Capítulo 11

49 8 0
                                    

La noche avanzaba rápidamente y el frio comenzaba a invadirnos, aun así ese no seria el motivo por el que volveríamos a casa. Luego de varias horas Richard comenzó a hablar con mas confianza y dispuso su hombro para que posará mi cabeza sobre el, entonces procedí a acomodarme en su hombro.

¿Crees en el destino?  -Dijo Richard haciendo que pusiera toda mi atención sobre el.-

Personalmente no he tenido una experiencia que me haga afirmar que el destino existe, yo creo que cada persona construye su camino con sus acciones y nada mas. ¿Tú si crees en el destino?

— No, pienso que las personas somos el destino y como tu también pienso que cada persona lo construye. —

Bueno ¿Y ahora sobre que tema te gustaría hablar? -Dije aun con mi cabeza reposada en el hombro de Richard.-

— No se que tan prudente sea, pero me gustaría conocer un poco sobre tu vida sentimental.—

Realmente no hay mucho que decir, solo he tenido una relación y no creo haber estado enamorada. El amor es un tema sin fin, conlleva muchas cosas. -Dije soltando un leve suspiro.-

— ¿Pero te gustaría enamorarte alguna vez? —

Si llega la persona indicada, claro que me gustaría. -Dije observando las estrellas para luego mirar a Richard.-

De un momento a otro el ambiente se tenso, nos invadió un silencio ensordecedor y eso me llevo a pensar que algo de lo que dije pudo haber hecho sentir incomodo a Richard.

Tengo sueño, deberíamos de irnos. -Dije mientras miraba a Richard con la mirada cansada, igual que una niña pequeña.-

— Vamos. — Dijo sonriendo mientras tomaba mi mano para ayudarme a levantarme.

Bajamos del faro mirador y subimos nuevamente a su moto, de alguna manera me sentía confundida. Primero mi respuesta hizo que Richard cambiara y luego de la nada nuevamente estaba sonriéndome y siendo amable. Durante todo el camino pensé en su actitud y sus acciones, aunque probablemente estaba confundiendo todo.

— Hemos llegado. — Dijo Richard trayéndome a la realidad.

Entramos a la casa y me despedí, sin siquiera imaginármelo Richard dio la vuelta hacia mi deteniéndome para tomar delicadamente mi rostro y posar un tierno beso en mi cabeza sin decir nada. Aun me resultaba muy extraña esa acción de Richard, lo ha hecho dos noches seguidas, el no sabe demostrar amor a una persona sin embargo cada beso lo siento tan sincero.
Entre a mi habitación pensando en lo bonito que había sido mi día junto a Richard y me organice para dormir ya que al día siguiente tendría que volver a mis labores.




Gracias por leer, ¡Esperen el próximo capítulo muy pronto!


Enséñame A Amar | Richard Camacho ¡Terminada!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora