Amigo Imaginario.

21- Elias.

Las puertas del instituto  estuvieron cerradas por casi tres días seguidos y nada del infiltrado, el complejo  fue revisado  dos veces al día  y nada. Era como si no estuviera ahí, pero Ingrid  sabía  que lo estaba, debido  a que más  información fue expuesta  ante los opositores.

Iba camiando rápido  para su oficina cuando se le ocurrió  algo. Se devolvió para donde estaban los otros.

— Una pregunta.— dijo.— ¿No es que aquí  tenemos cámaras de vigilancia?.

— ¿ Para....

— ¿Tenemos si o no?— insistió inquieta.

— Así  es señora.— contestó uno.

— ¿ Y porqué no se habían  acordado?— gritó. — No solo yo tengo que pensar en todo. — miró  a un chico.— Busca las grabaciones  desde hace tres días, algo tiene que aparecer. Concéntrese  en las entradas o posibles pasajes a la oficina central. Quiero  a muchos  trabajando  ahí.

Un grupo de Cazadores trabajaron en diferentes  computadores, buscando el momento exacto donde  un intruso  encapuchado  entrabaja por una ventana.

— Encontré  algo.— gritó  un chico.— Pero no logro ver su rostro, llevaba  una chamarra que lo cubría.

— Eso es lo de menos— contestó. — Sigan lo con la cámara, tenemos que encontrar lo ahora mismo.

El chico lo siguió  hasta que consiguió mirarlo entrar a la puerta oculta de una habitación  de limpieza.

— Bingo.— Apremio. Tomó  sus armas y se dirigió a la habitación vista en la cámara.

Camino rápido con muchos  Cazadores tras  de ella, iban sigilosos pero preparados para lo que fuera.

Abrió  la puerta despacio y se adentró callada, vio la puerta y la tiró  de una patada.

Una pequeña  habitación se escondía ahí, un hombre había sentado de espaldas.

— ¡ Tu!— Acusó  cuando vio  a Elias.— ¿ Que demonios pretendías  maldito brujo?.

Él  no dijo nada, solo atacó y atacó  hasta que se abrió  pasó, pero no pudo llegar tan lejos cuando lo tomaron de las manos y lo ataron, dejándolo sin nada que hacer.

Ingrid se acerco sonriendo.— ¿ Creías  que te ibas a ir?. Serás  imbécil.

— Al menos logré  mi cometido.— le susurró. — Todos  están a salvo de ustedes.

— Por ahora cielo.— se puso atrás  de él, e hizo  que pusiera su cabeza para atrás con el cuello expuesto y una daga en el.

— Esto no durara mucho. Ellos vendrán por ti, la profecía  esta a nada de cumplirse, te veré  en el infierno.

*********

Alec estaba recibiendo a su hermana, Will  y a Jace.

Se habían  mudado a un gran galeron donde  tenían espacio para todos, lo protegieron con salvaguardas  y cada uno tenía  su hora de vigilancia en pareja.

Estos tres días  alguien les estuvo ayudando, dándoles información  muy  valiosa e importante, ya sabían las debilidades de la clave, donde podían  atacar y vencer. Gracias  a esa persona tenían  un pequeño plan de invasión .

— ¿ Como han estado?— les pregunto en general.

— No mejor que tu al parecer.— contestó  Izzy  giñando le un ojo mientras volvía  a ver a Magnus. — Me imagino  que te has divertido.