Esta historia tenía pensada hacerla en facebook, pero por falta de tiempo de decidido publicarla aquí :v De todos modos ojalá que les guste nwn
Xóchitl y Teodora son dos hermanas que tienen una vida normal en un pueblo llamado Puebla de los Ángeles...
Los cuatro fantasmas, (bueno, excepto Don Andrés xD) estaban dispuestos a darle un espacio a la invitada en su palacio, a escondidas de su amo, claro
La llevaron a un cuarto pequeño, donde un gran sillón se encontraba en frente de una chimenea encendida, un lugar cómodo después de haber pasado una noche fría en el oscuro bosque...
Nando: *reverencia* Siéntase cómoda, señorita. Tome asiento en el sillón, por favor 😌
Teodora: *medio sonrojada, va y se sienta en el sillón* ¡Wow! Qué cortés 🤗
Don Andrés: ¡¿En serio?! ¡¿Se os ha ocurrido sentar a la señorita en el sillón del príncipe?! ¡¿OS HABÉIS VUELTO LOCOS?! 😠
Evaristo: Calme sus chakras, Don Andrés. El príncipe no se ha a enterar 😌
Alebrije: Además, no estamos haciendo nada malo. Sólo estamos ayudando a una joven que en verdad lo necesita 🙂
Don Andrés: No creo que el príncipe lo vea del mismo modo 😕
Nando: Debes estar muy hambrienta después de una noche agitada
Teodora: Ash, obvio no. O sea, estoy a dieta 🤨. Puedo pasar bastante tiempo sin comer 😌 *su estómago empieza a gruñir en ese momento* 😳
Alebrije: Yo creo que sí tienes hambre 🙂👉
Teodora: Ash 😑
Nando: No te apures. Nosotros nos encargamos 😌👌 *silba con fuerza* ¡FINADO! ¡MORIBUNDA! ¡TRAIGAN ALGO DE COMIDA PARA NUESTRA INVITADA! 😁
Don Andrés: ¡Oh Dios! ¡Esto saldrá de control! 😣
En eso, de la nada aparecieron dos calaveritas de azúcar con algo de comida en sus manos
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Pronto le ofrecieron la comida a Teodora, quién miraba con ternura a las dos pequeñas calaveritas...
Teodora: Awwwwww.... Thank you 😍 Estás dos calaveritas son muy cutes 🤗✨💖💕
Finado/Moribunda: 😊✨
Evaristo: Y ¿qué esperas? La comida está servida. Disfrútela como toda una reina 👌😌
Teodora: Awww... Muchas gracias 😊
Don Andrés: *facepalm* Estamos perdidos 😣
...
Mientas tanto, a unos metros del palacio...
Un jinete montaba su caballo en dirección al castillo. Al parecer era un Charro, pues la vestimenta negra lo daba a entender. Sin embargo, su rostro no se podía ver, ya que el mismo sombrero lo cubría
Cabalgó hasta llegar a la entrada principal del palacio. Al llegar, bajó del caballo y entró al lugar. No sabía la sorpresa que se iba a dar al entrar
...
Mientras tanto, adentro del palacio...
Teodora continuaba comiendo lo que las calaveritas le había ofrecido. Los fantasmas la observaban, en silencio. Así era, hasta que Alebrije habló...
Alebrije: Y... díganos, señorita ¿de dónde viene usted? 🙂
Teodora: Pues... Yo vivo en Puebla de los Ángeles con my sister Xóchitl. Yo había salido a los huertos de nuestro papá para conseguir de las cosechas. Y bueno, o sea, ya no pude regresar por lo de los lobos 😕
Nando: Bueno, no debería salir sola al bosque. Es muy peligroso. Hay bastantes lobos hambrientos en ésta zona 🤔
Los fantasmas estaban muy distraídos hablando con la pelirroja, que no se percataron de que alguien estaba abriendo la puerta hacia esa habitación
Las únicas en darse cuenta fueron las calaveritas, quienes desesperadas comenzaron a hacer ruidos y movimientos con sus manos, tratando de llamar la atención. Pero no la conseguían...
Finado/Moribunda: ¡Mhh! ¡Mmmmhh! 😨 *Haciendo movimientos con sus manos*
Evaristo: Chales, guarden silencio, carnales ¿No ven que estamos tratando de hablar con nuestra amiga? 😑
Finado/Moribunda: *facepalm*
Alebrije: Tienes suerte de haber llegado a nuestro castillo. Sino, quién sabe qué te hubiera ocurrido con esos lobos 😅
Teodora: Pues sí. Vaya que esos lobos son cero cool 😑👌
Las calaveritas continuaban tratando de advertir, pero ya era demasiado tarde. Don Andrés fue el único que les puso atención para luego ver que alguien más había entrado al lugar...
Don Andrés: *mira a la persona que llegó* Madre mía. Ahora sí estamos fritos 😲
Todos: *voltean al mismo lado*.......oh no 😳
Leo Negro: ¿Interrumpo algo? 😈
El mismo jinete que había llegado al palacio, había entrado con ellos. Y para mala suerte, era nada menos que el príncipe...
Evaristo: ¡Zaz! Qué mala vibra ☹️
Teodora: ¿Y ese quién es? 🤨
Nando: Es...mi hermano... el príncipe ☹️
Teodora: 😳
Finado/Moribunda: *corren y se esconden atrás del sofá, asustados* 😨😨
Leo Negro: *señala a Teodora* ¿Ella quién es?👉 ¿Qué hace en mi castillo? ¿Quién la dejó entrar? 👿
Alebrije: *nervioso* Este... solo es una niña queeee estaba perdida en el bosque 😁
Don Andrés: *molesto* Sí. Una niña que yo les dije que nos traería problemas 😠
Teodora: *nerviosa igual, mirando varias veces a Leo, de pies a cabeza* 😨
Leo Negros: *la ve* ¡¿Qué estás mirando?! 👿
Teodora: *asustada* ¿Y-yo? O sea, nada nada 😲 Si....si gustas...yo...yo mejor me voy *empieza a retirarse* Ya no voy a molestarlo si eso pasa 😁
Leo Negro: *la detiene* No, señorita. Usted no va a ningún lado 😠
Teodora: 😟
Nando: Leo, hermanito, por favor, no le hagas nada 😟 No es su culpa. Nosotros la dejamos entrar 😣
Leo Negro: Nadie puede entrar al palacio sin MI autorización 👿 y quién lo hace... pagará las consecuencias en el calabozo
Teodora: ¡No! ¡Porfis! O sea ¡Odio los calabozos!😨 ¡HAY MUCHAS CUCARACHAS! ¡Y ARAÑAS! 😫
Leo Negro: A mí no me importa si te gustan, o no, los calabozos *empieza a estirarla* ¡Tú vendrás conmigo! 👿
Teodora: *luchando por zafarse* ¡No! ¡NO! ¡NO PORFIS! ¡NOOOO! 😫
Pero los gritos de Teodora no sirvieron de nada. Aún así, el joven charro la llevó al calabozo. Los fantasmas y las calaveritas, no hicieron más que observar, con tristeza, el momento, indispuestos a hacerle frente al príncipe Leonardo