Serendipia || MiriTama

15: Gamma

Sólo eso era, un gamma, la parte más baja de entre todas las jerarquías.
La mayoría de ellos siendo usados para prostitución, o incluso se han sabido de casos sobre trata de gammas en los bajos fondos. La ciudad no era para nada un sitio seguro para ellos.

Algunos obligados a casarse a temprana edad por su frágil naturaleza, por esa misma cuestión era normal encontrarlos dedicándose únicamente al hogar, sin una carrera terminada y sus sueños estancados sólo por haber nacido como tal.

Tamaki desde que descubrió su jerarquía temió mucho por su futuro, no quería ser el "trofeo" de un alfa, quería ser un héroe, quería vivir su vida sin tener que depender de alguien más, sin tener que ser alguien a quien proteger. Pero miles de inseguridades pasaban por su mente desde entonces, deteniendo cada paso que daba, haciéndole retroceder cada vez más en su camino.

Fue entonces que Mirio, su alfa, pareja, mejor amigo y destinado había aparecido en el momento justo para sacarlo de ese abismo oscuro al que estaba cayendo, iluminó su mundo de tal manera que comenzó a ver todas las posibilidades en su vida, no debía ser lo dictado, el podía elegir su propio destino.

Hasta la fecha esas inseguridades aún prevalecían, eran mucho menos que antes, pero aún lidiaba con ellas, tratando de hacerlas desaparecer.

También sabía de las personas que no estaban de acuerdo con sus logros, las cuales de no ser por que siempre estaba con el alfa, quien sabe cuántas cosas no le habrían hecho.

Pero es por ese mismo motivo que se veía venir el acoso por parte de otros grupos e incluso compañeros ahora que Togata no estaba junto a él.

Ahora en la actualidad se encontraba recibiendo una paliza por parte de un grupo de tres alfas en un lugar apartado, lo habían obligado a seguirlo con aquella molesta voz de mando, y para peor, cada que intentaba defenderse volvían a usar esa voz para someterlo, haciendo que quedara indefenso ante ellos.

Llegó un momento donde los golpes pararon, todo su cuerpo dolía, además de sentir el horrible sabor metálico de la sangre en su boca.

Pero aún a pesar de todo no les daría el lujo de verlo llorar o pedir por Mirio para que llegara a salvarlo, de ninguna manera.
No supo de donde, pero tomó valor para mirarlos con un profundo rencor, sabía de las razones para golpearlo de tal forma, pero en serio odiaba esas razones tan ridículas.

—Te aprovechas del más débil y dices querer ser un héroe —Gruñó el azabache, levantándose de forma lenta del suelo, quedando apenas de pie frente a ellos, su espalda contra la pared y aquel grupo bloqueando sus vías de escape —Eres injusto.

En años anteriores nunca se habría atrevido a enfrentarlos, se hubiese quedado callado dejándose golpear hasta el cansancio.
Pero no ahora, se había vuelto más fuerte y sabía que no debía dejarse pisotear por personas así.

Aquel chico rió con sorna, mirando al Amajiki de pies a cabeza.

Si, él era más fuerte que antes, no se dejaba afectar por estupideces y mucho menos por los golpes e intentos de intimidación.
Pero, si había algo que aún no lograba enfrentar, eran sus propias inseguridades

Y para su lamento eso era algo que casi toda la U.A. sabía.

—Eres un gamma contra tres alfas ¿Qué vas a hacer? ¿No deberías llamar a tu alfa para que te rescate? —El tono de burla no pasaba desapercibido, afianzó su agarre en la pared, sentía que si no lo hacía iba a caerse de bruces al suelo.

Sintió como uno de ellos adelantó el paso, sujetando su mentón para obligarle a levantar su mirada. Se vio tentado a apartar su mano de un manotazo, pero su cuerpo no respondía al estar aún bastante afectado por la voz.

— No sé por qué te admitieron al curso de héroes, los de tu clase no son más que unas zorras —Ese chico era de estudios generales, sabía por que la tomaba contra él, pero no tenía el derecho de decir toda esa mierda —Sólo sirven para darnos placer y como incubadoras, conoce tú lugar.

—¿Crees que eso me hiere? He escuchado eso toda mi vida, prueba de nuevo —Sonrió ladino, recibiendo poco después un golpe en la mejilla, se mordió la lengua para no demostrar dolor.

—Ese alfa que tienes seguro sólo te quiere para eso, una vez te reclame va a dejarte, ¿Crees que un alfa puro como Mirio Togata se fijaria de otra forma en ti? No me hagas reír.

Esas palabras si le calaron, a pesar de saber que su antiguo mejor amigo no era ese tipo de persona, ese miedo aún seguía en él, oculto incluso para su parte consciente pero ahí estaba.

—Mirio no es esa clase de persona. —Defendió de inmediato, su voz quebrada, sin hacer esfuerzo alguno por soltarse del agarre. —Callate.

—Aún si no lo fuera, ¿No crees que merece más? Tú sólo eres un juguete para la sociedad, el merece un lindo omega, no un estúpido gamma que no cumpla su rol.

"Callate"

Quiso hablar pero en su garganta se formó un nudo, cortando el paso a cualquiera palabra que quisiera salir de ella.

—En un futuro es posible que ni siquiera le des cachorros, ¿Te querrá aún así? ¿Querrá a un gamma que no puede darle familia?

"Cierra la maldita boca"

—No creo que quiera a una zorra que ni siquiera puede controlarse durante el celo. Aceptalo, no lo mereces —Terminó de hablar cerca de su oído, haciendo a Tamaki apretar la mandíbula —Sólo piensa en eso.

Tras decir esto último lo soltó, apartandose de inmediato para comenzar a caminar lejos de ahí con su grupo.
Una vez supo que estaban lejos se dejó caer, todo el cuerpo le dolía y por sobre todo ahora una inseguridad que hace años no tenía volvía a renacer en su mente.

"¿Soy suficiente para Mirio?"
"¿Siquiera soy suficiente para mi?"
"Quizá ni siquiera debí haber existido"
"El mundo no necesita a alguien como yo"

Ocultó el rostro entre sus rodillas, pequeñas lágrimas comenzando a descender por sus ojos, mientras sus pensamientos no hacían más que atormentarlo.
Por primera vez en mucho, volvía a cuestionarse si su existencia era realmente necesaria, volvía a cuestionarse sobre si merecía una pareja así.

Había prometido no volver a hacerlo, pero ahí estaba, siendo afectado por palabras de un idiota.

—Realmente soy un inútil... —Murmuró con la voz rota, tratando de calmarse para volver a los dormitorios.

Lo que menos quería, era encontrarse a alguien conocido por el camino en esa condición.

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Perdón por este inicio de arco, pero créanme que va a ser necesario para el crecimiento personal de Tamaki bb ;;
El niño necesita aprender a aceptarse como es por completo.

Estos siguientes capítulos van enfocados en eso, pero verán que va a ser necesario para que su relación con Mirio y con sus amistades sea aún más fuerte.

Gracias por leer, trataré de traer capítulos más seguidos después de este mini descanso de unos días.

Chaochao 💕