Animal Love (Buscando amor en un mundo animal)

Capítulo 41: Cacería

Una temible bestia anduvo suelta en la división Wild Wolf. Shira salió por la noche, en medio de una tormenta hacia una prisión de máxima seguridad, donde devora brutalmente a uno de sus prisioneros. Lila y yessica fueron a visitar a ale a su departamento, donde lila conoce a Iris, quien en ese momento le estaba dando de comer a ale. Una temible bestia anda suelta por la ciudad, esta ya ha atacado a varias personas, devorando a dos de ellas.

Son las ocho de la mañana. Ale está en su estado base, sentado en el sofá, viendo la televisión con Iris, durante eso, un mensaje de Perla llega a su tableta; él abre el mensaje: "Te vemos en el callejón", decía el mensaje, junto con una dirección que lo llevaba al callejón que estaba al lado de los dormitorios.

–Iris, tengo que ir a una parte –le dijo ale a iris, levantándose del sofá, antes de pasar a su modo asalto.

–está bien, ten cuidado al salir –le dijo Iris a ale.

–vengo en la tarde.

Ale sale del departamento, el pasillo estaba cubierto con algo de nieve; tras salir de los dormitorios, entra en el callejón que le indicaba la dirección en el mensaje. Alguien se acerca por detrás y, antes de que ale pudiera terminar de darse le vuelta, es abrazado por perla, quien lo levanta del suelo muy feliz, ella no estaba usando su uniforme, en cambio, usaba una ropa más decente.

–¡Maestro, cuanto tiempo sin verlo! –le exclamó perla alegre a ale, mientras lo abrazaba.

Irene, Cristina y alba vienen corriendo detrás de perla y se unen al abrazo, menos Irene, ella tres tampoco usaban sus uniformes.

–que alegría volver a verlo –le dijo Cristina feliz a ale.

–yo pienso lo mismo –comentó alba feliz.

–también me alegra verlas de nuevo... –dijo ale y, luego de eso, las tres lo besan, perla en la frente y Cristina y alba en las mejillas–. Entonces, ¿me llamaron solo para verme?

–lamentamos mucho si interrumpimos algo –se disculpó perla, pensando que ha interrumpido algo.

–estaba viendo la televisión, no se preocupen.

–ah bueno, entonces, ¿le gustaría pasear con nosotras?, ya sabe, para pasar el rato.

–está bien. Por cierto, ¿dónde está Clara?

Perla mira a las demás, quienes tampoco sabían nada sobre Clara.

–desde que hablé con ella, no he sabido nada más –respondió alba.

–de seguro se está tomando unas vacaciones –comentó cristina.

–en fin, vamos primero a comer algo –sugirió perla.

Un momento después, los cinco se encontraban caminando hacia el restaurante clandestino, cuando algo alerta a las cuatro conejas.

–¿qué pasa? –le preguntó ale a alba, al ver su cambió de estado, sin notar que las demás estaban igual.

–no pasa nada, solo que esta vez se me antoja pedir una tarta de duraznos –respondió alba sonriendo.

–ustedes pueden irse adelantando, nosotras iremos a hacer algo primero –les dijo perla a Alba y a ale.

–okay, las vemos allá –les dijo ale a las tres.

Alba y ale continúan caminando, mientras que Irene, perla y cristina se dan la vuelta y caminan en sentido opuesto.

Pasan el tiempo. Alba y ale han llegando a la puerta de entrada del restaurante clandestino, allí alba comienza a dar a clave para que los dejaran entrar; la puerta se abre y juntos entran en el restaurante, entre todos los clientes y conejas, estaban la top 18, la top 14 y la top 9. Ale y alba se se sientan en una de las mesas que estaban junto a la pared.