffindor.
Siempre me gustaba leer esa parte, me da cierta emoción, a pesar de que sabía que Harry terminaba con Ginny.
Sonreí, sentí un movimiento en el salón por lo que giré para ver que sucedía.
Era una chica, Madeline específicamente, la conocía, estudia conmigo desde el año pasado, eso sin mencionar su increíble físico, parecía mayor que todas las chicas, sin contar lo adorable que era, lo lindo que lucía su cabello corto y dorado, sus verdes ojos, era hermosa.
Y tenía a toda la escuela babeando por ella, y con todo el sentido.
–Disculpa, ¿Te molesta?– ella iba a tomar asiento en un lugar un poco alejado de mí, quedé mudo ante su pregunta, no podía responder viendo a esa chica tan preciosa.
–No, toma asiento.– salí de mi pequeño trance existencial y de el por qué una chica tan preciosa no se enamora de mí.
–¿Qué lees?– cuestionó viendo el libro desde su asiento.
–Harry Potter y el prisionero de Azkaban.– contesté más rápido de lo que quería pero bueno, hablar con chicas nunca será una de mis cualidades.
–Nunca me he leído los libros, pero si me vi las películas, ¿son iguales?– cuestionó esta vez con un poco más de confianza, eso me inspiró por lo que tomé un respiro y me relaje.
–No son iguales, pero las películas tienen muy buenas adaptaciones.– comenté y ella me sonrío.
¿Me enamoré o solo es mi instinto de 14 años?
–Tratare de leerlos– ella se mantuvo sonriendo.
Esta vez no fue el reflejo, sino el sonido que causaron en la puerta de el salón, eran dos chicas, ambas con un tono de piel claro, con cabello en tonos oscuros como castaño y negro, una chica tenía ojos azules y la otra los tenía color marrón, al igual que yo.
Ambas eran lindas, las conocía porque compartía dos clases con las dos chicas, ellas causaron mucho ruido al entrar.
–Hola niña rica.– habló la chica con ojos color azul refiriéndose a Madeline.
Fruncí el ceño al no entender porque la llamaba así, Madeline se quedó en silencio, y la misma chica se acercó a Madeline, tomó la bolsa en la que ella traía su comida para sacarlo y empezar a hablar.
–¿Quién hizo esto, tu sirvienta?– tomó el pan relleno y le dio un mordisco, segundos después lo escupió. –Contrata a otra, porque esto sabe asqueroso.
Estaba incrédulo, ¿Por qué la estaba acosando? Me levanté, las tres chicas se voltearon a verme, tomé un respiro, caminé hasta estar en frente de el escritorio de Madeline.
–¿Cuál es tu nombre?– cuestioné hacia la chica de ojos azules, ella elevó sus cejas en forma de sorpresa.
–Freya Deux.– articuló esta vez con un tono de voz más sumiso.
–Freya, ¿Podrías dejar a Madeline comer? Tú también deberías comer o no sé, puedes buscar otro lugar junto con tu amiga, ¿Quieres?– ella quedó algo confundida con mis palabras.
–Por favor.– pedí y ella solo rodó los ojos, y se fue, su amiga confundida con su comportamiento se fue.
Ambas salen de el salón de clases, me giro hacia Madeline, la cual tenía en sus manos la bolsa, de allí sacó el pan, lo mordió y se quedó saboreando, mientras yo solo podía observar cada gesto que hacía, cada pequeño movimiento, me devolví a mi escritorio y ella estaba sumida en saborear su pan.
–Lo hizo mi mamá.– aclaró, yo bufé.
–No te debería preocupar lo que te dijo, ella probablemente su mamá no le hace nada y por eso se descarga contigo.– defendí y ella me brindó una media sonrisa.
–¿Estás ocupado después de clases?– cuestionó dudosa, yo me acerque un poco a ella.
–No, ¿Por qué?– cuestioné hacia ella.
–Para salir un rato.– contestó y le sonreí.
–Claro.– ella mordió su labio con cierta inseguridad, luego recordé que no le había dicho mi nombre.
–Me llamo Evan.
Ella asintió, terminó su pan, mientras yo leía, logré terminar un capítulo en el tiempo que quedaba de el almuerzo, ella antes de irse de el salón habló.
–Por cierto, gracias por defenderme de Freya y Jane.– le sonreí.
–Tranquila, no es un problema.– ella me dio una mirada con ternura.
–Nos vemos en la salida.– terminó y así como entró, se fue.
Es hermosa.
PUBLICADO: 20/01/2021
23:30 PM HORARIO DE VENEZUELA.
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Madeline
Mystery / ThrillerEncontrar a tu mejor amiga muerta jamás será algo fácil de vivir. Muchísimo menos, sabiendo que la persona que la asesinó, la conocías.