Amigo Imaginario.

16- Traición.

—Porqué  para ellos eres el mayor peligro que existe. — susurró  Alec.
...

— ¿ Y....y eso que tiene que ver?.— preguntó  más  bien  ofendido.— No les he hecho nada, ni siquiera se quienes son.... En todo caso, ¿ Porqué?.

— Porqué  tú  eres el hijo de un demonio y una humana.— dijo Diana como si eso tuviera mucho  sentido.  — Y por que....

— Basta.— calló Catarina. — ¿ Estas loca?, sabes que puedes terminar en el gard por esto, con solo que el sepa del mundo de las sombras.

— Catarina.— intervino  él. — Necesito saber todo, estoy confundido y quizá  ella me ayude.

Catarina no le dijo nada y fue a sentarse, Alec, sin que  el lo notará  mucho, tomo su mano y la apretó.

— Existe una profecía. — Inició  ella.—  Anuncia  la unión de los subterráneos....

— ¿Subterráneos?.

— Si, Magnus. — intervino  Alec.— Vampiros, hombres  lobo, hadas y brujos.

— O...okey....

— Como te decía, esa profecía predecía  la unión  de ellos, que  podrá  traer guerras en nuestros mundos, desde eso todos los niños brujos son enviados al mundo  mundano  y vigilados  por ciertos cazadores. Se suponía que tu no debían  saber de esto, pero Magnus, siendo yo tu madre no podía separarme de ti.... necesitaba verte y proteger te.

— ¿ Por eso me ayudaste en tantas cosas?— dijo comprendiendo. Luego pensó  en los detalles.— ¿ Porqué  querías llevarte a Alec?, ¿ pensabas  asesinarlo acaso?

— No.— dijo  seria.— Quiero que este lejos de ti, no confío en ningún  cazador y menos en él, estuvo desde niño contigo... ¿ No te parece que así  es más  fácil  ac....

— Disculpeme, señora.— se metió  Alec. — Pero está  equivocada, yo ni siquiera  sabía  que él  era un brujo, fue hasta hace poco que me enteré  y por eso volví, por que lo quiero y necesito verlo bien. Usted  no puede  culpar a todos los Cazadores  por lo que solo uno hizo.

Ella se hizo para adelante para darle una cachetada pero Magnus se movió. — ¡ Diana!, como dijo él, el no es culpable...¡ ¿ Sabes cuantas  veces me salvó?!. El estuvo en muchas  noches de tormenta.... yo estaba solo hasta que él  llegó. Y lo siento, eres.... mi mamá  pero  Alec  también  es importante  para mi y si el se va yo me voy con él.

Diana lo miró  enfurecida. — Te darás  cuenta  que ellos no son malos, cuando se enteren de ustedes van a separarlos... a no, esperen, eso ya pasó.

Magnus  se quedó callado por un momento. — Bien, necesito pensar las cosas, ¿ puedo irme ya?

— Yo dije que esto  no era secuestro .— susurró ella dolida.— Asi que puedes irte cuando gustes, pero por favor Magnus, no me olvides, yo te amo... eres mi niño.

— Lo pensaré. — se puso  de pie y llamó  a Catarina  y a Alec.

***

Diana mando a llamar a Elias  mientas ella se paseaba por su casa.

— ¿Me mando a llamar?— preguntó él al pasar por un portal.

— Si, gracias.  Elias, cambio  de opinión, desistiremos  de separar a Magnus  de Alec, ambos se necesitan, lo note en ambos.

— Pero mi señora....— dijo alterado. — Esto es necesario, conseguiremos tener lo a salvo.

— Es verdad, pero no acosta de lo que amamos, esto ya me pasó  a mi, no quiero que le pase a mi hijo.— dijo triste.  Lo miró. — No confío en ningún  cazador pero quizá Alec sea diferente.