Vengaza (bakutodo)

Capítulo 7

Pasaron varias semanas desde que se formó una pareja en la clase 1-A.

Para la mayoría fue una gran sorpresa al enterarse que sus dos compañeros comenzaran a salir formalmente y no anunciaran a todos, en especial era una sorpresa para Uraraka.

La chica sabía que su mejor amigo estaba entusiasmado con la idea de ser amigo de Kirishima y que cada vez que ellos dos hablaban su sonrisa brillaba mucho más que antes. Pero no pensó que ese interés se convertiría en algo mucho más importante.

No le quedó otra opción de sonreírles y desearles buenos deseos.

Su corazón estaba roto, mejor dicho destrozado. Llegó a amar cada detalle de Izuku, lo amaba tanto y mantenía una esperanza de que él le correspondiera. Esa esperanza se esfumó de un momento para otro dejándole una gran herida.

A pesar de todos esos sentimientos que la abrimaban iba a apoyar a su mejor amigo sin importar lo que pasara. Fue la decisión que había tomado desde hace mucho tiempo y una de las más difíciles.

Algunos ya sabían los sentimientos que tenía Uraraka, pues se veía en su mirada más que admiración y amistad por Midoriya. Llegaron a sentir admiración por el maduro actuar de la chica, después de todo, muy pocos se sostienen de esa manera al ver a su amor con alguien más y más a su corta edad.

Uraraka no estaba sola y pudo sostenerse gracias a su mejor amiga Tsuyu.

Más relaciones entre la clase se afianzaron, especialmente Bakugo y Todoroki.

Sus otras sesiones de estudio fueron exelentes y sin ningún problema, aunque varias veces Kaminari intentó unirse a ellos ganándose una gran negación por parte de Bakugo y una que otra explosión en el proceso. Shouto no iba a negarse a qué Kaminari se uniera con ellos aún después de lo que pasó anteriormente, pero Katsuki se adelantaba antes de que él hablara y espantaba a Denki.

Esa mañana en la U.A. era igual a los días anteriores en los que compartían su tiempo.

Bakugo y Todoroki estaban el la terraza admirando el paisaje que se estaba presentando en frente de ellos. Ambos estaban en silencio, algunas veces era interrumpido por algún que otro comentario y se comenzaban una conversación corta de cosas muy triviales.

Ellos disfrutaban sentir la presencia del otro sin necesidad de pensar mucho sobre ello.

Tanto Katsuki como Shouto estaban medianamente interesados en el otro, les era muy curioso que ahora se llevaran tan bien. Y también se dieron cuenta de que anteriormente ambos no se habían dado una oportunidad de comunicarse correctamente, guiandose sobre la primera impresión que les había dado el contrario.

Pero como siempre en un comienzo lento en una relación, surgió algo inesperadamente esperado.

Y eso es que hay algo que ninguno de sus compañeros notó lo que pasaba realmente entre esa nueva relación:

A Todoroki le gustaba Bakugo.

Midoriya tenía una leve sospecha de los sentimientos de su mejor amigo, pero decidió no suponer nada y esperar a que Todoroki le comentara la situación sentimental en la que se encontraba en esos momentos.

Pero una persona que nunca se relacionó correctamente con los demás no iba a entender o a darle importancia  lo que estaba experimentando.

Shouto se sentía extraño al pensar en los momentos con Katsuki.

No era del tipo que se sonrojaba al pensar en Bakugo, pero si de sonreír levemente cuando pensaba en las veces que Katsuki intentó hacerlo reír y no funcionó.

Cada momento al lado de Bakugo era, de alguna manera, muy importante para Todoroki. No le importarba que sea escasos los segundos en los que se encontraban. Parecía que ver la cara enojona de su amigo le alegraba a cierto punto, no era la misma sensación que tenía con Izuku y lo sabía.

Todoroki no le dió importancia, decidió ignorarlo. Pero en esos momentos, al ver a Bakugo con una expresión serena mirando a cielo disfrutando la leve brisa, sonrió mientas sentía una inmensa tranquilidad.

Bakugo no notó la atenta mirada de Todoroki hasta que volteó a verlo cruzando miradas por leves segundos, los cuales hicieron que el corazón de ambos de un vuelco por la sorpresa.

–Oye, Todoroki ¿Quieres ir a tomar algo después de ir a la biblioteca?– preguntó Bakugo.

–Pero Bakugo ¿No es que siempre vas  ir a dormir temprano?–

–No, hay veces en las que duermo más tarde– contestó de manera desinteresada.

–¡Oh! así que también eres rebelde a ese modo– se burló riendo levemente Todoroki.

–Ja, ja, ja tus bromas son muy graciosas– dijo irónicamente Bakugo.

–¿Lo notaste recién?– preguntó para reír nuevamente.

–¿Irás conmigo a comer o no?– cuestionó medianamente irritada.

–Mmmm claro– aceptó luego de pensarlo unos segundos.

Y en esta corta conversación, en teoría podríamos decir que se formó una cita entre estos dos adolescentes.